Juan Carlos Girauta (Continuación)

Si titulara «querida amiga» sonaría a consultorio de Elena Francis. El machismo del lenguaje. En masculino tiene un punto de falsedad, de paradójico distanciamiento, como cuando lo decía Manuel Fraga, que llamaba querido amigo a quien no reconocía. Descarta ese matiz. Tú has sido un querido amigo, y en algún pliegue de los afectos lo sigues siendo aunque no nos veamos ya, ni hablemos, ni tengamos ocasión de reírnos de las solemnidades, ni nada.

Es el caso que nos hemos dedicado a una cosa muy peligrosa, la política. Para mi suerte, salté; tú te quedaste, enganchado por esa droga cuyos efectos nunca he experimentado, pero que he constatado mil veces porque tonto del todo no soy y sé sacar conclusiones de lo que veo: cositas muy deprimentes que anuncian futuras furias, gestos que con los años, y a veces con los meses, se traducen en no conocer ni a tu padre cuando se trata del poder.…  Seguir leyendo »

Que les den protocolo

Una parte del protocolo atañe al atuendo, y realmente puede resultar enojosa. Uno, con su torpe aliño indumentario, evitó la corbata en el Congreso, algo que habría horrorizado a Bono, pero situémonos en el tiempo. A mí me tocó la era de los diputados en camiseta reivindicativa, y para distinguirse de ellos bastaba con llevar camisa y americana. La corbata la reservé a las ocasiones en que estaba el Rey delante. Sensible como soy, arrastraba un cierto resquemor desde el día de mi comunión, cuando a los niños se nos vejaba con asfixiantes seudocorbatas que venían con el nudo hecho y se sujetaban bajo la solapa de la camisita con goma elástica.…  Seguir leyendo »

Contemplo los pedazos de 2022 como miraba Quevedo los muros de la patria suya, que es la nuestra. El desmoronamiento no es menor. Ya pueden ir despreciando los diletantes esta democracia bendita que agoniza, que para minar y debilitar en el peor momento siempre hay voluntarios. Es a la hora de levantar instituciones, legitimidades y prosperidades que faltan manos. España vive en la fantasía de que la política y los políticos protagonizan la vida nacional, pero eso solo sucede en raras ocasiones. Si hay suerte, acuden puntuales los brazos constructores. Parece que no van a llegar, pero de repente las necesidades históricas se cubren, como cuando Suárez y Juan Carlos y Carrillo.…  Seguir leyendo »

Feijóo ante el nuevo frentepopulismo

Al final la España de progreso consistía en liberar a una parte de los malversadores y violadores encarcelados, soltar antes a los otros y ponérselo más fácil a los futuros. Solo desde una obediencia ciega y cañariega propia de las sectas milenaristas se puede votar a quien eso perpetra. Y solo desde el interés bastardo y la conciencia de no valer nada puede el gallinero del Congreso (que empieza en la tercera fila) aprobar tales aberraciones. En cuanto al Senado, es todo gallinero… salvo cuando asiste Feijóo. Entonces es arena para pelea de gallos. El uno malayo, alto y violento; el otro inglés moderno, raza de pelea más reciente criada para no pelear.…  Seguir leyendo »

Autogolpe

Parafraseando a Gertrude Stein, un golpe es un golpe. De Estado. Este en concreto, de la modalidad 'auto' porque lo está dando el propio Gobierno. O sea, autogolpe. No en un nanosegundo, como el de Sombrero Luminoso. En un proceso que está en marcha. Es conveniente llamar a estas cosas por su nombre. El uso de la palabra precisa no solo es signo de inteligencia y pulcritud; también permite que los tardos entiendan cuanto antes lo que pasa. Kelsen: un golpe de Estado consiste en modificar la Constitución por vías diferentes a las que la propia Constitución prevé.

Anteayer, en las Cortes, los golpistas acusaron de golpistas a altas instituciones del Estado y a la oposición.…  Seguir leyendo »

La democracia arrasada

El PSOE tiene prisa, mucha prisa, y la historia demuestra que cuando le pasa eso es capaz de llevárselo todo por delante porque es la historia misma la que se acelera. Buscan apuntalar el nuevo régimen con tiempo suficiente para dedicar los últimos meses de legislatura a un antagonismo salvaje. Así, el voto a la derecha se dibujará como un intento de acabar con la democracia. Es decir, como un intento de hacer lo que Sánchez está haciendo ya. Todo se basará en la demonización sistemática del socio necesario del PP. Los noticiarios serán monográficos sobre Vox y su intrínseca naturaleza maligna.…  Seguir leyendo »

Violación real y cultura de la violación

Parece lógico pensar que reducir las penas a los violadores promueve las violaciones. Como alguien podría no estar de acuerdo, lo plantearemos en términos irrefutables: sumados todos los períodos de tiempo que iban a ser de cárcel y ahora son de libertad, y alcanzada una cantidad significativa de beneficiados, las violaciones aumentarán en la misma tasa en que la estadística sitúa la reincidencia para este tipo de delitos.

