Rusia se empeña en debilitarnos
"Aumento de las amenazas”: esta expresión suelen utilizarla los historiadores para describir los periodos que preceden a las grandes guerras. Aunque no soy uno de esos pájaros de mal agüero que siempre anuncian lo peor, no queda más remedio que admitir que estamos asistiendo a un incremento de las amenazas, tanto dentro como fuera de nuestras sociedades. Fragmentaciones dentro, agresiones fuera. Sin embargo, solo una de ellas debería concentrar nuestra atención y nuestros esfuerzos: la que ha desencadenado el Daesh.
Al principio en Siria y en Irak, y con un éxito militar fulgurante, si consideramos la extensión de los territorios que controla este movimiento; después, progresivamente, con ramificaciones en Yemen, luego en Libia y tal vez ya en el sur del Sáhara, en pos de una confluencia con Boko Haram, el movimiento que asuela el norte de Nigeria a sangre y fuego y amenaza Níger y Camerún.… Seguir leyendo »