Brasil (Continuación)

El 13 de junio, la policía militar de São Paulo, con excesivo celo, intentó poner fin a una protesta por las tarifas de autobús con porras y gas lacrimógeno. La práctica de detenciones generalizadas y el lanzamiento de pelotas de goma pudieron dispersar a la mayor parte de la multitud aquella noche, pero no antes de que imágenes y testimonios se distribuyeran ampliamente, con inclusión de ataques a periodistas y transeúntes. Fue la cuarta y mayor manifestación del Movimiento Pase Libre, que había estado haciendo campaña desde principios de mes contra un aumento del 20% de las tarifas de autobús. La indignación se convirtió rápidamente en movilización a velocidad de Twitter de modo que el movimiento inundó las calles de nuevo el 17 de junio, en esta ocasión con más de cien mil personas y con protestas complementarias en otras grandes ciudades.…  Seguir leyendo »

Que Brasil es y siempre será un país pacífico es, para cualquier ciudadano brasileño, una verdad obvia. Brasil ha vivido en paz con sus diez vecinos hace casi 150 años, habiendo fijado sus fronteras por medio de la negociación. La última vez que estuvo en guerra fue en 1942, tras una agresión directa por parte de submarinos nazis en el Atlántico Sur. Brasil renunció a las armas nucleares y firmó con Argentina y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) un amplio acuerdo de salvaguardias para el uso pacífico de la energía nuclear. Por intermedio del Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Brasil contribuye con la integración política, económica, social y cultural de la región.…  Seguir leyendo »

The severity of Brazilian billionaire Eike Batista's financial troubles is perhaps best gauged by his silence. The publicity-loving jetsetter has ignored his Twitter fans since the end of May, despite the fact that his companies have been making headlines -- and not good ones.

At the beginning of July, Batista's flagship oil company, OGX Petroleo & Gas Participacoes SA, announced it may shut down its only oil-producing field next year. The jewel of Batista's EBX group is running out of money -- fast. Barclays Plc. reckons OGX will have about $150 million in cash by the end of September. The company is desperately selling assets, its top executives are leaving and its lenders are huddling with lawyers to figure out how to get their money back.…  Seguir leyendo »

Cuando todo parecía en calma, las manifestaciones populares se extendieron por los principales centros del interior de Brasil, movilizando sólo el día 20 de junio a más de 1,4 millones de personas que sacudieron la nación dejando a la clase política aturdida. Las calles fueron tomadas por la ciudadanía y la política se convirtió en el centro de los debates y preocupación de todos los brasileños, incluso mientras se celebraba la Copa Confederaciones. El lema “el gigante se despertó” fue ampliamente utilizado durante las movilizaciones en referencia a un verso del himno nacional brasileño que establece el país como “eternamente acostado en cuna espléndida”.…  Seguir leyendo »

La rebelión de los jóvenes crece en Brasil, en Turquía, en sectores de la China, y llega hasta las costas chilenas. El voto de los jóvenes podría cambiar todas las situaciones aparentemente fijas, cristalizadas, encuestadas. Es la gran incógnita, la gran posibilidad de cambios auténticos en las sociedades actuales. Observo el fenómeno y me acuerdo de un diálogo entre Fidel Castro y Jean-Paul Sartre, en los primeros años de la revolución cubana. Fidel Castro, durante una manifestación multitudinaria en la Plaza de la Revolución, le dice al escritor francés que le daría al pueblo, el que canta sus consignas frente a la tribuna donde están ellos, todo lo que le pidan.…  Seguir leyendo »

Un fantasma recorre el mundo: la revuelta de las clases medias. En el último episodio, las ciudades de Brasil y Turquía han sido escenario de un levantamiento contra las élites políticas y económicas protagonizado por jóvenes, convocado mediante las redes sociales y provocado inicialmente por un conflicto urbano, las tarifas de transporte en São Paulo o la remodelación de un parque en Estambul. Se trata en ambos casos de países con Gobiernos democráticos y economías robustas, de manera que las protestas no pueden atribuirse a la ausencia absoluta de libertad o a la desesperación de la miseria; pero sí son revueltas contra el autoritarismo y corrupción de las élites, así como frente a la creciente desigualdad social y la erosión de las expectativas de las clases medias emergentes.…  Seguir leyendo »

Las manifestaciones que sacuden a la sociedad brasileña, habitualmente tranquila y relajada, canalizan un sentimiento generalizado: ¡ya basta! Pero, excepto en el caso de los agitadores profesionales, no hay odio en las protestas callejeras. Es una especie de cansancio impaciente.

