Efectivamente, no era un intelectual
Hace unos días, el escritor Antonio Gala, a cuenta de la muerte de Adolfo Suárez, relataba que se enteró de la noticia de su nombramiento como presidente del Gobierno por la televisión, en julio de 1976, mientras almorzaba con José María de Areilza y con Joaquín Garrigues, quien comentó: "¿Crees que habrá leído a Goethe?" No era el primer dardo ni sería el último que se lanzaba contra el entonces joven y ambicioso falangista Adolfo Suárez por su supuesta escasa formación intelectual y preparación.
Este comentario me trajo a la memoria otra anécdota que me ocurrió en 1981, cuando trabajaba en la agencia nacional de noticias Europa Press, en la sección de Política Interior y Exterior de España.… Seguir leyendo »