Ruritania 'mon amour'
Los independentistas llevan años dando tumbos por el mapa en busca de referentes internacionales para la construcción de la nueva república catalana. El presidente Puigdemont echó mano, hace poco, del ejemplo de Kosovo para vaticinar que un día no muy lejano el presidente de la Generalitat será recibido en Bruselas con los mismos honores que el primer ministro kosovar. Seguramente se dejó llevar por la tensión parlamentaria para citar un pésimo ejemplo de vía a la independencia, o quizá solo pretendía disimular el pequeño fiasco diplomático de no haber conseguido una audiencia con el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker.… Seguir leyendo »