Martín Caparrós (Continuación)

Harry Kane, delantero de la selección de Inglaterra, en un momento del partido disputado en Volgograd frente a la escuadra de Túnez Credit Matthias Hangst/Getty Images

Llevan días jugando este partido. Lo repitieron varias veces, cada quien a su modo, pero en el fondo es siempre el mismo: Portugal se atrincheró contra España, Islandia contra la Argentina, México con Alemania, Suiza con Brasil, Túnez con Inglaterra y siguen firmas. En el partido más repetido del Mundial, un equipo que se supone inferior —que las apuestas pagan más, digamos— se amontona alrededor de su arco para impedir que el otro le aplique los goles procedentes.

La diferencia entre los dos debería quedar clara. El equipo atacante vale, digamos, mil millones; el defensor si acaso cien, doscientos. El equipo atacante tiene esos jugadores que todas las marcas quieren para sus clips; el defensor, los que venden gaseosa de segunda.…  Seguir leyendo »

Rafael Márquez y el resto de la selección mexicana celebran el triunfo frente a la escuadra alemana en su debut mundialista. Credit Antonio Calanni/Associated Press

Todos gritamos ese gol. En ese bar del centro de París éramos veinte o treinta y todos lo gritamos: franceses, americanos, africanos, árabes, algún polaco, dos o tres sudacas. No es fácil poner de acuerdo a tanta gente, pero hay algo que últimamente nos reúne: en fútbol —por lo menos— nos encanta que Alemania trastabille. Nos alegra que sea como los demás, que no avance como si fuera su derecho, altivo, mentones levantados; nos alivia que se tenga que buscar la vida. Por eso, supongo, todos gritamos ese gol de México. Y, supongo, también, porque era México: uno que no parece una amenaza, sino aquel que se merece, de tanto en tanto, pobre, una alegría.…  Seguir leyendo »

Lionel Messi, capitán de la selección argentina, después del debut en el Mundial contra la selección de Islandia Credit Clive Rose/Getty Images

Un Mundial empieza tantas veces: ayer, antes de ayer, mañana. Nadie podrá convencer a colombianos o mexicanos de que este ya empezó, de que todo eso que ahora sale por la tele es algo más que el prólogo. Ni a uruguayos de que no han dado un paso de gigantes —un cabezazo de gigantes—, ni a 20 o 30 millones de argentinos de que el Mundial no acaba de empezar, ahora mismo, hace unas pocas horas. Aunque todos preferiríamos que no hubiera empezado.

La Argentina, la orgullosa patria del mejor del mundo, la supuesta potencia futbolera, chocó contra el equipo de un país que nunca antes había estado en un Mundial: Islandia.…  Seguir leyendo »

El futbolista portugués Cristiano Ronaldo celebra su tercer gol en el partido contra España en el estadio Fisht, en Sochi. Credit Hannah Mckay/Reuters

España jugaba contra Portugal: muchos anunciaban un empate y, oh sorpresa, sucedió. Nada de lo que sucede en España en estos días era lo anunciado: cayó un gobierno, el nuevo tiene dos tercios de mujeres y acoge refugiados, el presidente echa en doce horas a un ministro por un fraude fiscal, el seleccionador huye al Real Madrid. Todo en España es muy distinto de lo que iba a ser, salvo esto: su equipo empató con Portugal.

Aunque, para lograrlo, jugó un partido caprichoso. Es cierto que hizo todo lo posible por perderlo, pero al fin no lo consiguió. Cometió errores, se confió, se relajó y armó un relato extraño: el juego iba por un lado, los goles por otro.…  Seguir leyendo »

En el estadio de La Bombonera en Buenos Aires, la selección argentina disputó un partido amistoso contra Haití el 29 de mayo de 2018. Lionel Messi lo jugó. Credit David Fernández/EPA, vía Shutterstock

Suelo pensar que el comunismo no era malo por sí mismo: que lo arruinó el hecho bastante fortuito de haber triunfado en Rusia —y no en algún país menos brutal—. Pero también es cierto que triunfó en Rusia: que fue en Rusia donde millones de obreros y soldados y campesinos echaron a un déspota y creyeron que hacían un mundo nuevo, que fue en Rusia donde más millones todavía murieron para que aquellos asesinos alemanes no pudieran quedarse con el mundo, y después los trucos de la historia consiguieron convencernos de que los malos son los rusos.

