Sistema penitenciario

Asistimos a la deriva irracional de movimientos antes admirables, como los de la defensa de los derechos de la mujer o del colectivo homosexual. Esa deriva nos está ofreciendo momentos memorables, aunque ya no tan edificantes. Lo cuento en mi libro Contra el feminismo.

En un caso muy reciente, un preso autodeclarado mujer tuvo relaciones con una compañera reclusa. El pícaro, pues de picaresca estamos hablando, ingresó como hombre en la prisión alicantina de Fontcalent y, una vez dentro, ya condenado, declaró que se autopercibía como mujer y pidió su traslado al módulo de mujeres. Cosa que, en línea con la deriva irracional de la que he hablado (y que, como saben, se ha extendido a la legislación), le fue concedido.…  Seguir leyendo »

Part of me wished Iran’s godforsaken prison would burn to the ground

“Evin’s on fire! It’s going up in flames, and they’re shooting at the prisoners inside!” This was one of the flurry of messages I received late October 15 from Iranian activists and fellow survivors of the country’s most notorious prison.

Among us was a collective sense of shock and amazement, tempered with fear and concern for those trapped inside Evin prison. I had visions of my former cellmates, dear friends who had become like sisters, cowering in smoke-filled hallways fighting the effects of tear gas.

I could barely bring myself to contemplate their terror, being locked in a crowded prison ward with no prospect of escape as flames, bullets and riot police encroached from all sides.…  Seguir leyendo »

Rwandan opposition leader Victoire Ingabire leaves Nyarugenge prison in September 2018, after eight years.

In the recent race to become Britain’s next Conservative Party leader and prime minister, there was one item the final candidates all agreed on – sticking with a controversial plan to send asylum seekers arriving on their shores halfway across the world to Rwanda.

Just a few weeks into the top job, freshly anointed prime minister Liz Truss doesn’t appear to be changing course anytime soon. (The closest the plan came to happening was in June, when a plane of asylum seekers set for Rwanda was grounded following a last-minute injunction by the European Court of Human Rights).

Now, as the British government faces legal challenges to the scheme from campaign groups representing asylum seekers, renewed focus has turned to Rwanda’s human rights record – including its imprisonment of political opponents.…  Seguir leyendo »

El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, durante una reunión en Quito, Ecuador, el 15 de noviembre de 2021. (National Secretary Of Communications Handout/EPA-EFE/REX/Shutterstock)

Ecuador está viviendo semanas convulsas tras la última masacre en la Penitenciaría del Litoral, la más poblada del país, la noche del viernes 11 de noviembre. Algunos periodistas empezaron a reportar sobre el movimiento inusual en los exteriores del recinto y pronto varios recibieron mensajes de familiares de personas detenidas en ese centro, que alertaban de nuevos hechos de violencia, algunos despidiéndose de sus madres en vista de una inminente matanza.

Mientras eso ocurría ante los ojos horrorizados del país, el silencio gubernamental era demasiado pesado. Y pesó todavía más cuando empezaron a circular imágenes de un evento diplomático de gala que ocurría esa misma noche por el aniversario 246 del Cuerpo de Infantería de Marina de Estados Unidos.…  Seguir leyendo »

A guard looks at surveillance screens at Evin Prison in Tehran. (The Justice Of Ali/AP)

The release of security camera footage from inside Iran’s notorious Evin Prison provides proof of what many already know to be true: that Iranian authorities routinely abuse prisoners and keep them in inhumane conditions. Among the scenes captured in the leaked videos are an inmate being beaten by multiple guards, another attempting to commit suicide and dozens of inmates being housed in a single room with bunk beds stacked three high. Those cramped quarters are certainly a contributing factor to the high spread of covid-19 inside Evin.

