Cataluña: pragmatismo versus confrontación
El desafío a las instituciones del Estado que ha planteado el Gobierno catalán pone de manifiesto la existencia de un problema político de indudable envergadura que debe tener una respuesta política antes que judicial. La plurinacionalidad que se da en algunos estados compuestos es un fenómeno complejo que no debe sofocarse como si de un incendio se tratase -agua hasta que se apague- porque el recurso al sometimiento o a la imposición de la ley no hace sino exacerbar más el sentimiento soberanista y provocará un efecto llamada que hará crecer aún más sus filas.
Desde las elecciones del 27-S en Cataluña, lejos de remitir la tensión, vivimos episodios que cada vez hacen más complicada una solución pactada al no dejar de sucederse gestos que pueden calificarse como medidas de retorsión, porque a un gesto político poco amistoso de una parte le sucede como respuesta un gesto político también poco amistoso de la otra.… Seguir leyendo »