Más unidos que nunca

El miércoles 30 de noviembre de 1803, la Real Expedición de Vacunas Filantrópicas zarpó en el María Pita desde La Coruña con destino a Suramérica y Filipinas. A bordo se encontraban el consumado médico militar Dr. Francisco Javier de Balmis y su equipo médico. Su misión era llevar la vacuna contra la viruela recientemente descubierta a los pueblos de las colonias españolas en lo que ahora llamamos América del Sur y Filipinas (aventura científica magníficamente novelada por Javier Moro en «A flor de piel»).

Obviamente, los congeladores de transporte de vacunas refrigeradas no existían a principios del siglo XIX, por lo que Balmis utilizó ingeniosamente una cadena humana de 22 huérfanos del orfanato de la Casa de Expósitos en La Coruña, con edades desde los tres hasta los nueve años, como transportistas de las vacunas. En el transcurso de los siguientes siete años, la expedición vacunó con éxito a más de medio millón de personas desde las Islas Canarias hasta Colombia y China, en lo que ahora se reconoce como la primera expedición internacional de atención médica.

Más de dos siglos después, España se encuentra inmersa en otra cruzada médica, una que tiene como objetivo contener la propagación del virus del Covid-19 dentro de nuestro propio país.

El pasado viernes 20 de marzo fue el ultimo día antes de la primavera en España. Normalmente un momento muy deseado, lleno de esperanza y expectativa, este año, la llegada de la primavera parece haber pasado desapercibida para todos. Comprensiblemente, dadas las circunstancias. Pero mientras escuchaba las noticias esta mañana, un amigo me envió el siguiente saludo: «Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera» (Pablo Neruda).

Esa línea optimista y desafiante me llevó a comenzar a escribir este texto. El Covid-19 ciertamente ha cortado las flores. De repente, con rapidez y sin discriminación. Pero no puede detener la primavera en nuestro país. Repasemos lo que ha sucedido aquí en el espacio de una semana:

El tráfico de internet durante el estado de emergencia ha aumentado en un 80 por ciento. Estas no son solo buenas noticias para Netflix o Movistar, son buenas noticias para la economía digital: desde Huelva hasta Huesca, las personas han demostrado que están listas para adaptarse a las nuevas reglas del juego y que la transformación digital, lejos de ser temida, es algo a ser fomentado. La mayoría de los perfiles de trabajo en Mapfre tenían nuevos kits de soporte de teletrabajo para más de 20.000 empleados en todo el mundo en cuestión de días y durante esta semana casi 30.000 (más del 90%) estarán listos para hacerlo.

Las compras de productos alimenticios han aumentado hasta un 180 por ciento en algunos días en comparación con las cifras previas al confinamiento y, sin embargo, las tiendas en todo el país están completamente abastecidas, a pesar de lo que las fotos recortadas selectivamente que circulaban online pretendían mostrar, lo que demuestra la capacidad de la cadena de suministro nacional para adaptarse rápidamente a las dinámicas cambiantes.

A medida que la economía española comienza a sentir el impacto del estado de emergencia, las capacidades digitales de las empresas se están poniendo a prueba. Mapfre ha sido durante muchos años una empresa multicanal: perder el canal cara a cara aún nos deja con una multitud de opciones de relación con el cliente y hemos mantenido excelentes niveles de contacto con nuestros asegurados desde el estallido de la crisis.

El inquebrantable sentido de solidaridad de nuestro país, tan a menudo manifestado en nuestra actuación en el extranjero en países en desarrollo, ha florecido aquí en casa. Los taxistas están proporcionando traslados gratuitos para el personal médico durante el estado de emergencia. Innumerables residentes están ofreciendo hacerles la compra a los vecinos mayores en sus edificios. Los propietarios de pequeñas empresas en los mercados municipales están donando sus artículos perecederos a trabajadores de la salud y ONG. Los maestros ofrecen sus enseñanzas online a los estudiantes mientras las escuelas están cerradas. Las instituciones culturales están presentando sus exposiciones online para que todos puedan disfrutarlas de forma gratuita.

También las grandes empresas tenemos que jugar un rol social importante en estos momentos. Planes estratégicos, roadshows, market cap e incluso política de dividendos pasan a un segundo plano. Más que nunca se debe reclamar ahora el rol social de la empresa y cómo éstas deben ayudar a la recuperación material y psicológica de nuestra población. Del dolor por los que están cayendo nadie nos va a poder resarcir.

Además de sus logros médicos y experiencia profesional, Balmis fue elegido para dirigir la Real Expedición de Vacunas Filantrópicas en gran parte debido a sus atributos personales: fue considerado un individuo metódico, minucioso, sabio, exigente, responsable y desinteresado. Estas son precisamente las cualidades que nosotros como sociedad estamos demostrando en estos tiempos difíciles. No tengo ninguna duda de que nuestra expedición colectiva prevalecerá a medida que avanzamos para superar esta situación singularmente desafiante.

Antonio Huertas es presidente de Mapfre.

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