Por W. R. Polk, nombrado por el presidente Kennedy miembro del Consejo de Planificación Política del Departamento de Estado, encargado de la planificación para el norte de África y Oriente Medio entre 1961 y 1965. Actualmente es director de la Fundación W. P. Carey (LA VANGUARDIA, 30/06/03):

La campaña militar llevada a cabo por las fuerzas británicas y estadounidenses en Iraq estaba diseñada para provocar “conmoción y temor” en el Gobierno, el Ejército y el pueblo iraquíes, y lograr así que se rindieran con celeridad y un mínimo de bajas entre las fuerzas atacantes. De forma inevitable, la infraestructura de las ciudades sufrió graves daños.…  Seguir leyendo »