Tercera Edad (Continuación)

Si algo no ofrece dudas es que el presente de la pandemia y el futuro del país peinan canas en abundancia, con más de nueve millones de personas que rebasan los 65 años y que hoy constituyen casi un cuarto de la población. Una proporción que hace 40 años apenas superaba la décima parte y que en 2050 rozará un tercio del total de habitantes, lo que supondrá duplicar su cifra de hoy, doblando igualmente a la población infantil. Y es que, pese al descenso este año de la esperanza de vida debido a la pandemia, esta se sitúa en 85,44 años para las mujeres y 80,01 para los hombres, una de las más elevadas del mundo.…  Seguir leyendo »

Aprecio en las señales de mi cuerpo los presagios de lo que vendrá. No siempre seré joven, no siempre seré fuerte. De hecho, ya no soy joven, a pesar de lo que opinen mis amigos de setenta años. Precisamente eso, tener amigos de setenta años –pero no ahora, sino desde que comencé a escribir–, es uno de los más inmensos dones recibidos por mi vocación: alcanzar una cercanía honda en la amistad, compartiendo noches de vino y rosas pálidas entre conversaciones con poetas y escritores que te sacan más de cuarenta años. Esa gozada. Poder intercambiar opiniones, credos y gintonics con gente que has leído con veneración y contarle lo mal que lo has pasado, o tu liberación, tras volver a dejarlo con la novia.…  Seguir leyendo »

Un âgisme systémique révélé par la pandémie

La pandémie de COVID-19 a provoqué un véritable âgicide, notamment chez les personnes aînées vivant en milieu collectif. Les plus de 70 ans ne constituent que 19 % des cas de COVID-19  ; or, 92 % des décès ont été constatés dans ce groupe d’âge. Pourtant, une telle hécatombe n’a pas suscité la colère de la population, ni celle de nos dirigeants. Pas de mouvement « Old Lifes Matter », pas de flambée d’indignation sur les réseaux sociaux, pas de limogeage de dirigeants, ni même de manifestation symbolique comme on en voit un peu partout à travers le monde. N’y a-t-il pas là un âgisme systémique latent que la pandémie a soudainement mis au jour ?…  Seguir leyendo »

En los últimos tiempos, el grado de aislamiento y el trato de las personas mayores se distancian de lo que sería normal en el cambio generacional. No se confía en su capacidad intelectual, ni, por tanto, se reconoce su autoridad y maestría. Se les considera amortizados, fuera de época. Su opinión no interesa, su consejo resulta para los jóvenes un freno que no están dispuestos a aceptar. Se les descalifica con frecuencia: cosas de viejos... O se les trata como a niños: cuidado que ya no tienes edad…, etcétera. Incluso se ha pretendido señalar en su automóvil con una M su ancianidad, bajo el manto de medida protectora, que supone realmente presunción de discapacidad.…  Seguir leyendo »

Hace unos días le pedimos a una de las sobrinas de Ana, de 12 años, que dibujara a su abuela. Para nuestra sorpresa, en vez de dibujar a la típica abuelita de los cuentos con pelo blanco y anteojos, la niña la dibujó frente a su tableta electrónica. De no ser porque en el detalle de su dibujo había algunas arrugas, difícilmente hubiera podido decirse que era una abuela. Pero, razonándolo mejor, su abuela con 72 años dirige una organización de la sociedad civil, hace ejercicio varias veces a la semana y, exceptuando las limitaciones actuales por la covid-19, tiene una vida socialmente activa.…  Seguir leyendo »

Estábamos muy orgullosos de los cambios producidos en la sociedad a lo largo de los siglos XX y XXI, consecuencia de avances en la medicina y en la mejora de las condiciones de vida de millones y millones de personas, de tal manera que han visto prolongada su existencia y así aumentadas sus ilusiones para disfrutar del descanso que de jóvenes no pudieron tener, para empezar proyectos que tampoco pudieron realizar porque su trabajo no se los permitía o para echar una mano a quienes necesitaban de su ayuda. Esto ha sucedido en sociedades avanzadas. Por ejemplo, en la nuestra, en la que el porcentaje de mayores de 65 años es del 19,58% de la población y el de mayores de 75 es el 9,74%.…  Seguir leyendo »

Residencias, ¿solución final?