Rusia es el país más ambiguo.…  Seguir leyendo »

El nuevo entrenador de la selección de fútbol de España Fernando Hierro, exjugador del Real Madrid, durante la conferencia de prensa en la que se anunció su cargo Credit Manu Fernández/Associated Press

“Ya empieza, todo empieza. O todo, felizmente se termina: a partir de esta tarde, por un mes, millones y millones esperamos que ya nada de lo que nos importa nos importe, que nada nos preocupe de lo que nos preocupa; esperamos el regalo de una vida nueva —provisoria, es cierto, pero nueva— donde nada tendrá más peso que el tobillo de Messi, la pifia de Neymar…”, escribí, hace exactamente cuatro años, y ahora ya empieza, todo empieza. Quien diga que el tiempo no es cíclico, que no vivimos el eterno retorno, que no volvemos a ser los mismos cada cuatro años —a pretender que somos los mismos una vez cada cuatro años— nunca supo qué es el fútbol.…  Seguir leyendo »

Un cartel mundialista en Kenia, Nairobi, muestra al portugués Cristiano Ronaldo, al argentino Lionel Messi, al alemán Mesut Özil y al brasileño Neymar. Credit Simon Maina/Agence France-Presse — Getty Images

Fue un hondo drama humano: un joven arquero jugaba el partido de su vida —la final de la Champions Liverpool contra el Real Madrid— y cometió dos errores ridículos, que destruyeron a su equipo y lo llevaron a perder 3 a 1. El joven arquero —alemán, para colmo– había fallado en el momento decisivo; millones lo vimos llorando con hipos en la tele. Millones nos emocionamos con la pena infinita del muchacho que había arruinado su carrera: lo compadecimos, nos identificamos con su inmenso dolor; la vida, sin duda, es demasiado cruel. Hasta que, al día siguiente, empezaron a circular las fotos del muchacho —muy cachas, muy bonito— con una modelo rubia subiendo a un Porsche platinado, y algo se rompió.…  Seguir leyendo »

Pedro Sánchez, el nuevo presidente del Gobierno español, en el Congreso Credit Pierre-Philippe Marcou/Agence France-Presse — Getty Images

Estaba muerto. Respiraba —de tanto en tanto respiraba—, pero su vida política se había acabado radical, catastróficamente. Acababa de ser destituido como secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), había devuelto su acta de diputado para no votar a Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, sus aliados lo habían traicionado, se había peleado con Felipe González, con el diario El País y con Telefónica, y decidió subirse a su coche y “volver a la carretera para escuchar a los militantes” socialistas. Corría septiembre de 2016, y fue el blanco de todas las burlas, de todos los memes. Pedro Sánchez Pérez-Castejón estaba muerto: lo sabían todos salvo él.…  Seguir leyendo »

El presidente de Argentina, Mauricio Macri, anunció a la nación el 8 de mayo el inicio de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional para obtener una línea de crédito. Credit Agence France-Presse — Getty Images

La Argentina otra vez en su tormenta. Crecen las olas, el viento ruge, el mar se encrespa y ahora, entre las olas, hay un monstruo, ese que los argentinos nos acostumbramos a pensar como la fuente de todas las desgracias: el Fondo Monetario Internacional (FMI). Después de doce años sin Fondo, el FMI vuelve a la política argentina llamado por un gobierno que muchos acusaban de trabajar para ese tipo de instituciones y que se pasó dos años intentando desmentirlo, antes de caer en su propia caricatura.

El monstruo está en la superficie. Lo bueno sería saber qué hay bajo del agua.…  Seguir leyendo »

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en Santa Clara el 11 de marzo de 2018, cuando era vicepresidente Credit Alejandro Ernesto/Agence France-Presse — Getty Images

Aquella tarde, cuando nos subimos en su Lada oficial, Díaz-Canel puso un casete de Fito Páez, empezó a repiquetear sus dedos sobre sus rodillas y me dijo: “Ya estás en Buenos Aires”; la canción que canturreaba se llamaba Circo Beat. Aquella tarde no estábamos en Buenos Aires, sino en Santa Clara, Cuba, y Miguel Díaz-Canel andaba en jeans gastados y camiseta del Che pero no tenía el pelo tan largo como me habían dicho ni había hecho todo lo que se decía. Sobre él corrían, ya entonces, las historias.

—No, eso yo no lo dije.