It’s difficult to predict what impact this leak might have, if any, especially since it’s still unclear who was behind it.…  Seguir leyendo »

Foto tomada en las bartolinas policiales de San Marcos el 31 de mayo de 2021, cuando 846 personas privadas de la libertad fueron trasladadas a cárceles administradas por la Dirección General de Centros Penales. (Cortesía de la Secretaría de Comunicaciones de la Presidencia de El Salvador)

La salvadoreña Edith Pineda lleva 17 meses sin poder ver a su hijo y 20 sin poder ver a su marido. Este cisma familiar indeseado tiene un culpable: la Dirección General de Centros Penales, la entidad que administra las cárceles en El Salvador. Jonathan y Noé, el hijo y el marido, están privados de libertad y Edith no sólo lleva año y medio sin visitarlos, sino que ni siquiera le han permitido conversar con ellos.

Tras dos años en el poder, el gobierno del presidente Nayib Bukele ha dado sobradas muestras de que el respeto a la institucionalidad y los derechos humanos no son los faros que guían su camino.…  Seguir leyendo »

La pandemia en la cárcel de Nueva York

El 14 de marzo se detectó el primer caso de COVID-19 en una cárcel de Nueva York. El sistema penitenciario de esta ciudad consta de ocho cárceles; seis se encuentran en la isla de Rikers en Queens, y otras dos en los barrios del Bronx y Manhattan. Cuando llegó la pandemia había aproximadamente 5.000 presos, una cifra que, gracias a las reformas implementadas, ha caído a la mitad desde los cerca de 10,000 internos que había en 2016. El sistema carcelario neoyorquino continúa siendo de los más grandes del país, junto con los de las ciudades de Los Ángeles y Chicago.…  Seguir leyendo »

Prisioneros en una cárcel de San Salvador en abril de 2020.Credit Agence France-Presse vía la Presidencia de El Salvador/AFP — Getty Images

Si alguien quisiera propagar el coronavirus a propósito, encerraría a muchas personas en espacios hacinados e insalubres, con escasa ventilación, acceso esporádico al agua, atención médica deficiente y muy pocas pruebas para detectar infectados. Es decir, diseñaría una cárcel típica latinoamericana o caribeña.

El distanciamiento social es imposible en las cárceles de Haití, Guatemala, Bolivia, El Salvador y Honduras, donde el número de detenidos es entre el doble y el cuádruple de la capacidad máxima.

Así como el virus se apodera de nuestras células para reproducirse, puede transformar las celdas atestadas e insalubres de las cárceles en incubadoras. Eso sería nefasto, no solo para los internos, sino también para el personal penitenciario y la población en general.…  Seguir leyendo »

La cosa se desató en menos de 24 horas. No había pasado un día desde aquel 20 de marzo en que el presidente de Colombia, Iván Duque, anunció el “aislamiento preventivo obligatorio”, y 13 cárceles del país ya ardían en las llamas de un motín coordinado entre sus reclusos. El saldo, después de una intervención oficial, fue de 23 muertos y 83 heridos. Muchos videos inundaron las redes sociales. El pánico fue la regla.

En el mes que llevamos encerrados, los colombianos hemos podido darnos cuenta de la magnitud de nuestros problemas, amplificados todos por la realidad arrolladora de la pandemia.…  Seguir leyendo »

Con el contagio global de la pandemia de Covid-19, poco hemos hablado de los riesgos para aquellos que por su condición de migrantes o de personas en reclusión, tienen mayor vulnerabilidad. En el caso de los migrantes, las decisiones tomadas por el Gobierno de Estados Unidos agravan la situación. Nuestros connacionales indocumentados, pero también los documentados que habitan en ese país, se ven afectados por la reciente decisión de la Suprema Corte que permite a Trump negarle la renovación de visa a aquellos que utilicen de más el sistema social de su país, aunque paguen impuestos. Esto tiene consecuencias en la asistencia de estas personas y sus hijos a los servicios médicos, que por miedo a perder sus visas no acuden, vulnerando sus derechos y su condición salubre.…  Seguir leyendo »

This week, for many, the coronavirus pandemic that has left much of the world paralyzed is hitting closer to home than ever. But for some of us, the scare is not just about our health or even the availability of essential food and hygiene products in our local stores. It is the crippling fear for our loved ones unjustly imprisoned halfway across the world.

