Cinco guerras para después de la guerra contra EI
Desde hace meses, Estado Islámico (EI) lleva encadenando una derrota tras otra. La pérdida de terreno es inexorable, las ciudades caen como fichas de dominó y a día de hoy sus dos principales bastiones –Mosul en Irak y Raqqa en Siria– están próximos a ser asediados. El flujo de combatientes voluntarios que llegan desde el extranjero se ha reducido al mínimo, desde los centenares que cruzaban la frontera turca cada mes en 2014 a unos cincuenta por mes en 2016. Aislado, EI ha quedado prácticamente sin capacidad para seguir sus actividades de contrabando y reabastecimiento. La moral entre la población bajo control de EI es baja, sometida a una creciente carestía de alimentos y bienes, cortes de electricidad y bombardeos cada vez más intensos.… Seguir leyendo »