Existen posturas contrarias a las penas de privación de libertad: «Hay que vaciar las cárceles», postulaba Manuela Carmena cuando era jueza de vigilancia penitenciaria. Los que así piensan nunca reconocerán que promueven la delincuencia; sin embargo, en la idea que se han formado sobre los delitos y las penas, que puede llegar a ser una auténtica teoría, y seguramente en Carmena lo es, el riesgo del aumento de la criminalidad ha sido sometido a un juego de equilibrios con otras consideraciones y valores, y se ha acabado dando por bueno no ya el riesgo sino la certeza de que se cometerán más delitos.…  Seguir leyendo »

Catar la sangre

No sabe uno de dónde vendrá tanto miedo reverencial a la FIFA, entidad incompatible con la transparencia y ajena a los controles que, con los habituales subterfugios almibarados propios de vacuo discurso del deporte, alberga corrupciones sin cuento. Al final le va a resultar más fácil a la comunidad internacional someter a Rusia que a la cueva de Infantino. Un tipo cuya figura imaginé mucho antes de verla, hará unos cuarenta años, cuando leí 'Gog', de Giovanni Papini. Su protagonista encarna la amoralidad y el aburrimiento. Le habrá supuesto un esfuerzo considerable al jefe del último organismo impune del mundo civilizado simular indignación cuando reprochó a algunos occidentales renuentes a la tiranía que tuvieran valores.…  Seguir leyendo »

Del «no es no» al «sí es sí»

Con el «no es no» se negó a facilitar vía abstención la investidura de Rajoy, y los suyos tuvieron que echarle de la Secretaría General. Con el «sí es sí» ha tocado fondo, ha alcanzado el nadir. En el «no es no» le siguieron seis diputados. Todos tuvieron premio cuando la gran venganza, aunque tengo para mí que los que hacen balance ahora no están muy contentos. A Ábalos, por ejemplo, lo echó con recochineo. Sánchez se regodea en el sufrimiento ajeno y no distingue si la víctima es un adversario o un colega fiel.

Con el «sí es sí» está dispuesto a llevarse por delante el último atributo que le quedaba, que es el del disimulo.…  Seguir leyendo »

La traición de Sánchez

Las implicaciones jurídicas que tiene derogar el delito de sedición son muy interesantes para una clase de Derecho Penal y muy entretenidas para una tertulia de zurupetos. En el primer caso veremos cómo la inhabilitación de Junqueras y compañía desaparece, pues el reverso de la irretroactividad penal de cuanto perjudica al reo es la retroactividad de cuanto lo beneficia. Por eso se impondrán indefectiblemente las interpretaciones favorables a los que están a punto de dejar de ser sediciosos. Al tiempo. En cuanto a las tertulias zurupetas, aguardamos ansiosos el pronunciamiento de los titiriteros de guardia y de los voceros sanchistas que duermen en cajas de muñeco de ventrílocuo.…  Seguir leyendo »

Réquiem por la televisión tradicional

El programa televisivo más influyente de finales de los setenta fue 'La clave', de José Luís Balbín. El programa televisivo más influyente de los últimos años ha sido 'Sálvame', de Jorge Javier Vázquez. Lo bueno de la televisión que conocemos es que está llegando a su fin. El cambio radical en los hábitos de consumo ha alcanzado una mayoría crítica, así que ya es irreversible. Hay giros en las conductas sociales más arraigadas y, al fin y al cabo, el modelo de las televisiones tradicionales es reciente si lo miramos con las gafas de la historia. Su poder ha sido inmenso.…  Seguir leyendo »

Suspender o romper

Horas antes del comunicado del PP anunciando que había intentado «actualizar el estado de las conversaciones» con Sánchez para la renovación de órganos y para modificar la LOPJ, recordé el día en que Mariano Rajoy nos llevó a conocer el hielo, la frialdad de un bolso sobre el escaño del presidente. Un bolso dio la cara ante la censura de los socialistas, los chavistas y la morralla nacionalista, incluidos los que llevan la marca de la capucha en el aura.

En otra ocasión habría disfrutado de lo estético, no voy a negarlo, una ausencia y un bolso, ahí tan solo y mudo, tan impotente, aunque Dios sabe qué secretos del CNI guardaría junto al pintalabios.…  Seguir leyendo »

Verdes

Scarlett Johansson lamenta que la hayan hipersexualizado en su carrera. Presentarse como sujeto pasivo no deja de ser sorprendente, dado que podía rechazar los papeles. ¿O es que acaso la protagonista de 'Match Point' era la pequeña Marisol de 'Tómbola'? Se trata de paternalismo (o maternalismo), de advertir a las jóvenes. Ella tenía que abrirse camino, sin embargo, las que vienen detrás deberían tener más cuidado. Las preocupaciones de Scarlett Johansson presentan la misma estructura moral que las del mundo desarrollado. El discurso oficial de los países que hicieron su revolución industrial también es paternalista y deplora la forma en que llegaron a ser lo que son.…  Seguir leyendo »

