La tentación populista
El Brexit consume las energías de Reino Unido desde hace ya tres largos años. El proceso comenzó con el temerario referéndum convocado por el ex primer ministro Cameron. Su objetivo era zanjar el interminable debate sobre la permanencia británica en la UE. Paradójicamente, lo único que el referéndum zanjó fue el Gobierno del propio Cameron. Desde entonces, el Brexit ha derivado en un drama político interminable, en el que uno de los más sufridos protagonistas es el venerable constitucionalismo británico.
Basado en un sistema de soberanía parlamentaria, Westminster es el centro mismo de la vida política de Reino Unido. Aferrados a la versión más nacionalista de este modelo constitucional, los brexiters argumentaron que la salida de la UE permitiría a los británicos “recuperar el control”, dando a Westminster la posibilidad de decidirlo todo sin las imposiciones de los políticos de la lejana Bruselas.… Seguir leyendo »