Islas Malvinas: reanudar las negociaciones bilaterales

Se cumplen en 2007 varios aniversarios que recuerdan la necesidad de resolver la disputa de soberanía pendiente entre la República Argentina y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes.

Han transcurrido 174 años de la usurpación británica de una parte del territorio nacional argentino. El 3 de enero de 1833, el Reino Unido interrumpió el efectivo y pacífico ejercicio de soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas, ocupándolas por la fuerza, expulsando a la población y autoridades argentinas allí establecidas y suplantándolas por una administración colonial y una población de origen británico. Desde entonces ha impedido la radicación de argentinos continentales en las islas.

La Argentina protestó de inmediato este acto de fuerza y ha sostenido, a través del tiempo, un permanente reclamo por la restitución de las islas.

La justicia de nuestro reclamo fue reconocida por la comunidad internacional. Hace 42 años la Asamblea General de Naciones Unidas adoptó, en 1965, la Resolución 2065 (XX) por la cual reconoció la existencia de la disputa de soberanía en la Cuestión de las Islas Malvinas, definiéndola como una forma de "colonialismo" y recordó a sus dos partes la obligación de negociar, a la mayor brevedad, para encontrar una solución pacífica, teniendo en cuenta los intereses de los habitantes de las islas. No existe en la Cuestión Malvinas una población sometida o subyugada a un poder colonial sino un conjunto de súbditos británicos trasplantados con el ánimo de establecer una colonia: se trata de un territorio colonial y no de un pueblo colonizado.

Todas las resoluciones posteriores de Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos, así como otros foros internacionales, reiteran hasta hoy esa exhortación.

La Argentina ha reiterado su disposición a entablar estas negociaciones. El Reino Unido -salvo un lapso entre 1966 y unos pocos años posteriores- se ha negado sistemáticamente.

Sobrevino luego el Conflicto del Atlántico Sur, del que se cumplen 25 años en 2007. La situación interna que atravesaban tanto la Argentina como el Reino Unido contribuyó a la escalada del conflicto. Del lado argentino, ante una coyuntura política adversa, la dictadura militar tomó la decisión de interrumpir el tradicional reclamo pacífico sobre las islas. Fue una decisión equivocada. El pueblo argentino siempre supo que el ejercicio pleno de la soberanía sobre las islas sólo puede ser recuperado por el diálogo diplomático. Conmemoramos este aniversario con profundo respeto por quienes dieron sus vidas y esfuerzos en el conflicto.

Ese conflicto -en el cual el Reino Unido no podría válidamente considerarse libre de responsabilidades políticas- no alteró ni la vigencia ni la naturaleza de la disputa y así lo reconoció, a menos de cinco meses de finalizadas las hostilidades, la Asamblea General de Naciones Unidas. Al igual que antes de 1982, la comunidad internacional continuó reconociéndolo desde entonces, a través de reiterados pronunciamientos de Naciones Unidas y otros foros.

Reanudadas las relaciones diplomáticas en 1990, ambos países acordamos varios entendimientos provisorios, bajo fórmula de soberanía, sobre cooperación en aspectos prácticos en el Atlántico Sur para generar el marco propicio para reanudar las negociaciones de soberanía. Sin embargo, el Reino Unido continúa ejecutando ilegítimos actos unilaterales, bajo reiterada protesta argentina, que contrarían la cooperación convenida, el mandato de la comunidad internacional y nos alejan de la mesa de diálogo.

El 10 de junio, la Argentina conmemora la creación, en 1829, de la Comandancia Política y Militar de las Islas Malvinas. Mediante este acto, el Gobierno argentino reafirmó sus legítimos títulos sobre las islas y buscó asegurar el respeto de las leyes para la mejor protección de la población que residía en las islas.

En la permanente búsqueda de una solución pacífica a la controversia de soberanía la Argentina mantendrá su reclamo, haciendo presente en todos los foros internacionales la obligación de encontrarle una solución a la brevedad, reanudando las negociaciones bilaterales. A tal fin, es fundamental el continuado apoyo de los países comprometidos con la solución pacífica de las controversias para poner fin a esta anacrónica disputa colonial.

Jorge E. Taiana, ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la República Argentina. Le responde Por Richard Davies, consejero de las islas Falkland: Sobre las Falkland.