Ojalá termine el silencio
La democracia proclama que la soberanía reside en el pueblo, del que emanan los poderes del Estado. Los poderes del Estado son gestionados por los políticos a los que el pueblo elige periódicamente. Las grandes decisiones de un país nacen en el sentimiento popular interpretado y elaborado en el Parlamento.
De esta lógica democrática y sencilla fuimos testigos cuando allá por los años setenta decidimos entrar en Europa. Uso el plural porque fue una decisión del pueblo español constituido en sociedad civil. Es decir del pueblo con responsabilidad de expresarse y razonar. Es cierto que todos los partidos políticos de nuestro arco parlamentario, sin excepción alguna, apoyaron nuestra marcha hacia Europa y también es cierto que dos grandes partidos la gestionaron de forma excelente, con la valiosa cooperación de los demás.… Seguir leyendo »