Naomi Klein

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Los manifestantes gritan consignas durante una protesta contra la detención de la activista climática Disha Ravi, en Calcuta, India, el pasado 23 de febrero.RUPAK DE CHOWDHURI / Reuters

Las cámaras que se amontonaban frente a la enorme prisión de Tihar, en Nueva Delhi, evocaban el frenesí mediático esperable cuando se trata de un primer ministro atrapado en un escándalo de corrupción o quizá una estrella de Bollywood a la que han pillado en una cama que no era la suya. Pero las cámaras esperaban a Disha Ravi, una activista del clima de 22 años, vegana y amante de la naturaleza, que, sin proponérselo, ha acabado en medio de una aventura legal digna de Orwell, compuesta por acusaciones de sedición, incitación y participación en una conspiración internacional que incluye, entre otros, a agricultores indios en rebelión, la estrella mundial Rihanna, supuestos planes contra el yoga y el chai, el separatismo sij y Greta Thunberg.…  Seguir leyendo »

‘The one that preoccupies me most is that core question of whose security is ultimately valued in our lopsided world.’ Illustration: Andrzej Krauze

Whose security gets protected by any means necessary? Whose security is casually sacrificed, despite the means to do so much better? Those are the questions at the heart of the climate crisis, and the answers are the reason climate summits so often end in acrimony and tears.

The French government’s decision to ban protests, marches and other “outdoor activities” during the Paris climate summit is disturbing on many levels. The one that preoccupies me most has to do with the way it reflects the fundamental inequity of the climate crisis itself – and that core question of whose security is ultimately valued in our lopsided world.…  Seguir leyendo »

For almost 20 years, I’ve been spending time on a craggy stretch of British Columbia’s shoreline called the Sunshine Coast. This summer, I had an experience that reminded me why I love this place, and why I chose to have a child in this sparsely populated part of the world.

It was 5 a.m. and my husband and I were up with our 3-week-old son. Looking out at the ocean, we spotted two towering, black dorsal fins: orcas, or killer whales. Then two more. We had never seen an orca on the coast, and never heard of their coming so close to shore.…  Seguir leyendo »

Durante la cumbre del G-20 de los días 26 al 29 de junio pasado, mi ciudad parecía una escena del crimen. Los delincuentes desaparecían en la noche huyendo del lugar. No estoy hablando de los chicos vestidos de negro que rompían ventanas o incendiaban coches de policía. Estoy hablando de los jefes de Estado que desgarraban las redes de la protección social y quemaban buenos puestos de trabajo en medio de una recesión. Frente a los efectos de una crisis creada por la capa de los más ricos y privilegiados del mundo, decidieron endosar la factura a la gente más vulnerable y pobre en sus propios países.…  Seguir leyendo »

Si hemos de creer a los ministros de Finanzas del G-7, Haití se halla en camino de conseguir algo que ha merecido durante muchísimo tiempo: una plena condonación de su deuda externa.

En Puerto Príncipe, el economista haitiano Camille Chalmers ha observado la evolución de los acontecimientos con prudente entusiasmo. La cancelación de la deuda constituye un buen comienzo, como ha declarado a la cadena de televisión Al Yazira en inglés, pero "es hora de ir mucho más lejos. Hemos de hablar de indemnizaciones y de actos de restitución en relación con las desastrosas consecuencias de la deuda".

En esta historia, la propia idea de que Haití es un país deudor debe ser desechada.…  Seguir leyendo »

On the ninth day of the Copenhagen climate summit, Africa was sacrificed. The position of the G77 negotiating bloc, including African states, had been clear: a 2C increase in average global temperatures translates into a 3–3.5C increase in Africa. That means, according to the Pan African Climate Justice Alliance, "an additional 55 million people could be at risk from hunger", and "water stress could affect between 350 and 600 million more people".

Archbishop Desmond Tutu puts it like this: "We are facing impending disaster on a monstrous scale … A global goal of about 2C is to condemn Africa to incineration and no modern development."…  Seguir leyendo »

El otro día recibí un ejemplar del avance del libro The battle of the story of the battle of Seattle (la batalla de la historia de la batalla de Seattle), de David Solnit y Rebecca Solnit.

Su publicación coincidirá con el décimo aniversario de la histórica coalición de activistas que hizo fracasar la ronda de la cumbre de la Organización Mundial del Comercio en Seattle, chispa que inflamó un movimiento global antimultinacionales.