La situación por la que han pasado los ancianos en nuestro país, y no solo en el nuestro, durante esta epidemia que los ha diezmado, nos debería llevar a una larga y profunda reflexión sobre el papel de los mismos en nuestras egoístas sociedades, profundamente deshumanizadas. Abandonados o no en las residencias, no solo tienen que vivir fuera del ámbito habitual donde lo han venido haciendo a lo largo de sus vidas, sino con la permanente sensación de inutilidad y carga. Además, día a día, tienen que convivir con la soledad, la desesperanza, la falta de ilusiones y la presencia angustiosa de la muerte.…  Seguir leyendo »

La pandemia del coronavirus no ha hecho sino sacar a la luz y agudizar algunas de las tendencias entrañadas en las sociedades, prestándoles una visibilidad de la que carecían. La covid-19 ha oficiado en estas situaciones de altavoz, más que de causa. Es el caso, entre otros, de la gerontofobia, un vocablo no incluido en el Diccionario de la Lengua Española, que se refiere al temor, la prevención, la aversión o el desprecio hacia los ancianos, que sin duda ya existía, pero ahora ha salido a la luz con más claridad. Dos factores, fundamentalmente, han servido de palanca para llevar a la esfera pública la realidad de esa animadversión solapada.…  Seguir leyendo »

La mortalidad causada por la covid-19 en las residencias para mayores ha puesto de manifiesto las carencias del modelo de atención a la dependencia en España. No se trata de un problema exclusivamente español —las cifras son similares en los países de nuestro entorno—, pero pone de manifiesto las debilidades de un sistema caracterizado por niveles de gasto, dotaciones de personal y tasas de cobertura inferiores a lo habitual en esos países.

¿Qué razones explican el impacto de la covid-19 en las residencias? Es evidente que una enfermedad contagiosa, que afecta especialmente a personas mayores con patologías previas, impacta principalmente en los entornos en los que estas personas se concentran y conviven.…  Seguir leyendo »

Es frecuente la utilización publicitaria de imágenes de personas que disfrutarían de una vejez saludable y armoniosa, y también la referencia retórica a la capacidad del espíritu humano para neutralizar parcialmente el peso del determinismo biológico; así, la científica Rita Levi Montalcini, que no dejó de trabajar hasta su fallecimiento a los 103 años, o el cineasta Manoel de Oliveira, quien, con idéntica edad, afirmaba en este diario que si dejara de filmar se moriría. Quizás no se refería exactamente a la muerte física.

Pero estas referencias laudatorias a algunos de “nuestros mayores”, se dan cuando ha triunfado un modelo civilizatorio en el cual la imagen de la vejez es progresivamente repudiada, no sólo de la sociedad en general, sino también de los hogares.…  Seguir leyendo »

Un fantasma recorre el planeta, el fantasma del coronavirus. En marzo de 2020 hizo acto de presencia en Occidente y desde entonces es el significante rector de nuestras vidas. Luchamos contra él. La política ha devenido finalmente en biopolítica. De forma explícita. Hoy, a la luz y sombras del confinamiento, machaconamente se nos repite que toda decisión política es tomada en función de criterios estrictamente científicos y especialmente médicos.

Para evitar los contagios y no colapsar los servicios de urgencias de los hospitales, en nuestro país fue decretado el confinamiento sanitario generalizado amparándose en una figura jurídica como es el estado de alarma, que no anula pero sí restringe derechos fundamentales de los ciudadanos, esto es, capacidades individuales como son la movilidad o la libre circulación de personas.…  Seguir leyendo »

Cada vez es más difícil saber qué debemos creer sobre la pandemia. Parece bastante indudable que el Gobierno británico se equivocó en los primeros momentos (aunque tampoco estoy segura de que ninguno de los que sabemos todo “a toro pasado” lo hubiéramos hecho mejor). Lo que no está tan claro es qué sucederá.

La incertidumbre se debe, en parte, a la situación en la que se encuentran la mayoría de los periodistas. No disponen de información sobre los planes que está elaborando el Gobierno, aparte de algunas filtraciones probablemente sesgadas y las conjeturas que podamos hacer cualquiera de los demás. Si a este problema fundamental se añade la demanda de “novedades” en los medios de comunicación, el resultado es la ristra incoherente de especulaciones que vemos en los periódicos.…  Seguir leyendo »

“Envejecer es como escalar una montaña: mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena”. Ingmar Bergman

De repente te das cuenta de que te has convertido en una “viejita” (o en un viejito). Llevamos años oyendo que ser mayor no depende exactamente de la edad que tengas, que la edad de la vejez ha cambiado a lo largo de la historia y que el mejor indicador para medirla es la esperanza de vida. Según este criterio, y según el CSIC, si a los 72/73 años te quedan 15 años de vida, ese sería el inicio de la vejez.…  Seguir leyendo »

