Aspectos Generales (Continuación)

El diálogo negociador que mantienen las direcciones del PSOE y del PSC para establecer las bases de una nueva relación –obligada por la discrepancia sobre el derecho a decidir y, en última instancia, sobre el sujeto de soberanía– trata de salvar un programa común en todos los demás aspectos de las políticas públicas. Ambas formaciones se necesitan, y la confrontación de votos en el Congreso los obliga a fijar un protocolo que subraye la independencia mutua. Pero ha sido la naturaleza identitaria del disenso lo que ha puesto más en evidencia que PSOE y PSC atraviesan las mismas dificultades y se enfrentan a idénticos desafíos para su pervivencia como opciones hegemónicas de la izquierda y como alternativa de gobierno.…  Seguir leyendo »

Albert Camus comienza su obra El mito de Sísifo con las siguientes palabras: «No hay más que un problema filosófico verdaderamente serio: el suicidio. Juzgar si la vida vale la pena o no de ser vivida es responder a la cuestión fundamental de la filosofía». Una decisión de carácter personalísima que puede extrapolarse sin embargo al ámbito social, y en este caso a los ciudadanos de esta España constitucional. Pues bien, no les puedo ocultar que las palabras del existencialista escritor francés me persiguen cuando asisto perplejo y alarmado a la suicida demolición de nuestros principios y valores constitucionales, y al irresponsable derribo de las instituciones.…  Seguir leyendo »

No tenemos tradición ni para la llamada novela negra, menos aún para el género de espías. Los maestros sabían de qué escribían. Dashiell Hammett, había ejercido de canalla contratado por los empresarios para dedicarse a romper huelgas, y con toda probabilidad en más de una ocasión se pasó en la paliza. La tapadera era una agencia de detectives en la que estaba empleado. La experiencia debió de ser tan demoledora que de allí salió para cumplir tres cosas que condicionarían lo que le quedaba de vida: escribir novelas, hacerse comunista –lo que le costaría cárcel en los Estados Unidos de la libertad y la guerra fría–, y beber hasta matarse.…  Seguir leyendo »

Hay que reconocer que, desde el punto de vista narratológico, este relato de la crisis económica en el que llevamos sumidos ya más de cinco años está bastante bien traído. Cuenta con una gigantesca adversidad inicial (la explosión de la burbuja inmobiliaria y la consiguiente crisis de la deuda bancaria) y con una gran meta final a modo de desafío del destino (el equilibrio presupuestario); tiene sus héroes esforzados y dispuestos al sacrificio (los pueblos endeudados y cada vez más recortados, y los líderes políticos que los conducen por la estrecha senda de la austeridad) y sus adversarios malignos (los “mercados” y los “inversores”, ciegos ante cualquier cosa que no sea el beneficio inmediato, en santa alianza con el espíritu prusiano), cada uno de los cuales tiene a su vez aliados ambivalentes (los movimientos populistas y los ultraliberales, ambos siempre ofuscados); y dispone de numerosos mecanismos de aumento de la tensión en forma de fluctuación de las primas de riesgo, y de un depósito muy nutrido de episódicos “giros inesperados de la fortuna” prestos a quebrantar las fronteras de la verosimilitud para impedir que decaiga la atención.…  Seguir leyendo »

"No hay ningún legislador, por sabio que sea, capaz de producir leyes de las que un gobernante no pueda hacer mal uso", ha dicho alguna vez el Tribunal Constitucional, en el ejercicio de una sana pedagogía jurisdiccional. En otras palabras, al estilo de Voltaire: sólo el doctor Pangloss y el ingenuo Candide («joven metafísico, ignorante de la cosas de este mundo») admiten que una ley sirve de remedio universal para la condición humana. En efecto, no hay soluciones mágicas, en la política o en la vida. Sin embargo, las buenas leyes son condición necesaria para establecer un modelo civilizado de convivencia, cuya única legitimidad deriva –en pleno siglo XXI– de la democracia constitucional y sus señas de identidad: soberanía nacional, instituciones representativas, división de poderes y derechos fundamentales.…  Seguir leyendo »

Si Bárbara Tuchman nos enseñó a entender el siglo XX colocándonos ante el Espejo distante del XIV en el que ya aparecen reflejadas las devastadoras guerras «mundiales», las mortíferas epidemias o el antisemitismo como motor del odio, tal vez podamos recurrir a una técnica similar para comprender las raíces profundas del mayor escándalo que sobrevuela hoy la política española.

Muchas veces se ha presentado la corrupción, con toda su panoplia de episodios pintorescos en los que el corrupto aguza el ingenio para maximizar su beneficio, como una continuación natural de la tradición recogida en nuestra novela picaresca. Así el despacho de Juan Guerra pudo perfectamente ubicarse en el patio de Monipodio; a algunos personajes de la Gürtel les vienen como un guante los estereotipos de Rinconete y Cortadillo; y Mulas y su esposa evocan a Chirinos y Chanfalla haciendo bailar a Amy Martin, ante los crédulos ojos de los dirigentes del PSOE, como gran estrella de su Retablo de las Maravillas.…  Seguir leyendo »

Aníbal, general de Cartago, contemplaba Roma, después de la batalla, de tantas batallas, preguntándose si el deseo de aquel éxito no habría sido su propio fracaso. Había dejado en el camino de las victorias a Himilce, a sus hombres y a sus hijos. Había olvidado por qué Roma era su obsesión, pues hizo de la derrota a Roma su única razón para vivir, para vencer, para perder, para olvidar a su pueblo. Lo había perdido todo para no ganar nada. Y su pueblo lo alejó de él.

