Por su propia seguridad, no se callen
Distintos acontecimientos han demostrado este año que contar la verdad y ejercer el periodismo independiente son actividades de alto riesgo. La reciente crisis del Sáhara, por ejemplo, ha puesto de manifiesto una cosa que ya sabíamos -la alergia que le produce a la clase dirigente marroquí la prensa libre- y otra que quizá no esperábamos: la complacencia de Gobiernos y organismos democráticos con un régimen que evita testigos incómodos cuando decide desmantelar un campamento en la antigua colonia española aunque esta no esté legalmente bajo su protección y/o Administración.
Corren malos tiempos para la información veraz y contrastada y sus enemigos, lamentablemente, no se limitan a ocupar altos cargos en el Magreb.… Seguir leyendo »