II República

Cuando una persona se convierte en mito pierde sus rasgos característicos para vestirse únicamente con los que le atribuye la masa que lo puso en un pedestal.

Con el cabeza de la familia Primo de Rivera ha ocurrido eso una vez más. Se trata de un linaje distinguido en la milicia durante más de un siglo con acciones en las luchas por la independencia americana, guerras carlistas, y marroquíes que, súbitamente, se volvió político con Miguel que instauró la «dictablanda».

El primogénito, José Antonio, mudó armas por derecho y ultimados sus estudios abrió despacho jurídico en Madrid. Tenía buena planta, una cabeza lúcida y enorme atractivo personal; intelectualmente orteguiano, usaba una oratoria electrizante y sentía rencor por Alfonso XIII a quien acusaba haber desamparado a su padre.…  Seguir leyendo »

Las checas de Madrid

Con el silencio de la práctica totalidad de los medios, la asociación que tengo el honor de presidir rindió el martes pasado homenaje a las víctimas de las checas de Madrid. Nos reunimos donde estuvo la del socialista Agapito García Atadell, un palacete desaparecido en una calle que ya no existe. El tiempo arrasa con todo, y el silencio condena al olvido. Compatriotas que habían ordenado la muerte de otros coincidieron en las primeras Cortes democráticas, las constituyentes. El entendimiento, sobre el que se levanta nuestra evanescente era de libertad y prosperidad, se había logrado mucho antes de su formalización; desde que los padres de mis coetáneos, niños en la guerra, decidieron mayoritariamente no hablarnos de aquel pasado, no removerlo, no envenenarnos con la causa de nuestros abuelos.…  Seguir leyendo »

La escritora María Lejárraga.

Desde el alba recorría carreteras desiertas que se borraban con la lluvia, pasaba las noches frías en pueblos olvidados por los mapas, atravesaba entre cañaverales la oscuridad negrísima de la sierra. Aquel mes de noviembre de 1933, la escritora María Lejárraga se internó en el corazón helado de España. Era la candidata del Partido Socialista por Granada en las segundas elecciones de la Segunda República. Sin embargo, durante su campaña no difundió doctrina política, sino que intentó salvar a las mujeres de la miseria de la vida cotidiana: “Hablaré a las mujeres, siempre a las mujeres, que son las que hacen el alma de los pueblos”.…  Seguir leyendo »

Un grupo de ciudadanos hace cola a la puerta de un colegio electoral en la calle Caspe de Barcelona, el 16 de febrero de 1936, en las elecciones que ganaría el Frente Popular. AGUSTÍ CENTELLES

La señal de alarma se produjo al salir de clase. Dos alumnas se acercaron a preguntarme por qué las explicaciones sobre las elecciones generales del 16 de febrero de 1936, que dieron como resultado el triunfo del Frente Popular y que hoy se conmemoran, no coincidían con la versión existente en Wikipedia. Efectivamente, a diferencia de la entrada en español sobre la efeméride, detallada, rigurosa y que da cuenta de los distintos libros que se han ocupado del tema, la entrada en francés sobre los últimos comicios libres celebrados en España hasta 1977 solamente cita una fuente: 1936. Fraude y violencia en las elecciones del Frente Popular.…  Seguir leyendo »

Muertos en el levantamiento campesino de Casas Viejas, en el cementerio de la localidad gaditana en enero de 1933.

Casas Viejas, enero de 1933: diecinueve hombres, dos mujeres y un niño muertos. Tres guardias corrieron la misma suerte. La verdad de los hechos tardó en conocerse, pero  la Segunda República ya tenía su tragedia.

Todo comenzó el 10 de enero, cuando llegaron a Madrid las primeras noticias de disturbios en la provincia de Cádiz, donde grupos anarquistas amenazaban el orden.

Ese mismo día, el capitán Manuel Rojas se trasladó desde Madrid a Jerez con su compañía de asalto para poner fin a la rebeldía. Cuando llegaron a Jerez, la línea telefónica había sido cortada en Casas Viejas. Grupos de campesinos afiliados a la CNT cercaron con algunas pistolas y escopetas el cuartel de la Guardia Civil en la madrugada del 11 de enero.…  Seguir leyendo »

Aquella "luminosa república"

Hace unos días nuestro presidente del Gobierno ha calificado como «luminosa» la II República española. Lo ha hecho con el aplomo que es propio de quien mantiene una distancia higiénica de los libros y de la lectura y, al mismo tiempo, una cercanía intelectualmente arrasadora a los tópicos y a los tuits.

