Más de 47 millones de españoles
Por expresarnos en términos exactos, y para eso está el lenguaje, podríamos decir que, a principios de año, logramos alcanzar la cifra de 47 millones de personas empadronadas en España. No es lo mismo estar empadronado en un país que sentirse perteneciente a ese país, y en ese sector se agrupan los que les importa un comino España, los que quieren separarse de España, los que no quieren ser españoles y los que odian a los españoles, situación terrible semejante a la de un albañil que odiase a los albañiles y a la albañilería.
Esta cifra no se ha logrado merced al entusiasmo genésico de los españoles -machos y hembras- dispuestos a reproducirse, sino al aumento de la inmigración, personas que vienen de otros países, no porque les persigan políticamente, sino porque consideran que en España podrán lograr mejores condiciones económicas, y son precisamente los que más hijos tienen, porque mientras los aborígenes consideran que hasta que no se estabilice el empleo, no esté pagada parte de la hipoteca, no haya que cambiar de automóvil o de pantalla de plasma, no se debe arriesgar la pareja a tener un hijo, los recién llegados no ponen tantas exigencias, de tal manera que, hoy en día, la visita a un paritorio de cualquier hospital es comprobar que la mitad o más de la mitad de las parturientas son originarias de otros países, a pesar de que sólo representan -de momento- menos del 10% de la población total.… Seguir leyendo »