El libro es un relato fascinante de lo que sucedió realmente en Seattle, pero cuando hablé con David Solnit, el gurú de la acción directa que ayudó entonces a idear el cerco, le noté menos interesado en rememorar los acontecimientos de 1999 que en referirse a la próxima cumbre de las Naciones Unidas sobre el cambio climático en Copenhague (7-18 de diciembre) ya las iniciativas a favor de la "justicia en el ámbito del clima" que ha contribuido a organizar en todo Estados Unidos.…  Seguir leyendo »

Entre el cúmulo de explicaciones de la concesión del premio Nobel de la Paz a Barack Obama, la que sonó más verdadera salió de la boca del presidente francés, Nicolas Sarkozy: "Sella el regreso de Estados Unidos al corazón de todos los pueblos del mundo".

En otras palabras, fue la manera de decir Europa a Estados Unidos: "Te queremos de nuevo", algo parecido a ese singular ritual de "renovación de votos" que celebran las parejas tras atravesar una mala racha. Ahora que Europa y Estados Unidos han vuelto a unirse de modo oficial, tal vez valga la pena preguntar: "¿Se trata de algo positivo?".…  Seguir leyendo »

En el año 2004 realizamos un documental titulado La toma (página web: thetake. org) sobre el movimiento argentino de empresas dirigidas por los trabajadores. Después del dramático hundimiento económico del país en el 2001, miles de trabajadores irrumpieron en sus fábricas cerradas y reanudaron la producción, creando cooperativas laborales.

Abandonados por patronos y políticos, los trabajadores recuperaron sus salarios e indemnizaciones impagadas sin dejar de reivindicar sus puestos de trabajo en el proceso en cuestión.

Cuando fuimos de gira por Europa y Estados Unidos para presentar la película, cada sesión de preguntas y respuestas terminaba con la pregunta: "Todo eso está muy bien en Argentina, pero ¿podría llegar a suceder aquí?".…  Seguir leyendo »

No todo funciona a las mil maravillas en el país de la obamamanía, y lo cierto es que no se discierne con claridad lo que explica este cambio de talante. Tal vez obedezca al rancio olor que despide la última operación de rescate financiero a cargo del Tesoro estadounidense. O a las noticias en el sentido de que el principal asesor económico del presidente, Larry Summers, ganó millones de bancos y fondos especulativos de alto riesgo de Wall Street cuya regulación más estricta obstaculiza ahora. O acaso todo el tema ya empezó antes, con el silencio de Obama durante el ataque de Israel contra Gaza.…  Seguir leyendo »

Watching the crowds in Iceland banging pots and pans until their government fell reminded me of a chant popular in anti-capitalist circles in 2002: "You are Enron. We are Argentina."

Its message was simple enough. You - politicians and CEOs huddled at some trade summit - are like the reckless scamming execs at Enron (of course, we didn't know the half of it). We - the rabble outside - are like the people of Argentina, who, in the midst of an economic crisis eerily similar to our own, took to the street banging pots and pans. They shouted, "¡Que se vayan todos!"…  Seguir leyendo »

It's time. Long past time. The best strategy to end the increasingly bloody occupation is for Israel to become the target of the kind of global movement that put an end to apartheid in South Africa. In July 2005 a huge coalition of Palestinian groups laid out plans to do just that. They called on "people of conscience all over the world to impose broad boycotts and implement divestment initiatives against Israel similar to those applied to South Africa in the apartheid era". The campaign Boycott, Divestment and Sanctions was born.

Every day that Israel pounds Gaza brings more converts to the BDS cause - even among Israeli Jews.…  Seguir leyendo »

Sea cual sea el significado de los acontecimientos de la semana pasada, nadie debería creer las exageradas afirmaciones de que la crisis de los mercados señala la muerte del libre mercado. La ideología del libre mercado siempre ha servido a los intereses del capital, y su presencia crece y disminuye dependiendo de la utilidad para dichos intereses.

En épocas de auge, resulta provechoso predicar el laissez faire porque un Estado poco presente permite el crecimiento de las burbujas especulativas. Cuando esas burbujas estallan, la ideología se convierte en una traba y entra en estado de hibernación mientras el "gran gobierno" corre a prestar auxilio.…  Seguir leyendo »

Después que el petróleo cruzó la barrera de los 140 dólares por barril, incluso los presentadores de televisión más derechistas han tenido que mostrar su credo populista dedicando parte de sus programas a vapulear a las grandes empresas petroleras. Algunos han ido tan lejos como para invitarme a dialogar amablemente sobre un insidioso nuevo fenómeno: "El capitalismo de desastre". Todo va generalmente bien hasta que deja de hacerlo.