Repasemos algunos ingredientes de aquella experiencia. Puede decirse que la preocupación más acuciante de los gobernantes republicanos fue el mantenimiento del orden público, la seña de identidad más visible de cualquier Estado. Hay que decir que la República no conoció prácticamente ninguna época de tranquilidad callejera, siendo la Guerra Civil en lo que desemboca su expresión más extrema y concluyente.…  Seguir leyendo »

El teniente coronel de Carabineros, Alberto Angulo, en febrero de 1937, ante la rápida caída del frente, fue enviado desde Valencia con varios camiones, por orden directa del ministro de Hacienda, Juan Negrín, a fin de obtener los fondos existentes en la sucursal del Banco de España en Málaga. Debían retirar lo que parece eran los últimos fondos que poseía el Banco de España, especialmente plata, «para evitar que cayesen en manos facciosas».

En la Pieza Segunda de la Causa sobre Málaga, los magistrados recogen documentos recibidos en el juzgado de distintos centros oficiales, mereciendo entre ellos especial mención el del folio 480, un informe del gobernador del Banco de España en relación con las existencias en la Sucursal de Málaga, complementado por la declaración del que fue gobernador Civil de Málaga, señor Arráez, así como de otras comunicaciones del Ministerio de Hacienda, referidas a la supuesta existencia de ochenta toneladas de plata en Málaga, que se decían perdidas y que, según los aludidos testimonios, no existían.…  Seguir leyendo »

El pasado luminoso del republicanismo

El presidente del Gobierno ha reivindicado «el pasado luminoso del republicanismo… su legado de luz». Esta supuesta ráfaga de ejemplaridad que, según Pedro Sánchez, nos llega de nuestro pasado republicano no se corresponde ni de lejos con los hechos que ocurrieron en España en el último siglo y medio.

El 11 de febrero de 1873 Amadeo I renunció a la Corona, y el Congreso y el Senado aceptaron la renuncia. Acto seguido proclamaron la I República, conculcando el artículo 33 de la Constitución progresista de 1869, que definía la forma de Estado, y los artículos 110, 111 y 112, que determinaban el procedimiento para cambiarla.…  Seguir leyendo »

«No hay duda: desenterrar a los muertos es pasión nacional. ¿Qué incentivos secretos tienen para el español los horrores de ultratumba que no se satisface con ponderarlos a solas y ha de ir a escarbar en los cementerios a cada momento?».

Manuel Azaña publicó estas palabras hace poco más de cien años, en la revista literaria madrileña 'La Pluma'. El motivo inmediato fue la remoción de los restos del poeta liberal Manuel José Quintana (1772-1857), trasladado al actual cementerio de la Almudena, desde otro camposanto que estaba a punto de desaparecer por problemas de conservación. Fueron años en los que desaparecieron algunos viejos cementerios cercanos a la ribera del Manzanares madrileño, que experimentaba por entonces un intenso proceso de reordenación urbana.…  Seguir leyendo »

Hace veinte años, el Partido Popular que entonces dirigía el señor Aznar sumó sus votos en el Parlamento a la inefable condena del Alzamiento del 18 de julio de 1936 y se comprometió a honrar a todas las víctimas de la Guerra Civil. De aquellos polvos, estos lodos. Esta malhadada decisión rompió el espíritu de reconciliación de la Transición al deslegitimar a uno de los bandos sin hacerlo con el otro; lo llevó a cabo un partido heredero de la España nacional mientras que el Partido Socialista nunca ha renegado de su pasado guerracivilista. Por ello, por repudiable que sea, es todo menos sorprendente que este Gobierno espurio de socialistas, comunistas y separatistas haya llevado adelante una ley revanchista y, contra lo que dicen, sin parangón en ningún estado democrático de derecho, a la que se ha atrevido, además, a llamar «de Memoria Democrática».…  Seguir leyendo »

La frase de Abraham Lincoln que encabeza esta columna refleja a la perfección lo que ocurre con la Ley de Memoria Democrática que acaba de aprobar la coalición gobernante de socialistas, comunistas y terroristas.

Las mentiras que esta ley ampara no podrán tener éxito, pues además de ser una ley inconstitucional, lucha contra la memoria de muchos que saben que lo que pretende es todo mentira.

