La criminalización del ecocidio
Ahora que inundaciones, incendios forestales, temperaturas récord y enfermedades zoonóticas impiden ignorar la crisis climática y ecológica, puede que el mundo esté más cerca de coincidir en que los daños graves al entorno natural no pueden ser un tema reservado a acuerdos de buena voluntad: tal vez corresponda tipificarlos como un delito internacional.
La última vez que se agregó una figura delictiva al derecho internacional fue tras la Segunda Guerra Mundial. Conforme a los estatutos de Núremberg y Tokio, a los crímenes de guerra y crímenes contra la paz («guerra de agresión») que ya existían se les sumó la figura de crímenes contra la humanidad, consagrándose así la idea de que existen ciertos actos que por su gravedad nos afectan a todos, independientemente de quién sea la víctima inmediata.… Seguir leyendo »