En numerosas ocasiones percibimos el éxito y la victoria como el objetivo, el único fin.…  Seguir leyendo »

En tiempos de desolación… mejor cambiar de rumbo. La derecha está destruyendo el sistema social surgido tras la II Guerra Mundial en el que, frente al igualitarismo sin libertades del “telón de acero”, se permitían ciertas libertades sin igualdad. Como muy bien define uno de los protagonistas de la excelente y recomendable película No: “se trata de que en nuestro sistema (capitalista) cualquiera puede ser rico, cualquiera, no todos…”. En ese juego tragicómico en el que unos pocos dejan creer a todos que pueden ser uno de esos pocos se sustenta la fuerza del actual sistema. Para ello los poderes económicos tuvieron que ceder a la presión de una mayoría que había conquistado, primero en la guerra y después en las calles y en las urnas, el derecho a una vida mejor a través del Estado del Bienestar.…  Seguir leyendo »

Hay ocasiones en que tiene sentido recurrir como diagnóstico de situación al orteguiano “No sabemos lo que nos pasa y eso es lo que nos pasa”. La coyuntura actual no es precisamente una de ellas. Los españoles sí sabemos lo que ahora nos pasa: ha ido quedando expresado mes a mes, de forma clara y rotunda, en los sondeos de Metroscopia para este periódico. Y resulta llamativa, por cierto, la plena coincidencia de este diagnóstico ciudadano con el que a lo largo de los últimos días ha venido expresando en estas páginas una variada nómina de especialistas.

Todavía son dos veces más numerosos los españoles que piensan que lo que está fallando son los actuales políticos y no la forma en que está organizado nuestro sistema democrático (46% frente a 24%, si bien un porcentaje creciente —23% ahora, 13% hace dos años— concluye que ambos fallan).…  Seguir leyendo »

Los españoles se merecen un Gobierno que acierte en su decisiones y comunique bien, incluidas las malas noticias. Como la situación es poliédrica, multicolor y cambiante y mi conocimiento limitado, no puedo juzgar la idoneidad de las medidas. Ahí solo cuento con intuiciones, que se tornan certezas al valorar su comunicación.

Nunca pensé que un doctorado en Comunicación médica me brindara tantas consultas de organizaciones empresariales, políticas, económicas y sociales. Lo comprendí más al leer dos libros de sendos doctores: Cómo dar las malas noticias en Medicina, de Marcos Gómez Sancho, especialista en cuidados paliativos; y Patologías en las organizaciones, del pensador del management Javier Fernández Aguado.…  Seguir leyendo »

La corrupción revela que ese mal no está tan lejos. Está en el partido, en las mejores familias, entre los más estrechos colaboradores... Quienes caen en la trampa no son «monstruos de maldad», quizá simplemente asintieron mientras escuchaban el silencio de otros; metieron la cuchara en el mismo puchero al que todos llevaban la suya... Esa cercanía del mal, esa facilidad y suavidad con la que se desliza, hace recordar a Fausto y a Dorian Gray.

Mefistófeles empieza mostrándose como un caniche que acompaña a Fausto en una noche de tormenta; conserva esa familiaridad del animal doméstico que nos sigue y acompaña fielmente sin hacer preguntas molestas en la desapacible oscuridad.…  Seguir leyendo »

El reciente debate ha mostrado, una vez más, que la capacidad dialéctica del presidente del Gobierno está muy por encima de la de sus interlocutores. También que es capaz de groseros errores políticos. Aludir a los saneados ingresos que podría tener (y que, de hecho, al parecer durante bastantes años ha tenido) como registrador de la Propiedad para demostrar el desinterés de su dedicación a la política, arroja alguna sombra sobre el de aquellos (y no son pocos) que van a la política con ingresos menos jugosos. Pero aún más grave ha sido el de su rotunda negativa a pronunciar el nombre del extesorero de su partido.…  Seguir leyendo »

Desde comienzos del año, España permanece atrapada en el síndrome de la corrupción, sobre todo tras las revelaciones filtradas a través de las páginas de este periódico. Pero no se trata solo del caso Bárcenas, pues junto a él se han venido a añadir otros muchos sumarios para enlazarse todos ellos en una misma espiral de corrupción. Y es verdad que a las generaciones más jóvenes esta escandalera tan sórdida les ha podido parecer una sorpresa mayúscula. Pero para las generaciones maduras, todo esto nos resulta fastidioso por reiterado, redundante y archisabido. Tanto es así que nos asalta la familiar sensación del déjà vu, del eterno retorno de lo mismo como en la cansina repetición del día de la marmota, pues todo recuerda demasiado a lo que ya vivimos en otra época anterior.…  Seguir leyendo »