Efectivamente, esta ley no es sino un ejercicio de censura de la realidad histórica del período 1931-1983, con la vana pretensión de ganar una guerra que la izquierda perdió en los campos de batalla, y tratar de ocultar, al mismo tiempo, todos los crímenes de socialistas, anarquistas, separatistas y comunistas durante la II República, la Guerra Civil, el Franquismo y la Transición.…  Seguir leyendo »

La reciente aprobación de la Ley de Memoria Democrática y la petición realizada por la familia Primo de Rivera para que la exhumación de los restos mortales de José Antonio Primo de Rivera se realice «dentro de la estricta intimidad familiar», vuelven a poner de actualidad la figura de ese personaje, al que por antonomasia se le ha conocido como José Antonio, que unos elevaron a las cumbres del pensamiento filosófico y político y otros lo hundieron en las profundidades donde yacen los fascismos.

José Antonio, cuya relación con Franco fue de antipatía recíproca, fue un joven y brillante abogado, discípulo de Ortega, con muchos amigos y compañeros universitarios en las filas del partido de Azaña y del PSOE, al que sus detractores tildaban de «señorito andaluz», por el que Juan Negrín sentía una simpatía personal y decía que estaba lleno de generosidad y patriotismo, y Miguel de Unamuno dijo que era «un cerebro privilegiado, tal vez el más prometedor de la Europa contemporánea».…  Seguir leyendo »

En el castillo de Luc de Clapiers, moralista francés del XVIII, fue enterrado Pablo Picasso, que lo había comprado en 1958. Su obra me llegó en una traducción de Manuel Machado en aquel hermoso tiempo en el que mi mayor pasión era la lectura. Clapiers nos dijo que «todos los hombres nacen sinceros y mueren mentirosos». No sé si los padres de la ley de Memoria Democrática eran ya mentirosos; lo son ahora. Su maniqueísmo les ha llevado a mentir tanto la historia de los propios como la de los ajenos. Sobre los propios, presentan a la Segunda República como angelical, una democracia ejemplar, y la toman como ejemplo.…  Seguir leyendo »

La decisión de la familia Primo de Rivera de solicitar la exhumación de los restos de José Antonio al abad de la abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos antes de que el Gobierno decidiese profanar su sepulcro al amparo de la recién aprobada Ley de Memoria Democrática, debe entenderse, entre otras cosas, a la luz de lo que ha sido el proceder de las distintas instituciones en el único precedente existente en nuestro derecho, que es el proceso de exhumación –más bien profanación– de los restos del que fuera jefe del Estado español Francisco Franco Bahamonde.

En primer lugar, y más importante, la actuación de la jerarquía de la Iglesia Católica, que, en lugar de hacer valer el principio de inviolabilidad de los lugares sagrados consagrados en el artículo 1.5 de los acuerdos Iglesia Estado de 1979 –los agentes del Estado no podían penetrar en los lugares sagrados sin autorización de la autoridad eclesiástica–, permitió la profanación del sepulcro de Francisco Franco, no sólo en contra de la voluntad de su familia –a la que negó el amparo solicitado– sino también de la máxima autoridad en la basílica de la Santa Cruz que denegó la autorización solicitada por el Gobierno, cumpliendo hasta el final su encomienda de custodiar los restos, firmada por el Rey de España el 22 de noviembre de 1975.…  Seguir leyendo »

En España existe una víctima de la Guerra Civil que no goza del derecho a descansar en paz. Padeció, como tantos otros, una muerte injusta. Pero para él no son de aplicación las leyes de reparación, ni se respeta su dignidad de damnificado.

Fue ejecutado después de una farsa judicial, pero nadie tramitará la anulación de su condena. Algunos, incluso, le volverían a fusilar si pudieran. Otros lo siguen haciendo a su manera, ya sin balas, mancillando su nombre y tergiversando su semblanza. Muy pocos se acuerdan de él.

El sábado pasado, Santiago Abascal, en un mitin de Vox, tuvo la valentía de recordar su figura.…  Seguir leyendo »

Toda obra humana puede tener aspectos positivos y negativos, luces y sombras. De ello quiere olvidarse ¿deliberadamente? el actual desgobierno al redactar la Exposición de Motivos del proyecto de ley 121/000064 de Memoria Democrática cuando menciona a la II República resumiendo el quinquenio republicano (1931-1936) con estos adjetivos pletóricos de júbilo y optimismo a raudales: «…proceso inclusivo, tolerante, de igualdad, justicia social y solidaridad…». La Exposición de Motivos vuelve a la carga alabando el paraíso republicano mencionando sesgadamente las «avanzadas reformas políticas y sociales de la Segunda República Española».

