Repatriación

«Fuera todos los yihadistas extranjeros. Turquía “no es un hotel”». Con estas palabras, pese a su habitual estilo irritante, Ankara plantea un problema legítimo, aunque durante años haya sido “la autopista de la yihad”. Ahora, la idea del Gobierno de Recep Tayyip Erdogan de enviar repentinamente a los llamados “combatientes extranjeros” a sus países de origen es lo que ha hecho estallar el caso.

Este es un tema embarazoso. Lleno de implicaciones jurídicas, dificultades logísticas y aspectos morales relacionados con las familias de los terroristas. Suponiendo que todos lo sean. La cuestión de los combatientes extranjeros de la “guerra santa”, procedentes sobre todo de Asia y África, pero entre los que también hay muchos de Europa y Estados Unidos, es la fruta envenenada del octavo año de conflicto en Siria.…  Seguir leyendo »