Espiritualidad y negocios

Hace unos días, invitado por Acción Social Empresarial, tuve la oportunidad de presentar el libro de Philippe de Woot, Espiritualidad y negocios. Un punto de vista cristiano. Mi aproximación a Philippe de Woot se produce gracias a Aimery de Schoutheete. Aimery es un gran amigo y uno de los mejores abogados de Bélgica. Se da la circunstancia de que el padrino de Aimery era Philippe de Woot, que a su vez era el mejor amigo de su padre, el barón Philippe de Schoutheete, que fue embajador de Bélgica en España y tuvo siempre un gran amor a nuestro país.

Philippe de Woot nació en Bruselas el 29 de agosto de 1930. Era doctor en Derecho y en Ciencias Económicas, y fue profesor de la Universidad Católica de Lovaina (19651995), cofundador y decano de la Louvain School of Management, profesor visitante de Insead y de Harvard y doctor honoris causa por la Universidad de Bolonia. Además, Philippe de Woot era un convencido europeísta y fue asesor de la Comisión Europea y miembro de la Academia Europea de las Ciencias y las Artes.

Espiritualidad y negociosPhilippe de Woot es autor de numerosísimos libros y obras colectivas sobre gestión empresarial. En 1968 publicó La doctrina de la empresa, que hizo historia. Posteriormente, dedicó muchos trabajos a la responsabilidad social corporativa. Así, en 2005 publicó Should Prometheus be Bound? Corporate Global Responsibility. También dirigió una gran obra sobre la globalización, Les défis de la globalisation: Babel ou Pentecôte? (2001). El libro Espiritualidad y negocios –versión española que acaba de presentarse– fue publicado en París en 2009 bajo el título Lettre ouverte aux decideurs chrétiens en temps d’urgence, pero no ha perdido ni un ápice de interés. Con posterioridad, De Woot publicó Repenser l’entreprise (Rethink the Enterprise), L’innovation, moteur de l’économie y, ya en 2016, sus últimos trabajos Responsible Innovation y Maîtriser le progrès économique et technique, cuyos títulos bastan para hacernos una idea de la relevancia de la obra científica de este gran humanista y pensador social.

A Philippe de Woot le gustaba mucho España, país que había descubierto por sí mismo y también con su amigo, el embajador Philippe de Schoutheete. Le gustaban especialmente Córdoba, Granada, Sevilla y Salamanca. Apreciaba muchísimo el Museo del Prado y era admirador de Goya. Philippe de Woot era una persona muy honrada y humilde, con un gran sentido del humor y una fe auténtica. Sentía una gran pasión por la ornitología y era un amante de la naturaleza.

La relación entre los dos amigos y sus familias se estrechó aún más con el matrimonio de uno de los hijos del barón de Schoutheete con Heléne, hija de Philippe de Woot. Pero lo más impresionante de esta historia de amistad es que Philippe de Woot y Philippe de Schoutheete fallecieron el mismo día, el 29 de septiembre de 2016.

¿Qué mensaje nos transmite Philippe de Woot en su libro Espiritualidad y negocios? En primer lugar, destaca que la globalización económica avanza con mucha más rapidez que la gobernabilidad mundial. Como consecuencia de ello, nuestro modelo económico implica una serie de riesgos sistémicos. El estallido de la burbuja financiera demostró su gran fragilidad, el escaso control que tenemos de ese modelo y los efectos devastadores de la crisis sobre los más débiles.

Philippe de Woot pone de manifiesto la paradoja de que nuestra capacidad de crear riqueza nunca fue tan grande y, sin embargo, la desigualdad nunca fue mayor; nuestros conocimientos científicos y técnicos nunca fueron tan amplios, pero el planeta nunca estuvo tan amenazado.

Al acelerarse, nuestro modelo de desarrollo empieza a destruir el planeta mediante el agotamiento de los recursos, la contaminación de las aguas y los suelos y el calentamiento global. Los peligros que nos amenazan son cada vez mayores. El futuro del planeta y la supervivencia de la humanidad están en peligro. Necesitamos, pues, un modelo de desarrollo que sea sostenible, que responda a las necesidades del presente sin poner en riesgo la capacidad de las generaciones futuras para atender a sus propias necesidades.

Para De Woot, la empresa es, por excelencia, el agente del progreso económico y técnico. Por ello, las empresas pueden y deben desempeñar un papel decisivo para el desarrollo sostenible siendo más responsables social y medioambientalmente. En consecuencia, es necesario transformar la finalidad de la empresa y su papel en la construcción de un futuro global colectivo. Hay que cambiar la cultura de las empresas para reformar nuestro sistema económico y otorgarle legitimidad social. No se trata de destruirlo o sustituirlo, sino de humanizarlo y orientarlo al bien común.

La empresa no es un fin en sí mismo, sino que está al servicio del interés general. Si la empresa desea dar un sentido a su acción, si desea combinar el avance económico y técnico con el proyecto humano, la dimensión ética es indispensable para adoptar sus decisiones y guiar sus comportamientos. El management no es suficiente. Si queremos situar la ética en el centro de la acción económica, necesitamos líderes y no solo administradores.

La empresa del siglo XXI que desee ser responsable debe lograr un equilibrio entre: –La acción empresarial económica y técnica. –Un liderazgo que sirva de vehículo a los valores de humanización. –Una contribución al bien común. Así pues, y como conclusión, el beneficio económico no puede ser el fin primordial de la empresa. Es necesario poner la ética en el centro de las decisiones estratégicas y de los comportamientos y contribuir al bien común desde la actividad empresarial.

Plutarco escribió muchas Vidas paralelas. Philippe de Woot y Philippe de Schoutheete vivieron vidas yuxtapuestas. Con estas líneas quiero rendir homenaje a estos dos grandes hombres, grandes cristianos, padres de familia, profesores universitarios y grandes europeos que a lo largo de su vida lucharon por construir una Europa unida, un mundo mejor y más sostenible y una empresa humana y socialmente responsable que contribuya a ello.

Carlos Bertrán, abogado.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *