Mark Lowcock

Este archivo solo abarca los artículos del autor incorporados a este sitio a partir del 1 de diciembre de 2006. Para fechas anteriores realice una búsqueda entrecomillando su nombre.

Invertir en datos para salvar vidas

Cuando en marzo de 2020 se declaró la pandemia de COVID‑19, Afganistán sólo tenía 300 respiradores y dos unidades de cuidados intensivos. En aquel momento, los modelos epidemiológicos predecían que el país, con una población de unos 38 millones de personas, alcanzaría un pico de hasta 520 000 casos y 3900 muertes por día a inicios del verano. Ante la perspectiva de diez millones de casos en cuestión de meses, el personal humanitario y los funcionarios públicos se prepararon para una catástrofe sanitaria.

Para facilitar una asignación óptima de los limitados recursos disponibles, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) y la Fundación Rockefeller usaron datos reales de Afganistán (entre ellos las tasas de contagio por COVID‑19 y la ubicación de los centros de atención médica) para proyectar la cantidad de casos, hospitalizaciones y muertes en un período de cuatro semanas.…  Seguir leyendo »

La urgente necesidad de enfrentar la crisis alimentaria del COVID

En la actualidad, 270 millones de personas –el equivalente a todos los habitantes de Alemania, Reino Unido, Francia e Italia- están al borde de la inanición. La cifra se ha duplicado en los últimos 12 meses. Y son los niños del mundo quienes más están sufriendo.

Se estima que unos 11 millones de niños y niñas menores de 5 años enfrentan hambre extrema o inanición en 11 países de África, el Caribe, Oriente Medio y Asia. De ellos, 168.000 morirán por deficiencias de la alimentación para fines de 2022 a menos que reciban apoyo de emergencia. Y un total de 73 millones de escolares de primaria en 60 países de bajos ingresos sufren de hambre crónica.…  Seguir leyendo »

Prevenir hoy la próxima crisis alimentaria

El cóctel tóxico de cambio climático, conflictos y COVID-19 se está haciendo sentir con mayor intensidad sobre los países más pobres y vulnerables del planeta. Como resultado, 235 millones de personas necesitarán protección y asistencia humanitaria en 2021, un aumento del 40% en comparación con el año pasado.

Puede ser difícil imaginarse esas cifras en términos concretos, pero tras las estadísticas hay vidas humanas individuales. Para los más vulnerables, los efectos secundarios de la pandemia –no el coronavirus mismo- causarán los peores daños, y la pandemia de hambre por el COVID-19 amenaza con ser el que se cobre más vidas.

Se estima que la cantidad de personas con hambre crónica se elevó el año pasado en unos 130 millones, a más de 800 millones, cerca de 8 veces la cantidad de casos de COVID-19 a la fecha.…  Seguir leyendo »

Refugees from the Tigray region of Ethiopia head to a refugee camp in Hamdayet, Sudan. (Byron Smith/Getty Images)

I was first in northern Ethiopia in the mid-’80s in the wake of the horrific famine that took the lives of a million people. In the 35 years since then, Ethiopia’s story has been one of remarkable progress. Children in school and jobs created. Roads, railways, factories and power stations built. Addis Ababa became one of the leading African cities; Ethiopia a bulwark of relative stability in the region.

What’s tragic about the current conflict is the danger of all that progress being lost.

As I write, the conflict in and around Ethiopia’s northern Tigray region is well into its fifth week, with hundreds of people reportedly killed, tens of thousands displaced and millions enduring day after day without food, water and power.…  Seguir leyendo »

To stop the covid-19 pandemic, nations must look beyond their own borders.

The coronavirus is now reaching places where people live in war zones, cannot easily get their hands on soap and clean water, and have no hope of a hospital bed if they fall critically ill.

If countries with strong health-care systems are buckling under the pressure of coronavirus outbreaks, imagine what will happen in countries beset by deep humanitarian crises caused by war, natural disasters and climate change. Leaving covid-19 to spread freely in these countries would jeopardize millions and risk tipping whole regions into chaos — giving the virus the opportunity to circle back around the globe.…  Seguir leyendo »