Constitución (Continuación)

Alemania sugirió a España la necesidad de reformar la Constitución para limitar el gasto público (art. 135). En Europa no entienden que nuestra Constitución se haya reformado sólo una vez para adecuarse a las exigencias del Derecho Comunitario (el art. 13.2 se reformó en 1992).

La Ley Fundamental de Bonn se ha modificado en numerosas ocasiones desde 1949. Cuando Merkel lideraba la Grosse Koalition impulsó una importante reforma constitucional que fortaleció al Estado Federal frente a los Länder. Esta revisión del federalismo, corrigiendo los defectos acumulados durante más de 50 años, fue posible por el consenso de los partidos que integraron la Grosse Koalition (CDU/CSU-SPD).…  Seguir leyendo »

Socialistas y populares han unido fuerzas la semana pasada y sacado adelante la única reforma significativa de la Constitución desde que se inició la democracia. La decisión, incoada sobre la marcha por el presidente del Gobierno, y bendecida por un Congreso expirante en la acepción cronológica y también moral de la palabra —las elecciones del 22-M pusieron de manifiesto que España desea un cambio político profundo—, es grave por tres conceptos. Porque las reformas de la Carta Magna siempre lo son, porque no ha habido ocasión de abrir un debate público de verdad y porque la medida se ha adoptado contra la voluntad de algunas minorías y sin el respaldo franco de los propios socialistas.…  Seguir leyendo »

La propuesta de modificación constitucional sobre el freno al endeudamiento plantea debates de fondo en nuestra sociedad. Por un lado, se trata de introducir en nuestra Constitución una norma vigente desde el Tratado de Maastricht en el marco de la Unión Económica y Monetaria en la que vivimos desde hace casi 20 años. Por otro, plantea dos cuestiones esenciales para el futuro del Estado social de derecho consagrado en nuestra Constitución: la solidaridad intergeneracional y la sostenibilidad del modelo de desarrollo económico. Ambos principios, no recogidos explícitamente en nuestra Carta Magna, pero sí incorporados en nuestro derecho a través del artículo 3º del Tratado de Lisboa.…  Seguir leyendo »

No me cabe duda de que el mayor servicio que el actual Gobierno ha podido prestar a nuestra democracia desde el inicio de su mandato es la reforma del artículo 135 de la Constitución para implantar un límite al déficit público y consagrar constitucionalmente el principio de estabilidad presupuestaria para todas las administraciones. La propuesta que el economista James M. Buchanan formuló hace más de treinta años, cuando escribió Los límites de la libertad, se está materializando finalmente en Europa, siendo nuestro país uno de los primeros en incorporarla a su norma constitucional. Un gran éxito del que nos alegramos la mayoría de los economistas españoles y cuyo promotor sin duda ha sido el PP que, contra casi todas las demás fuerzas políticas, ha insistido en su necesidad.…  Seguir leyendo »

La reforma constitucional es el último conejo salido de la chistera de José Luis Rodríguez Zapatero. La modificación de la, hasta ahora, intocable y sacrosanta Constitución se presenta como una medida clave para la recuperación económica. Por una vez y sin que sirva de precedente, el Partido Popular, tan conservador con el ordenamiento jurídico, se ha sumado a la propuesta con toda clase de palmeros. Los sindicatos, los regionalistas del peix al cove y la izquierda periférica (no solo geográficamente) únicamente discrepan, al parecer, en cuestiones formales y de procedimientos.

El consenso exhibido entre el PSOE y el PP ante la propuesta llama la atención por su excepcionalidad.…  Seguir leyendo »

Todas las cosas que se han dicho y escrito contra la reforma exprés de la Constitución son verdad: el procedimiento dista mucho de ser el más democrático posible pues se ha hurtado un gran debate nacional sobre la conveniencia de establecer en la Ley de leyes una cláusula de estabilidad presupuestaria; se ha orillado tanto a las comunidades autónomas como a los entes locales a los que afecta mucho; no se ha estudiado técnicamente el contenido del artículo 134 -ni siquiera con un informe urgente del Consejo de Estado-; una disposición tan abierta como el nuevo artículo 135 es difícil que tenga efectos normativos, por lo que no se ve la necesidad de incluirla en la Constitución; no se comprende la urgencia de una norma que no entrará en vigor hasta 2020; se adopta por mandato de Frau Merkel y de los mercados financieros; constitucionaliza una política económica liberal; es triste que la primera mención que se hace a la Unión Europea en nuestro texto constitucional sea de esta forma, etcétera.…  Seguir leyendo »

Sin Dinero no hay Estado. Esto ya nos lo enseñó Hamilton en El Federalista (Capítulo XXX): "El dinero ha sido considerado, con razón, como el principio vital del cuerpo político, como aquello que sostiene su vida y movimiento y le permite ejecutar sus funciones más vitales". Esta es una regla que, en términos absolutos, no admite excepción. De ahí que las relaciones entre el Estado y su moneda y su deuda sean un indicador de primera importancia para conocer el estado de salud tanto del primero como de las segundas. Y de ahí también que no haya tarea en la que el Estado ponga más empeño que en dar garantías respecto del valor de su moneda y del pago de su deuda.…  Seguir leyendo »

La Constitución fue fruto de tan gran consenso político precisamente porque se orilló en buena medida la pugna ideológica. La síntesis se facilitó recurriendo a principios universalmente aceptados por todos los demócratas, como por ejemplo los derivados de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que impregnaron el Título I.