La política ha desconsiderado a las personas mayores. Son los hombres y las mujeres que con trabajo, diálogo y respeto sentaron las bases de la convivencia democrática en España durante más de cuarenta años. Son las generaciones que se preocuparon por los problemas de cada grupo social, las que superaron los peores momentos con la concordia y el reconocimiento de sus líderes políticos, las que premiaron el talento, antes que la mediocridad. Las generaciones, hoy nuestros mayores, que forjaron la sociedad que dio a España sus mejores años de paz y prosperidad. Por eso, la muerte en soledad en España de miles de personas mayores a causa del Covid-19 causa zozobra.…  Seguir leyendo »

Se ha convertido en frecuente entre nosotros, por aquello del aumento de la esperanza de vida, que a los más mayores no les cuiden jóvenes o personas maduras, sino hijos e hijas con la lógica diferencia de edad, pero también con años a sus espaldas. Estos últimos oyeron mucho a los primeros hablar de la guerra. Para ellos haber vivido aquel espanto, aunque fuera con ojos de niño, constituía su más indeleble seña de identidad generacional. Para sus hijos, en cambio, lo fue precisamente la lucha contra la omnipresencia de aquel relato tanto en el espacio público como en el privado y, muy en especial, contra la sombra de miedo que proyectaba sobre el conjunto de nuestra sociedad y su futuro.…  Seguir leyendo »

Estamos ante un hecho que los analistas definen como histórico al que tenemos que enfrentarnos y del que debemos aprender. El primer aprendizaje sería el de mostrarnos que la vejez estaba ahí, ha irrumpido en nuestras vidas y nos enfrenta a un reto nuevo: el desapego hacia los mayores que se exhibe no solo como falta de afecto sino como una injusticia hacia una generación, que en otros tiempos inspiraba respeto y veneración. Y se hablaba en términos muy diferentes de los actuales.

¿Cómo se hablaba de la vejez y cómo hablamos ahora? Si nos referimos al repertorio de definiciones asociadas al término vejez, hemos de remitirnos a la etimología de origen latino.…  Seguir leyendo »

Suelen llegar entrada la mañana, en forma de cuantías y gráficos, como un chaparrón repentino al que no ha precedido goteo alguno. Innominados, sin rostro, privados de una fe de vida que los acredite y nos instruya; mera estadística. Son, desde hace ya demasiado, nuestros muertos de cada día. Sólo cuando alguno de ellos reviste a la vez la condición de conocido, de amigo y no digamos de familiar, la frialdad de las cifras deja paso al duelo. No al acostumbrado, por desgracia, dadas las restricciones a que nos somete la pandemia, pero sí al que cada uno, en su reclusión involuntaria, es capaz de llevar y sentir.…  Seguir leyendo »

El coronavirus ha limpiado la agenda del debate público. Muchos de los problemas que hace un mes ocupaban nuestras conversaciones han desaparecido como por ensalmo. Se abre una nueva época en la que, pensando entre las ruinas que va a dejar la pandemia, tendremos que ocuparnos de los problemas esenciales de nuestra sociedad. Son muchos; pero uno de ellos, y no pequeño como han puesto de relieve las informaciones sobre la situación de las personas mayores en residencias y hospitales, es el del significado y alcance que hemos de dar al derecho a la vida, a la integridad física y a la salud de todos.…  Seguir leyendo »

La emergencia sanitaria de la Covid-19, en su alarmante capacidad infectiva, no entiende de clases sociales y alcanza a ricos, pobres, poderosos y gente corriente. Pero se ceba sobre todo con las personas de avanzada edad.

Ante situaciones de emergencia de salud pública como la que vivimos, los servicios de urgencia aplican la fórmula del triaje, sistema de clasificación de pacientes para decidir quiénes reciben determinados tratamientos o utilizan recursos, como las UCI, que pueden ser determinantes para salvar vidas. Desde algunas organizaciones hemos alertado de la vulneración de derechos humanos y principios de la bioética que supone tener en cuenta criterios de edad o situaciones de dependencia, lo que puede dejar sin atención a las personas más vulnerables.…  Seguir leyendo »

El personaje del cuento Una historia aburrida de Antón Chéjov, ostenta el alto rango de consejero privado en la nomenclatura imperial, y ha sido honrado con todas las condecoraciones deseables. Se trata de un anciano que nos relata sus memorias. Un anciano de 60 años de edad.

Todavía a inicios del siglo pasado, el que llegaba a los 40 años se dejaba crecer la barba, se buscaba un bastón, y olvidaba impulsos y ardores juveniles. Ya no se diga una mujer que a los treinta no se hubiera casado, era declarada oficialmente solterona y tenía que resignarse a que su vida sería la de vestir santos.…  Seguir leyendo »