Rosa Cullell

Este archivo solo abarca los artículos del autor incorporados a este sitio a partir del 1 de diciembre de 2006. Para fechas anteriores realice una búsqueda entrecomillando su nombre.

El lema de la Diada, Objetivo: Independencia, fue más de lo mismo, sin concretar ni comprometerse con la ciudadanía que les vota y quiere mucho más, incluso volver a las andadas. Antes del último Onze, los dos partidos del Govern discutieron hasta sobre si votar era bueno (Junqueras) o malo (Torra-Puigdemont). Y han sido sus subvencionadas organizaciones, ANC y Omnium, las que han llevado la batuta, animando a los fieles, demostrando, de nuevo, que la calle —también la de Barcelona— es suya. Mientras, Oriol Junqueras pide elecciones, para ganarlas, y Quim Torra sueña con tsunamis, para no perderlas. De momento, el 11 de septiembre solo cayeron cuatro gotas y tuvo la menor participación de los últimos ocho años.…  Seguir leyendo »

Va acercándose la edad de jubilación. Seré una señora que habrá cotizado lo suficiente para cobrar una pensión igual, y eso es lo raro, a la de mi marido y sus colegas. Trabajo y soy independiente desde los 19 años. Hace tiempo que conseguí, sin hacer mucho ruido o quizás por ello, ganar un sueldo por encima de la media; de la media masculina. Y en estos cuarenta años de profesión no ha cambiado la primera pregunta de un nuevo conocido: “¿Cómo has conseguido conciliar trabajo y familia?”. Me lo preguntan por un solo motivo, porque soy mujer. Por eso, esencialmente, entiendo que aparezco hoy —Día Mundial de la Violencia de Género— en estas páginas.…  Seguir leyendo »

Solía ser a fin de mes, después de las Navidades o de otra ocasión ligada a lo que en mi familia llamábamos gastos extraordinarios. Sacábamos periódicos viejos y con ellos envolvíamos "la plata"; viejos candelabros y bandejas recibidas en herencia. Cogíamos el metro y nos acercábamos al Monte de Piedad de La Caixa, en la Vía Laietana de Barcelona. Con el fruto del empeño en billetes de 100 pesetas, volvíamos a casa. Teníamos unos meses para pagar y recuperar la plata. Y si no, pues qué se le iba a hacer.

Es una historia nostálgica, envuelta en ese olor de naftalina típico de los años cincuenta.…  Seguir leyendo »