Algunos miembros de la izquierda española (no todos, como luego veremos) y la totalidad de la extrema izquierda y la ultraizquierda española (que haberlas haylas) quieren hacernos creer una historia de la II República Española y la Guerra Civil cuya tesis, muy en resumen, sería: hito histórico sin precedentes lo fue la II República, período de prosperidad, altas conquistas sociales, culmen de la igualdad y del reformismo, logrando las mujeres un papel relevante jamás visto hasta entonces...…  Seguir leyendo »

En 1976, al tiempo que Adolfo Suárez era nombrado presidente del Gobierno, Libertad sin ira, del grupo Jarcha, se convertía en el himno de la Transición política. Era una canción cuya letra empezaba así: «Cuentan los viejos que en este país hubo una guerra…», y con eso de «viejos» se estaba refiriendo a los protagonistas de la II República y a los que participaron en la guerra civil, aquellos que, en la Transición, queriendo superar las heridas de las dos Españas y de la lucha fratricida, se entendieron y reconciliaron. Desde entonces han pasado 46 años y, ahora, los nietos de aquellos «viejos», se dedican a reescribir esa historia y, al tiempo que aprueban leyes de Memoria democrática, para eliminar a unos de ellos, canonizan a los otros, como es lo que han hecho con esa subvención de 200.000 euros que el Gobierno de Pedro Sánchez ha dado para una exposición sobre el dirigente del PSOE y de la UGT, y presidente del Consejo de Ministros durante la guerra, Francisco Largo Caballero, del que el ministro Miguel Iceta ha declarado «que muchos nos sentimos legítimamente orgullosos» y que es necesario «recuperar» su historia.…  Seguir leyendo »

Hace un par de semanas en «Rusia –y Franco– son culpables» adelanté: «Me resisto pero acaso un día escriba sobre las represalias de otro signo» al referirme a un mitin de Yolanda Díaz en la campaña andaluza. Los resultados electorales de su coalición de extrema izquierda fueron bien escasos porque el comodín del franquismo parece que cada vez pesa menos. La gente está pendiente de los problemas que le afectan hoy. El día al que me referí anunciando escribir sobre represalias de otro signo ha llegado. El Congreso ha sido testigo de una nueva traición sanchista enmarcada esta vez en la historia mentida, pactando con Bildu ese bodrio histórico de la nueva Ley de Memoria Democrática.…  Seguir leyendo »

Se ha hablado de la precipitación de la II República al pretender cambiar con urgencia un país que venía del caciquismo, el analfabetismo, la falta de cultura democrática en la población que condujo a la radicalización y las posturas extremas, por un lado, atraídos por el fascismo y otros hacia el anarquismo y el comunismo soviético, con los añadidos del paro, la miseria. La violencia tanto verbal en el Congreso como en la calle fue un elemento enormemente perturbador de la paz civil. Y aquellos momentos, desde posiciones divergentes, se emitían juicios parecidos. El propio Indalecio Prieto afirmaba el 24 de mayo de 1936: «Vivimos, es cierto, en una intensísima guerra civil».…  Seguir leyendo »

Cuando el 14 de abril de 1931 los dirigentes republicanos ocuparon el poder tuvieron la oportunidad de consolidar un régimen democrático que diera estabilidad a España. Pero llevar adelante ese proyecto exigía una voluntad de acuerdo y pacto que nunca tuvieron. Aunque en aquella España radicalizada ese era un reto extremadamente difícil de afrontar con éxito, ni siquiera lo intentaron.

El Gobierno encargó al diputado y jurista Ángel Ossorio y Gallardo que coordinara un anteproyecto de Constitución de la República, texto que fue rechazado por ser demasiado moderado, especialmente en la cuestión religiosa. Se creó entonces una comisión presidida por el penalista y miembro del Partido Socialista Luis Jiménez de Asúa, que el 27 de agosto afirmó en el acto de entrega del anteproyecto a las Cortes: «Ésta es una Constitución de izquierda...…  Seguir leyendo »