El déficit público es objeto de una ya histórica controversia entre las diferentes corrientes del pensamiento económico y sus expresiones políticas. Para dirimirla está la acción del Gobierno según sea su orientación y las leyes que a tal efecto elabore, como fue la de estabilidad presupuestaria de 2006, más útil y progresista que la de 2001 hecha por el PP, obsesionado por el déficit cero.…  Seguir leyendo »

Reza el dicho norteamericano: «Una constitución es buena si el país prospera bajo ella», dando a entender que, si no prospera, es mala. Máxima que ellos, con ese pragmatismo que les caracteriza, han llevado a la práctica no cambiando de constitución cada poco, como hemos hecho los españoles, sino conservando el texto original firmado en Filadelfia hace 235 años, con «enmiendas» que lo han ido completando y puliendo. Es como han logrado unir continuidad con modernidad, es decir, estabilidad. Lo que nos ha faltado a nosotros.

Pienso que los cambios a punto de introducirse en la Constitución española de 1978 son más una enmienda que una reforma.…  Seguir leyendo »

Pasarán algunas décadas hasta que los historiadores sean capaces de analizar con tino lo que nos está sucediendo. Ya no es ninguna exageración afirmar que la crisis económica que implica al mundo más rico y desarrollado es la más destructiva e ingobernable desde la de 1929. Incluso, en algunos de los parámetros decisivos, más profunda.

Como ha descrito el profesor Pablo Martín Aceña en un trabajo titulado Dos crisis más una, de inminente publicación en la revista universitaria Historia y política, de la primera gran crisis del siglo XX, la de 1929, surgió el final del laissez faire que había dado todo el protagonismo a las fuerzas libres del mercado y se abrió la brillante etapa del keynesianismo, el intervencionismo estatal que permitió la construcción del Estado del bienestar en los países del centro del sistema.…  Seguir leyendo »

Una Constitución democrática se asienta sobre un pilar básico: la soberanía reside en el pueblo y este se conforma por ciudadanos libres e iguales ante la ley. Lamentablemente, tenemos que acudir a estos elementales principios después de 32 años de vigencia de un texto salido de unos tiempos irrepetibles y, por ello, necesariamente mejorables para adaptarse a nuevas realidades.

Somos muchos los que, desde diferentes perspectivas ideológicas, pensamos que se debe acometer una reforma constitucional. Son varios los cambios necesarios exigidos por una nueva base social en continua y acelerada evolución. Ahora bien, nadie puede dudar de la necesidad de realizarla desde la más pura adaptación a las previsiones y principios inalterables de las reglas del juego democrático.…  Seguir leyendo »

Las prisas suelen ser malas consejeras y el caso de la reforma constitucional para incluir un techo de déficit público no es una excepción. Aunque sin duda hay consideraciones relevantes sobre la forma, es más importante centrase en el fondo de la cuestión. Un principio básico de economía política es que todos los gobiernos, sean del color que sean, tienen como objetivo perpetuarse en el poder. Para hacerlo intentan seducir a los votantes. Una forma es reducir impuestos y aumentar el gasto público, incluso si esto supone generar un déficit insostenible. Al final, y a diferencia de lo que sucede con las familias que tienen que hacer frente a sus propias deudas, serán las generaciones futuras las que paguen con sus impuestos el despilfarro gubernamental presente.…  Seguir leyendo »

La reforma constitucional que han pactado el PSOE y el PP para limitar el déficit público y el nivel de endeudamiento tiene al menos dos elementos positivos, supone la constatación de una evidencia y es consecuencia de una nueva contradicción en la conformación de la política europea. Positivo es que, por primera vez en tiempos de crisis, el PP se avenga a pactar con el PSOE una medida de política económica para generar seguridad y confianza sobre nuestra economía y la capacidad de cumplir los compromisos de estabilidad presupuestaria. Primero, porque una reforma constitucional, aunque sea ordinaria (artículo 167 CE), requiere de una mayoría de 3/5 de cada una de las Cámaras y, sin el acuerdo de esas dos fuerzas políticas, es imposible realizarla.…  Seguir leyendo »

