Las cloacas del Estado y otras cloacas
La primera vez que oí a un ministro de la incipiente democracia española quejarse de la actividad de las cloacas del Estado fue cuando Fernández Ordóñez, titular de Justicia en el primer Gobierno constitucional de Adolfo Suárez, se enfrentó a su colega de Interior tras la tortura y asesinato de un etarra en la Dirección General de Seguridad. El cadáver del activista constituyó todo un mensaje de cómo entendían algunos que había que solucionar el futuro político español. Una semana antes, ETA había asesinado en el País Vasco al ingeniero Ryan, y 10 días después se produjo el golpe de Estado del 23-F.… Seguir leyendo »