La izquierda alternativa debe usar un lenguaje común para comunicar y convencer
Desde 2016 hay un paulatino retroceso de la izquierda alternativa. Haber pasado de los cinco millones de votos, entonces de Unidas Podemos, a los tres millones de Sumar, tras cuatro años de un Gobierno de coalición que ha sabido hacer frente al impacto de la covid y de la guerra de Ucrania sobre la economía, indica que hay una crisis del vínculo de comunicación de la izquierda alternativa con su electorado.
En la base de esa crisis está, en mi opinión, el abandono de un lenguaje común que sirva para comunicar y convencer. Los líderes de esa izquierda han adoptado el “lenguaje inclusivo” como herramienta para dirigirse al conjunto de la ciudadanía, cuando en realidad este lenguaje no es sino una jerga de grupo, que sirve para que los miembros de grupos minoritarios se comuniquen e identifiquen entre sí.… Seguir leyendo »