Lorca de ida, de vuelta y de vuelta y media
«Laura García Lorca ha dimitido del patronato lorquiano tras las declaraciones contra la memoria histórica del nuevo director», titulaba esta semana El País. La razón tiene que haber sido otra, porque LGLorca nunca ha estado a favor de la memoria histórica tal y como la conciben los zapateristas y sanchistas (y vaya esto por delante: apenas la ha visto uno un par de veces, sin conversación, una en un almuerzo en La Moncloa organizado por Aznar, que se volcaba por entonces en ayudas a la Fundación Lorca). Tampoco con Antonio Membrilla, «el nuevo director» (tras las protestas que originó un calambur simplón suyo en el que se refería a la «memoria histérica», ha tenido que renunciar a su cargo: le han puesto de vuelta y media).… Seguir leyendo »