On Tuesday, I woke up to news of the first covid-19 case in Wadi el-Natrun prison, where my father has been held as a political prisoner in Egypt since 2013. Ever since, I have struggled to imagine how Egypt’s prisoners, packed like sardines in unventilated underground dungeons, feel about the impending doom metastasizing in their midst.…  Seguir leyendo »

Sin dignidad no habrá rehabilitación en las cárceles de El Salvador

El Salvador tiene una notoria reputación por la brutalidad de sus pandillas. Pero dentro de las cárceles del país, las condiciones inhumanas y el hacinamiento, no la violencia, representan algunas de las mayores amenazas. Viajé al país centroamericano en diciembre como parte de una misión de observación con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

En la prisión de Zacatecoluca, algunos reclusos dijeron que no habían recibido visitas en años (la ley prohíbe las visitas familiares en las cárceles de máxima seguridad). Algunos dijeron que no habían visto el sol en meses mientras se acurrucaban en las oscuras y húmedas celdas. Algunas prisiones en El Salvador se desbordan con más del 600% de capacidad.…  Seguir leyendo »

Inside El Salvador’s prisons

El Salvador has a notorious reputation for its brutal gang-related crime. But inside the country’s prisons, inhumane conditions and overcrowding represent some of the biggest threats, not violence. I traveled to the Central American country in December as part of an observation mission with the Inter-American Commission of Human Rights.

At the Zacatecoluca prison, inmates said they hadn’t had any visitors in years. (Family visits are prohibited by law at maximum-security prisons.) Some said they hadn’t seen the sun in months as they huddled in the dark, humid cells. Several prisons in El Salvador are overflowing with over 600 percent capacity.…  Seguir leyendo »

Political prisoners who recanted their views to support the Islamic Republic at a news conference at Evin Prison in Tehran in February 1986. Credit Kaveh Kazemi/Getty Images

“The degree of civilization in a society can be judged by entering its prisons,” Fyodor Dostoyevsky wrote in “The House of the Dead,” his semi-autobiographical novel about inmates in a Siberian prison camp. Iran continues to fail the Dostoyevsky test.

The Evin Prison in Tehran, where a long list of leaders, intellectuals and journalists have been detained over the years, added to its infamy this month with the so-called suicide of Kavous Seyed Emami, a leading environmentalist and academic.

Dr. Seyed Emami, 63, who came from an old clerical family, was a dual Iranian and Canadian citizen. He had received his doctorate from the University of Oregon and returned to Iran in the early 1990s to teach sociology at Imam Sadeq University in Tehran, where Iran’s future elite is educated.…  Seguir leyendo »

Women admitted to the maternity ward at Roi Baudoin hospital in Kinshasa, DRC, are counselled by staff after having been detained for non-payment of medical fees. Photo: Getty Images.

Around the world, human-rights activists fight on behalf of people imprisoned in unsanitary jails and denied a fair trial. These victims often suffer the double indignity of being mistreated by their captors and deprived of basic services. In many countries, these abuses are not only taking places in prisons, but in hospitals, too.

A new Chatham House paper that I co-authored with Tom Brookes and Eloise Whitaker shows that up to hundreds of thousands of people are detained in hospitals against their will each year. Their crime? Being too poor to pay their medical bills. This phenomenon is particularly prevalent in several sub-Saharan African countries, notably Nigeria, Democratic Republic of Congo, Ghana, Cameroon, Zimbabwe, and Kenya, but there is also evidence of it in India and Indonesia.…  Seguir leyendo »

Outside the Silivri prison about 60 miles from Istanbul. Credit Osman Orsal/Reuters

I have been a member of Turkish Parliament representing Istanbul for the opposition Republican People’s Party for the past six years. It has forced me to become a specialist in the Turkish prison system as President Recep Tayyip Erdogan’s Justice and Development Party (A.K.P.) government has increasingly persecuted politicians, activists, professionals and all sorts of citizens who oppose his rule and arrested thousands after the failed coup attempt last July.

