Uberización (Continuación)

La mayoría, si no todos los negocios, requieren certificaciones o licencias para operar: desde los hospitales a los bares, de las aerolíneas a los cines. Todo el mundo entiende que hay un contrato entre las autoridades competentes en la materia y la aerolínea propietaria del avión en que nos subimos que no hace necesario que pidamos en la puerta del avión que el piloto nos exhiba sus credenciales o que el mecánico nos certifique que el avión es seguro para volar. Se supone que el regulador existe para que estos requisitos se cumplan. Y es interesante darse cuenta que si se dispone del capital necesario, uno puede, siguiendo los pasos adecuados, crear su propia aerolínea y enfrentarse al mercado con las todopoderosas marcas globales o con las pequeñas regionales.…  Seguir leyendo »