Por ejemplo, el presentador de radio Jerry Doyle, un "conservador independiente" y yo, teníamos una conversación perfectamente amable acerca de empresas de seguros turbias y políticos ineptos, cuando esto ocurrió: "Creo que hay una manera rápida de bajar los precios", anunció Doyle.…  Seguir leyendo »

Once oil passed $140 a barrel, even the most rabidly rightwing media hosts had to prove their populist credibility by devoting a portion of every show to bashing Big Oil. Some have gone so far as to invite me on for a friendly chat about an insidious new phenomenon: "disaster capitalism." It usually goes well - until it doesn't.

For instance, "independent conservative" radio host Jerry Doyle and I were having a perfectly amiable conversation about sleazy insurance companies and inept politicians when this happened: "I think I have a quick way to bring the prices down," Doyle announced. "We've invested $650bn to liberate a nation of 25 million people, shouldn't we just demand that they give us oil?…  Seguir leyendo »

Cuando llegó la noticia del catastrófico terremoto en Sichuan, recordé a Zheng Sun Man, un ejecutivo especialista en seguridad que conocí en un viaje reciente a China. Zheng dirige Aebell Electrical Technology, una empresa con sede en Cantón que fabrica cámaras de vigilancia y las vende al Gobierno. Zheng, salido de una escuela de administración de empresas, de 28 años, quiso persuadirme de que sus cámaras y altavoces no eran usados contra los activistas pro democracia o los sindicalistas. Son para lidiar con desastres naturales, explicaba Zheng, como las monstruosas tormentas de nieve antes del Año Nuevo lunar. Durante la crisis, me aseguró, el Gobierno "pudo usar los datos de las cámaras del ferrocarril para organizar una evacuación".…  Seguir leyendo »

When news arrived of the earthquake in Sichuan, my mind turned to Zheng Sunman, a security executive I met on a recent trip to China. Zheng heads a Guangzhou-based company that makes surveillance cameras and PA systems for the government.

Zheng was determined to persuade me that his cameras are not being used against pro-democracy activists. They are for managing natural disasters, Zheng explained, pointing to the freak snowstorms before the lunar new year. During the crisis, the government "was able to use the feed from the railway cameras to communicate how to deal with the situation and organise an evacuation.…  Seguir leyendo »

Nativity scenes are plentiful in San Cristóbal de las Casas, a colonial city in the highlands of Chiapas, Mexico. But the one that greets visitors at the entrance to the TierrAdentro cultural centre has a local twist: figurines on donkeys wear miniature ski masks and carry wooden guns.It is high season for "Zapatourism", the industry of international travellers that has sprung up around the indigenous uprising here, and TierrAdentro is ground zero. Zapatista-made weavings, posters and jewellery are selling briskly. In the courtyard restaurant, where the mood at 10pm is festive, verging on fuzzy, college students drink Sol beer. A young man holds up a photograph of the rebel leader, Subcomandante Marcos, as always in a mask with a pipe, and kisses it.…  Seguir leyendo »

Solía pensar preocupada que Estados Unidos estaba a punto de ser tomado por extremistas que creen con sinceridad en la llegada del Apocalipsis y que ellos y sus amigos serían llevados a un refugio paradisiaco. Pero luego lo he pensado mejor. El país está realmente en la garra de extremistas decididos a llevar a cabo el clímax bíblico - la salvación de los elegidos y la incineración de las masas- pero sin intervención divina. El cielo puede esperar. Gracias al floreciente negocio de los servicios privatizados de atención a los desastres, estamos teniendo el momento del éxtasis aquí en la tierra.…  Seguir leyendo »

The tall graduate student, visiting the US from Sweden, would not be satisfied with a quip. He wanted answers. "They cannot only be driven by greed and power. They must be driven by something higher. What?" Don't knock power and greed, I tried to suggest - they have built empires. But he wanted more. "What about a belief that they are building a better world?"

Since I began touring with my book The Shock Doctrine, I have had a number of exchanges like this, revolving around the same basic question: when hard-right political leaders and their advisers apply brutal economic shock therapy, do they honestly believe the trickle-down effects will build equitable societies - or are they just deliberately creating the conditions for yet another corporate feeding frenzy?…  Seguir leyendo »