Cuando un edificio lleno de mozos y otro lleno de chicas quedan frente por frente pasan cosas, unas lícitas y otras ilícitas. Es conveniente no confundirlas. En una sociedad civilizada, los machos han pasado a ser varones y se ha canalizado –se ha culturizado– el instinto primate. Porque somos primates. La testosterona del humano joven está disparada, lo que conduce a agresiones sexuales en grupos como los descritos por Ayaan Hirsi Ali en 'Presa'. Grupos procedentes de culturas donde el sometimiento de la mujer es real y no imaginario, al punto de ocultar sus cuerpos en diversos grados que van del velo (sea hijab o shayla) al ominoso burka, que tapa hasta el último centímetro de piel, quedando los ojos tras una rejilla.…  Seguir leyendo »

Referéndum catalán: la cançó de l'enfadós

Traducido al castellano, el cuento de nunca acabar. Lo pongo en catalán como homenaje a los pesados que llevaron a Cataluña al borde del abismo, dieron un paso al frente y ahora regresan maltrechos, oliendo a trullo y con la vieja propuesta de un referéndum 'à la québécoise'. ¡Fíjate qué novedad! Pesaditos, pesaditos. Ese paralelismo con Canadá, insostenible como pronto demostraré, ya lo agitaron. Ya tergiversaron los hechos. Ya esgrimieron su falsedad a modo de parapeto argumental cuando se les recordaba que ningún país del mundo prevé su división. O casi: Lenin adoptó en 1917 el principio de autodeterminación de los pueblos, pero pensaba en los pueblos de otras naciones.…  Seguir leyendo »

Malinche, la alegría y la envidia

Cultura es lo que diga la izquierda. Esto ya era así mucho antes de la gran mutación, de la irremisible conversión del progresismo en pura reacción, relativismo cognitivo, irracionalidad y trágala cancelador. La apropiación de lo cultural tenía su lado bueno cuando, lejos de expulsar, la izquierda integraba. Es lo que hizo Manuel Campo Vidal convirtiendo 'Simplemente María' en objeto serio de estudio. Corriendo los años, la ley de hierro de lo que yo te diga perdió toda su gracia transgresora. Ya no se trataba de incorporar lo despreciado, empeño por demás innecesario desde el urinario de Duchamp ('La fuente'). Siendo el arte desde hace un siglo lo que el (auto)ungido designe como tal, con mayor razón será cultura todo lo imaginable; cualquier cosa es susceptible de ser encontrada por alguien dispuesto a jugar al 'objet trouvé'.…  Seguir leyendo »

Lecciones de la Universidad de Granada

La izquierda no aceptará el resultado de las elecciones generales. Quien no lo haya inducido a partir de las mil exhibiciones autocráticas del sanchismo quizá lo intuya con lo sucedido el jueves en Granada. Cada uno se toma su tiempo, máxime si la conclusión es tan grave como el asilvestramiento definitivo de los representantes de media España. Así que a lo mejor se les ha escapado a muchos la corrupción de las instituciones vía colonización ideológica, se han perdido el desprestigio creciente de los valores constitucionales, no se han enterado de que a este régimen le repele la división de poderes, no perciben la consagración de una nueva regla implícita según la cual la clase política de izquierdas o nacionalista debería ser impune.…  Seguir leyendo »

Como era de esperar, las autoridades catalanas no cumplen, ni cumplirán de grado, la sentencia firme sobre el uso del castellano como lengua vehicular. Esa cosa tan discreta del 25 por ciento, para no molestar. Tan discreta que uno se plantea si no sería mejor exigir el 75 por ciento a modo de experimento, a ver qué pasa. Este desacato con recochineo no puede sorprender a nadie. Y menos que a nadie, a quienes hemos conocido de cerca la obstinada y autocomplaciente estupidez del nacionalismo catalán. Eso sí es una inmersión, y lo demás son tonterías. Una inmersión moral y psicológica de alto riesgo.…  Seguir leyendo »

Esta distopía

Llega un día en que se puede afirmar públicamente lo que todos sabían y callaban. Ocurre cuando el que habla primero es un medio respetado de la cultura hegemónica. De repente, un gran diario sectario de izquierdas –valga la redundancia– abordará a fondo, por ejemplo, el problema de la cantidad de energía contaminante que se necesita para fabricar y mantener activo un coche no contaminante. Bueno, no lo hará un solo medio porque estas cosas suelen venir coordinadas por el poder político, sobre todo en países tan serviles como el nuestro.

A partir de ese día se podrá tocar tan peliagudo asunto sin ser acusado de negacionista.…  Seguir leyendo »

Hay que hablar de la nueva izquierda porque la otra está casi extinguida y porque tiene acogotada a la vieja derecha. Si el neoizquierdista está instruido, vivirá persuadido de que la realidad no existe, pues solo hay texto. Si es un analfabeto funcional (con o sin título universitario) cita a Derrida sin leerlo y pasa la existencia refocilándose en su superioridad moral, recreándose en ese dulzor infantil y sin matices, como de chuche. El instruido es siempre un agente cultural cuyo cometido se resume en participar de una corriente a la que ellos llaman «avanzar». Es una corriente ciega; su movimiento (su 'avance') solo se certifica por su capacidad destructiva.…  Seguir leyendo »