El cuento chino de la oportunidad
Hay que prometer poco y bien. Si se quebranta este principio se aterriza de morros en los incumplimientos que nadie, a excepción de los cínicos, soporta con agrado. En plena tormenta económica, y después de aguantarlos con paciencia durante cuatro años, prometí en el 2012 que llegaría a las manos con quien pronunciara delante de mí la frase “en chino, la palabra 'crisis' no existe, ellos la llaman 'oportunidad'”. Incumplí la promesa, por supuesto. Primero, porque era tan solo una 'boutade'. Y segundo, porque de no hacerlo me hubiese pasado el día repartiendo y recibiendo tortazos.
Así que no voy a renovar los votos de saltar encima de nadie ahora que empiezan a multiplicarse los adalides que ven en el coronavirus una oportunidad. … Seguir leyendo »