Me dijo, por ejemplo, cuando le conté que un amigo en La Habana decía que él se había declarado “el secretario de todos, de los obreros, los estudiantes, los campesinos, los homosexuales”.…  Seguir leyendo »

Sergio Fajardo, matemático, profesor, exalcalde de Medellín y autoproclamado político de centro, debe apelar a la polarización para pasar a la segunda vuelta y encontrar una posibilidad en el voto en contra del poder establecido.

Se había levantado a las cuatro de la mañana en su casa de Medellín para tomar un avión a las seis y llegar a Bogotá a las siete y tantas, pero ahora —nueve menos cuarto— el doctor Sergio Fajardo se ve fresco, risueño, dispuesto a saludar y sonreír a quien se le cruce en el pasillo del canal. En el estudio del programa La tele letal lo esperan dos presentadores graciositos para torearlo con preguntas patinosas; el doctor juega el juego, se ríe, habla de fútbol y demás deportes —“no, debo decir que nunca le he mirado las nalgas a Duque ni a ningún otro candidato”—, y demuestra o quiere demostrar que no es solemne, pero un par de veces para la pelota:

—Yo soy un matemático.…  Seguir leyendo »

El señor Artur Mas fue, durante años, jefe indiscutido del nacionalismo catalán. Presidente de la Generalidad, debió renunciar en 2016 para que la izquierda catalanista aceptara pactar con su partido. Hace un mes, cuando el juez Pablo Llarena, del Tribunal Supremo, lo interrogó sobre el proceso por la independencia catalana, Mas dijo que no se lo tomaran tan en serio, que la declaración de independencia no había sido para tanto: “En el mundo de la política hay un componente simbólico y estético. Muchas veces un argumento se exagera o se infla para quedar bien posicionado ante la opinión pública”, dijo. A veces parece como si los dirigentes catalanistas creyeran que pueden hacer las cosas como si.…  Seguir leyendo »

La expresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner durante un discurso en la Casa Rosada, el 22 de enero de 2014 Credit David Fernández/European Pressphoto Agency

Es peligroso hablar en estos días: nos escuchan. Nos escuchan, y sobre todo los escuchan a ellos, a los que tienen peso. Dos historias paralelas, en Argentina y España, lo muestran: dos historias que se complacen en descubrir secretos y dibujar preguntas.

En Argentina un periodista, Luis Majul, lleva meses difundiendo grabaciones de las charlas telefónicas entre Cristina Fernández viuda de Kirchner, expresidenta, ahora senadora, y su ladero Oscar Parrilli, exjefe de la inteligencia nacional, ahora su felpudo. En ellas, la señora le ordena operaciones despiadadas: “Salí a matarla. Hay que empezar a pincharla para que explique de qué vive”, dice, por ejemplo, sobre una diputada que la denunció en la justicia.…  Seguir leyendo »

Un hombre lleva la bandera de España en una protesta contra el separatismo catalán el 8 de octubre de 2017 en Barcelona. Credit Chris Mcgrath/Getty Images

No es fácil ser un país. En general no es fácil; para España, menos. El tema reaparece cada tanto y volvió a estallar hace unos días, cuando una vocalista módicamente olvidada, Marta Sánchez, se coló en todas las conversaciones por haber cantado la letra de un himno que no tiene letra.

Si nuestras culturas quisieran ser coherentes en este violento frenesí contra la violencia que las ocupa últimamente, deberían empezar por denunciar sus himnos nacionales. Los más fueron escritos hace un par de siglos —años de luchas por la patria— y no pasarían ni un examen somero de corrección política.

El más ensalzado, la Marsellesa, empieza por describir la situación: “¿Ya oís mugir en nuestros campos / a esos soldados feroces?…  Seguir leyendo »

El 1 de febrero, el presidente de Argentina recibió en la Casa Rosada al policía Luis Chocobar. Credit Presidencia de Argentina vía Associated Press

Todo empezó con una escena de película mala, pesadilla peor. Frank Wolek, de 54 años, turista estadounidense, caminaba una mañana por una calle de la Boca, barrio de Buenos Aires, cuando dos adolescentes lo asaltaron, trataron de robarle, se enfurecieron con su resistencia, lo acuchillaron muchas veces. Los ladrones se escaparon, cada cual por su lado; uno se llamaba Pablo Kukoc, de 18 años, y se llevaba la cámara de fotos hasta que tres vecinos lo interceptaron. Entonces apareció Luis Chocobar, policía de otro distrito, que salía de su casa. Se acercó, gritó algo, le metió dos balazos: “Disparé porque se venía contra mí y tenía miedo…”, diría después.…  Seguir leyendo »