¿Dónde termina el miedo y empieza la prudencia? ¿Dónde acaba el valor y comienza la temeridad? No son preguntas para alentar reflexiones de cuño aristotélico. Son cuestiones relevantes en el actual momento político. Conocido el pacto entre PSOE y PP para reformar la Constitución incorporando el principio de estabilidad presupuestaria, así como para llevar los límites de déficit a ley orgánica, surge en la opinión pública la demanda de ratificar mediante referéndum dicha reforma. Dado que para una reforma de estas características basta el trámite parlamentario y no es legalmente necesario el refrendo ciudadano, desde los partidos firmantes del pacto se viene a insistir en que no es aconsejable convocar esa consulta.…  Seguir leyendo »

El PNV ha anunciado su rechazo a la reforma del artículo 135 de la Constitución porque afecta al autogobierno vasco, a sus competencias propias y a la definición de las políticas económicas y fiscales de Euskadi. En la misma dirección se ha pronunciado la llamada izquierda abertzale, que ha calificado el acuerdo PSOE-PP como un ataque directo al autogobierno de vascos y navarros.

Nada tiene de extrañar que los amigos de ETA sigan en su línea habitual. Para ellos la reforma es una demostración más del aplastamiento de las libertades nacionales de Euskal Herria. Distinto es el caso del PNV, que presume de un ardiente europeísmo.…  Seguir leyendo »

La reciente reforma consensuada del artículo 135 de la Constitución, todavía en trámite parlamentario, puede ser un pequeño paso para nuestra maltrecha economía, pero un gran salto para la puesta al día de nuestro régimen constitucional. Por ello voy a dedicar unas reflexiones sobre los aspectos jurídico-políticos de dicha modificación.

De entrada, las dos primeras cosas que llaman la atención son, por una parte, la mención a la Unión Europea, a la que pertenecemos desde 1986, circunstancia que ignoraba nuestra Constitución. Por consiguiente, es un importante paso en nuestra pertenencia al club europeo, al que de acuerdo con los tratados hemos cedido parte de nuestra soberanía.…  Seguir leyendo »

En su comparecencia parlamentaria del martes, el presidente del Gobierno anunció un cambio constitucional para establecer límites al déficit público. El líder de la oposición manifestó su acuerdo. Así que, teniendo en cuenta las cifras de la composición de las cámaras, parece que el anuncio de Zapatero puede hacerse realidad. Desconocemos la propuesta concreta, pero podemos intuir que afectará a los títulos séptimo y octavo de nuestra Carta Magna. En el séptimo, los artículos 134 y 135 regulan la atribución de los presupuestos generales del Estado y la emisión de deuda pública. Para las comunidades autónomas, en el artículo 156 se establece su autonomía financiera.…  Seguir leyendo »

La constitución es la norma jurídica suprema de nuestro ordenamiento y, como tal, tiene que ser respetada. Cualquier modificación en el texto de la Carta Magna habrá de efectuarse con profundo análisis previo y mano temblorosa. Esa es ni más ni menos la actitud previa que los políticos deben adoptar siempre que consideren oportuna la revisión de cualesquiera mandatos constitucionales.

La primera objeción a la propuesta de reforma anunciada ahora por el Gobierno y a la que se ha sumado el Partido Popular (que ya en su día había mostrado su inclinación hacia esa concreta modificación) es el poquísimo tiempo que se ha concedido para debatir la conveniencia de una decisión tan sumamente trascendental.…  Seguir leyendo »

El acuerdo al que llegaron ayer los dos grandes partidos nacionales nos demuestra una vez más que estamos en el país de las chapuzas. En efecto, cuando el presidente del Gobierno hizo el surrealista anuncio de que se celebrarían las elecciones generales el 20 de noviembre, previa disolución de las Cortes Generales el 26 de septiembre, no se cayó en la cuenta entonces de que con ese plazo, que funciona como una guillotina, habría que reformar la Constitución. Ni más ni menos.

Cuando el 25 de junio del año pasado el presidente del PP, Mariano Rajoy, propuso, como ya había hecho Alemania, reformar la Constitución para introducir un límite al déficit de las administraciones, nadie tomó en serio su propuesta.…  Seguir leyendo »

La crisis financiera que comenzó a mostrarse en 2007 en forma de subprime sigue mutando como la del E.coli. Al igual que en la crisis sanitaria con los pepinos, los alemanes quisieron hacernos creer que esta mutación era una crisis fiscal de países desordenados y poco disciplinados, entre ellos España. Pero de nuevo volvemos a ver síntomas en los mercados financieros que nos recuerdan que esto es una crisis de sobreendeudamiento y que acaba afectando al sistema bancario, principalmente a bancos alemanes y ahora franceses, que es la médula espinal del crédito y el sustento de la economía real.

El problema es que el relato alemán ha calado y España SA, Estado, está pagando unos diferenciales en sus emisiones impropios de un país con rating AA.…  Seguir leyendo »