Fui colaborador cercano de Mariano Rajoy en su primer ministerio (1996-1999). Era de Administraciones Públicas. Yo, recién llegado al Congreso, era portavoz del PP en esa comisión. Mi oponente en el PSOE era un tal José Luis Rodríguez Zapatero (que llevaba 10 años). Ambos llegarían a ser presidentes del Gobierno. Yo abandonaría la política. Aunque como abogado del Estado tenía muchas posibilidades en el ámbito privado, decidí volver al servicio público. Me fui con el honor de haber sido representante de los ciudadanos y la decepción de haber conocido el lado oscuro de la política. Mi alejamiento comenzó por mi desacuerdo público sobre la guerra de Irak y el alejamiento del centrismo por el PP.…  Seguir leyendo »

España atraviesa momentos de enorme tribulación. Un diario ha publicado la fotocopia, o la fotocopia de la fotocopia, de unos papeles en que aparecen especies y fealdades cuya confirmación apartaría de la vida pública a gran parte de la cúpula del PP. El episodio es equívoco, confuso, increíble en muchos sentidos. Consta que algunos pormenores sueltos son exactos: tal cual aludido ha dado un paso al frente y corroborado noticias que no eran secretas ni manchaban su buen nombre. ¿Hemos de deducir que los demás son culpables? Esto sería monstruoso: equivaldría a dar por buenos unos datos que no sabemos de dónde proceden, ni en qué proporción responden a la verdad.…  Seguir leyendo »

El problema principal son los partidos políticos. La mayor parte de los escándalos de corrupción deriva de su financiación. Sucede que en España los partidos han estado largamente sobreprotegidos mediante el sistema electoral, numerosas prerrogativas, abundantes subvenciones públicas y ausencia de control. Como consecuencia, se han podido profesionalizar como políticos muchas personas con escaso coste de oportunidad en otras actividades. El fruto es que el nivel medio de la clase política española es posiblemente el más bajo de Europa (incluso en Grecia y en Portugal los primeros ministros y los ministros de Hacienda son capaces de leer y tener una conversación con sus colegas europeos en inglés).…  Seguir leyendo »

Por insólito y por lúcido, un artículo reciente en este periódico destaca sobre la inmensa mayoría en torno a la situación política de la Italia de hoy. La escritora nacida en 1965, Melania G. Mazzucco, ha ofrecido una lectura a contracorriente y perspicaz de lo que ha sucedido allí, más allá del desconcierto y la inquietud cierta por un estilo, una verbosidad y unos métodos nuevos. Ella no establece vínculo alguno con España pero la analogía es algo más que plausible, aunque aquí todavía no exista nada semejante al partido que encarna Grillo (hasta que alguien embarque a Jordi Évole o al Wyoming).…  Seguir leyendo »

A lo largo de los últimos 14 meses, hemos asistido a una machacona utilización de la retórica del acuerdo y del consenso por parte del PP. Pero, en la práctica, esas palabras, acuerdo y consenso, no han dejado de ser eso: mera retórica, vacía de contenido. En el debate del estado de la nación (DEN), el presidente Rajoy afirmó que había ofrecido al PSOE toda una serie de acuerdos: pero los hechos demuestran que, amparado en su mayoría absoluta, nunca tuvo la más mínima voluntad política de pasar de las palabras a los hechos.

La situación requería y requiere recuperar consensos básicos ante la gravedad de los problemas que afectan a una ciudadanía que no entiende que los grandes partidos no se puedan poner de acuerdo para poner en marcha soluciones a esos problemas.…  Seguir leyendo »

No es cierto, se dice José K. en ese duermevela en el que se han convertido sus noches desde hace algunos meses, que el cementerio esté lleno de cenas copiosas. Lo estará, sugiere, de cenas en exceso frugales, como la suya, que la pensión da para lo que da y se acabaron aquellos tiempos de las acelgas y el lenguadito. Las acelgas. Sin más. Y en esa soñera, se entrevé nuestro hombre a sí mismo deambulando por las calles del barrio, vestido con maltrechos harapos que parecen sacados de Los Miserables. Gran Victor Hugo. Quizá por acercarse al siglo, el dios de los sueños le calza, además, un gorro frigio, consciente de que a José K.…  Seguir leyendo »

Aumenta la sensación generalizada de que en España nos encontramos ante un final de etapa. La crisis económica nos ha puesto frente al espejo. Al contemplarse, la sociedad española no se gusta a sí misma. Del orgullo reciente hemos pasado al desánimo general.

A partir de este diagnóstico, el profesor Manuel Jiménez de Parga, veterano catedrático de Derecho Político, pronunció el pasado 19 de febrero una brillante conferencia en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Los que le conocemos desde hace muchos años sabemos que siempre ha sido persona optimista y positiva. Ni en momentos muy difíciles dejó de serlo.…  Seguir leyendo »