Un soldado del gobierno español lanza una granada a la trinchera enemiga durante la Guerra Civil española. Credit Keystone/Getty Images

Si alguna vez —un dios no lo permita— tuviera que escribir sobre los peligros de la creencia, contaría la historia del beato Martín. Su vida fue tristemente breve: “En el pueblo de Valdealgorfa, provincia de Teruel, nació el día 11 de noviembre de 1910 el niño Martín Martínez Pascual. Sus padres eran un matrimonio muy trabajador y cristiano. Don Martín Martínez Callao era un conocido carpintero de la localidad y doña Francisca Pascual Amposta era ama de casa. El matrimonio se esforzó en inculcar muchos y buenos valores a sus tres hijos, los educaron en la fe cristiana desde una religiosidad sencilla…”, dice, con su habitual intrepidez, la gacetilla católica.…  Seguir leyendo »

El 15 de enero de 2018, el papa Francisco llegó al aeropuerto internacional de Santiago en Chile. Credit Esteban Felix/Associated Press

Son expertos en cielos. Así que habría que ver si, para el dogma cristiano, el cielo de un país es ese país. Si así fuera, el papa Jorge Bergoglio ha vuelto por fin al suyo; lo hizo, si acaso, de una forma etérea, fugitiva: lo sobrevoló en su avión papal en viaje hacia Chile y Perú. Si no, si el cielo no cuenta, en unos días cumplirá sus cinco años como papa sin ir a la Argentina. En ese lapso viajó a todos los países sudamericanos menos Uruguay, Venezuela, las Guyanas y el suyo.

Hace casi cinco años, cuando la noticia de su elección sorprendió al mundo, publiqué aquí mismo una columna que decía que me preocupaba que Habemus papam se hubiera vuelto una frase argentina: tenemos un papa.…  Seguir leyendo »

González Iñárritu durante la producción del proyecto de realidad virtual "Carne y arena" Credit Chachi Ramírez

Todo consiste en que seas otro. Todo, digo: lo mejor de la literatura, el teatro, el cine intentan ponerte en otra piel, hacerte ver las cosas como las ven otros, convertirte —por un momento— en otro. Aquí, ahora, entras a un cuarto frío, puro cemento y luces de neón, vacío, regado de zapatos viejos rotos; unos carteles dicen que los han encontrado en el desierto; otros carteles te dicen que te saques los tuyos y los dejes en ese armario y esperes a escuchar la alarma. Esperas, tienes frío, te impacientas; después la alarma suena.

Entonces abres una puerta y entras en un espacio de quince metros por quince, techo y paredes negros, muy oscuro, el suelo de piedritas que se te clavan en las plantas.…  Seguir leyendo »

Algunos independentistas celebran en la Asamblea Nacional Catalana después de la confirmación de los resultados electorales el 21 de diciembre. Credit Emilio Morenatti/Associated Press

Ayer hubo en el mundo pocos lugares más seguros, más tranquilos que la ciudad de Barcelona. La jornada pasó sin incidentes y ni siquiera actuaron los delincuentes habituales: quizá se asustaron por el despliegue de policías en las calles o, si acaso, fueron a votar. La ciudad, una vez más, no parecía un lugar donde se ponía en juego el destino de una patria.

Ayer hubo elecciones parlamentarias en Cataluña. Se discute mucho quién ganó, pero está claro quién perdió: Mariano Rajoy, el presidente del gobierno español, y su Partido Popular.

Hace exactamente 56 días el presidente Rajoy proclamó que sabía cómo acabar con la crisis catalana.…  Seguir leyendo »

Cuando en 1970 se inauguraron los “Op-Ed” (abreviatura de Opposite Editorial) en The New York Times, la idea era agregar una página que ofreciera un contrapunto a los comentarios del comité editorial del periódico, incorporar voces nuevas y diversas. Desde entonces, la consigna fue invitar a escritores, pensadores, analistas, artistas y activistas con perspectivas variadas y a menudo contrastantes que contribuyeran a la creación de un punto de reunión, un espacio para la conversación plural, abierta, clara e inteligente.

Es eso lo que hacemos en The New York Times en Español: promover en nuestro idioma una conversación de interés público que sea provocadora, muchas veces controvertida y siempre fundamentada en hechos.…  Seguir leyendo »