My morning begins with reading the news; looking for court appearance dates for detained parliamentarians, journalists and academics; and checking a website where the government posts its decrees and the names of people who are about to be purged from the government, the military, hospitals, banks, schools and other institutions.…  Seguir leyendo »

Maritza (también conocida como Marixa) Lemus es escoltada por policías tras su arresto el 25 de mayo de 2017 en San Salvador; Lemus es acusada por dirigir una supuesta red criminal dedicada al secuestro y el asesinato. Credit Oscar Rivera/Agence France-Presse -- Getty Images

A mediados de mayo, Maritza Lemus, conocida como la Patrona, se fugó de la habitación donde estaba recluida en la brigada militar Mariscal Zavala, en Ciudad de Guatemala. Lemus dirigía una banda de secuestradores y sicarios y estaba condenada a 94 años de prisión por asesinato.

La fuga de la supuesta cárcel militar fue, en realidad, una caminata a la calle desde un dormitorio mal vigilado. No es un juego de palabras: la Patrona vivía en una antigua barraca de soldados remodelada para alojar a una docena de prisioneras. Está a pocos metros de la salida principal del cuartel y el cuartel está demasiado próximo a una avenida que conecta a Ciudad de Guatemala con los puertos del Pacífico.…  Seguir leyendo »

Este mes en Ramala, Cisjordania, se exhibieron los retratos de presos durante una protesta en la que se demandaba la libertad de los palestinos que se encuentran en las cárceles israelíes. Credit Issam Rimawi / Anadolu Agency, vía Getty Images

Después de pasar los últimos 15 años en una cárcel israelí, he sido tanto testigo como víctima del sistema ilegal de arrestos arbitrarios en masa y del maltrato a presos palestinos implementado por el gobierno de Israel. Cuando ya no hubo más opciones, decidí que el único camino era resistir estos abusos por medio de una huelga de hambre.

Unos 1000 presos palestinos han decidido ser parte de esta protesta que comenzó el miércoles 12 de abril, el día que aquí consideramos como el “día del preso”. La huelga de hambre es la forma más pacífica de resistencia. Solo causa dolor a los que participan y a sus seres queridos, con la esperanza de que sus estómagos vacíos y su sacrificio ayuden a que su mensaje resuene más allá de los confines de sus celdas oscuras.…  Seguir leyendo »

Photos of prisoners during a demonstration demanding the release of the Palestinians held in Israeli prisons, in Ramallah, West Bank, this month.´Credit Issam Rimawi/Anadolu Agency, via Getty Images

Having spent the last 15 years in an Israeli prison, I have been both a witness to and a victim of Israel’s illegal system of mass arbitrary arrests and ill-treatment of Palestinian prisoners. After exhausting all other options, I decided there was no choice but to resist these abuses by going on a hunger strike.

Some 1,000 Palestinian prisoners have decided to take part in this hunger strike, which begins today, the day we observe here as Prisoners’ Day. Hunger striking is the most peaceful form of resistance available. It inflicts pain solely on those who participate and on their loved ones, in the hopes that their empty stomachs and their sacrifice will help the message resonate beyond the confines of their dark cells.…  Seguir leyendo »

Relatives wait for news after a deadly riot at Desembargador Raimundo Vidal Pessoa Public Jail on Jan. 8 in Manaus, Brazil. (Raphael Alves/Agence France-Presse via Getty Images)

Since New Year’s Day, a wave of horrific prison massacres in Brazil’s north and northeast have left more than 110 inmates dead, many decapitated and disemboweled, with no end in sight. This is prison-gang warfare, pitting the São Paulo-based Primeiro Comando da Capital (PCC), now one of the largest criminal organizations in South America, against a local affiliate of Rio de Janeiro’s Comando Vermelho (CV). The gangs’ 23-year alliance ended in September 2016 when the PCC declared war, citing CV betrayals. A few weeks later, PCC-led prison riots in three states killed about 20 people, foreshadowing January’s bloodletting.

Brazil’s prison gangs wield immense power on the streets, and driving the violence is a dynamic of competitive expansion.…  Seguir leyendo »