Los brasileños están cansados de ser tratados brutalmente por el transporte público en las zonas urbanas del país; cansados de los hospitales espantosos; cansados de los escándalos de corrupción y particularmente cansados de la inflación, que ha regresado como una temida enfermedad para erosionar una vez más el poder adquisitivo de la gente y amenazar con la vuelta de millones de personas a la pobreza, de la que habían escapado hace tan poco.…  Seguir leyendo »

Andaba yo por São Paulo y Porto Alegre hablando de mi libro sobre indignados en el mundo cuando surgió el movimiento que sacude Brasil. Espontáneo como todos los demás, sin líderes como todos los demás, sorprendiendo a políticos y analistas como todos los demás. Originado en internet y tomando calles en más de 90 ciudades para hacerse valer. La pancarta que abría la manifestación de Río de Janeiro decía “Somos las redes sociales”. A lo que añadía otro manifestante: “Salí de Facebook y ahora estoy en la calle”. “Ven, vamos para la calle. Puedes ver que la fiesta es tuya”, cantaban las gentes apropiándose una canción publicitaria relativa a la Copa Confederaciones.…  Seguir leyendo »

En los años setenta, la sociología explicaba que los sectores sociales que logran cubrir sus necesidades básicas tienden a reclamar al Estado demandas más precisas. Esa interpretación puede ayudarnos a entender las protestas en Brasil. La expansión de la clase media y el aumento del poder adquisitivo de muchos ciudadanos ha sobrepasado con creces la capacidad de infraestructura del Estado brasileño. La satisfacción por acceder a la escuela, al hospital o tener trabajo ha dado paso a la frustración por la mala calidad de los servicios públicos.

No obstante, las movilizaciones han sorprendido. El 7 de junio unas 1.500 personas protestaron en São Paulo por el aumento del transporte público que llevó el billete de 3 reales a 3,20.…  Seguir leyendo »

Since early June, protests that began out of anger over public transit fare increases have spread across Brazil, filling the streets of São Paulo, Rio de Janeiro and dozens of other cities with hundreds of thousands of demonstrators. On June 13, the police cracked down violently and the protests mushroomed. Finally, after seven days, the government of President Dilma Rousseff pushed governors and mayors to cancel the fare increases they had presented as the inevitable price of a modern market economy.

The cost of public transportation for a family living in Rio or São Paulo is, proportionally, higher than in New York or Paris.…  Seguir leyendo »

Over the last week, the Confederations Cup, which is taking place in Brazil, has been sharing space in the news with frequent and timely protests on the streets, most of them with the intention of forcing the Brazilian government into a new economic direction.

As five times world champion, Brazil's love of football has long been blamed for distracting the population from its social problems. It is ironic, therefore, that it was the country's preparation to host the World Cup that has mobilised Brazilians. Raising flags with no party colour, the people on the street are crying out for an end to corruption and against the waste of public money, both of which are sadly so common in our Brazil.…  Seguir leyendo »

Last week I watched a video of a man arrested for possession of a bottle of vinegar. The man, a journalist named Piero Locatelli, was covering the protests here when a policeman asked to search his backpack. Like other demonstrators, he had brought some vinegar. The idea is that breathing through a cloth soaked in vinegar neutralizes the effects of tear gas, though this doesn’t really seem to work. The police claim that the product can be used to make bombs, but this is even less true.

Mr. Locatelli was released two hours later. But the damage had been done. Over the next week, as the protests spread to cities around the country, the arrest became a mocking rallying cry.…  Seguir leyendo »

Cuando los estadounidenses piensa en Brasil, las manifestaciones son lo último que llega a su mente. El fútbol, el carnaval y, más recientemente, el Mundial de Fútbol y los Juegos Olímpicos han sido, para bien o para mal, las imágenes más asociadas con el gigante Americano.

Imaginen entonces la sorpresa de los estadounidenses al ver las fotografías de las protestas masivas y continuas -algunas de ellas violentas- en todo Brasil.

Los estadounidenses han oído hablar de agentes de policía arrojando sus armas a las hogueras creadas por los manifestantes y uniéndose al movimiento; de miles de brasileños dando la espalda a la bandera durante la reproducción del himno nacional en la Copa Confederaciones, y de una joven brasileña pidiendo a ciudadanos de EE UU a través de YouTube que escuchen las peticiones de los manifestantes.…  Seguir leyendo »

La protesta brasileña que se extiende cada día como una mancha de aceite por todo el país, y que tiene sorprendida a la opinión mundial, es diferente de las demás, como por ejemplo la de los indignados de Madrid, la Primavera árabe o la americana de los Occupy.

¿Por qué? Podría decirse que es brasileña, un pueblo con una idiosincrasia especial que no siempre entra ni siquiera en los cánones de los otros países del continente. ¿Tropical? También, pero no sólo.

En primer lugar, la protesta es diferente porque no tiene nombre. La llamamos simplemente “protesta” o “manifestaciones”, porque no ha sido bautizada.…  Seguir leyendo »

The first surprise about the Brazilian protests is that they have taken place at all. The second surprise is their scale. On reflection, they should have taken place years ago. The recent hike in bus fares was simply the last straw for a nation tired of being treated like otários ("suckers") – as a taxi driver put it to me on Sunday – by its ruling classes.

Demonstrations in modern Brazil are usually left to small groups belonging to the country's beleaguered "social movements" and therefore easily ignored by the media, which is dominated by the all powerful Globo conglomerate. Protesters depicted as troublemakers, lazy students, leftists and rich kids without a cause – as one prominent social commentator in Rio described them last week – are quickly discredited and forgotten.…  Seguir leyendo »

Brazilian President Dilma Rousseff’s administration is having a hard time making sense of the protests erupting across the country.

A couple of things are clear. Rousseff must come to terms with the end of a period of nearly boundless popularity. And she must contend with a new middle class that feels politically empowered but squeezed by the rising cost of living in Latin America’s largest economy.

More than 250,000 people took to the streets in cities across the country on Monday and Tuesday, primarily to denounce a 7 percent increase in subway and bus fares, along with a host of other grievances.…  Seguir leyendo »

Apenas dos años atrás, el rápido crecimiento económico y la expansión de su clase media convirtieron a Brasil en la niña mimada de los mercados financieros, mientras que México era más conocido por sus pandillas de narcotraficantes y violencia. Por su lento crecimiento y la paralización de las reformas económicas, los mercados financieros estaban a punto de declarar a México como una causa perdida.

¡Qué rápidamente pueden cambiar las reputaciones de los países! Actualmente, la economía brasileña se estanca y ninguna inversión en infraestructura para el Mundial y las Olimpíadas parece suficiente para salvarla. La economía mexicana, por el contrario, crece a un ritmo estable, impulsada por una reciente bonanza de las exportaciones industriales a Estados Unidos.…  Seguir leyendo »

Après la prise de position des pays émergents - Brésil, Russie, Inde, Chine, Afrique du Sud (BRICS) - sur les crises libyenne et syrienne au Conseil de sécurité des Nations Unies, on a vu émergé un consensus pour qualifier ces diplomaties de "souverainistes". Derrière ce terme : le refus d'utiliser l'intervention militaire pour régler des conflits internationaux, au nom de la protection de la souveraineté de l'État. Cette position se renforce lorsqu'il s'agit de problèmes internes. La Charte de l'ONU ne prévoit en effet qu'un règlement des tensions interétatiques, incluant la possibilité d'un recours à la force sous des conditions bien précises (chapitre VII).…  Seguir leyendo »

There's a special sort of melancholy that arises from reflecting upon the death of young people who just wanted to have fun. The calamity in Santa Maria, a college town in southern Brazil, where a nightclub caught on fire and killed at least 235 people on Sunday (the number has been changing daily), has, like other tragedies, revealed the best and the worst of Brazilian society.

Offers to donate blood to the victims in Santa Maria, about 180 miles from here in the state of Rio Grande do Sul, have poured in from all over Brazil and protesters have taken to the streets demanding justice.…  Seguir leyendo »

El mundo se enfrenta en el siglo XXI con retos de inmensa importancia y hay que tratar de plantearlos y analizarlos pues de ello depende la supervivencia misma de la Humanidad. Es el caso, por ejemplo, de los cambios climáticos con todas sus posibles consecuencias y la dificultad de lograr un crecimiento económico global equilibrado sin agotar la capacidad de generar energía y sin dilapidar los recursos ecológicos del planeta.

La investigación científica es un elemento clave para que el mundo pueda ir más allá, explorar nuevos caminos, para solventar con éxito tales retos. Brasil cuenta, entre otros factores, con inmensos recursos en agua, en bioenergía y biodiversidad, por lo cual se constituye en un actor fundamental para afrontar estos impasses.…  Seguir leyendo »