Presupuestos: hora del rigor y la responsabilidad

El Banco de España acaba de hacer público su escenario de previsiones macroeconómicas para el período 2020-2022, incorporando la nueva información conocida desde sus anteriores proyecciones del pasado 8 de junio. El nuevo cuadro macro contiene una revisión a la baja del crecimiento de la economía española en 2020, una recuperación más lenta en 2021 y un agravamiento de sus tres desequilibrios básicos: el paro, el déficit y la deuda pública. Así mismo, certifica la perdida de dinamismo de la recuperación registrada el pasado mes de julio y apunta el riesgo de que España se descuelgue de la reactivación de la UE y de la zona euro.

En este contexto, España se enfrenta a una gravísima coyuntura en la que no cabe descartar un empeoramiento de los datos de crecimiento, empleo, déficit y deuda que se sitúen en parámetros peores que los proyectados por el Banco de España. Este riesgo se acentúa ante el recrudecimiento de la pandemia y su impacto sobre la economía real y las expectativas de las familias y de las empresas, así como ante la política económica en curso.

Vox señaló que el rebrote de la actividad experimentado en julio no marcaba una tendencia hacia una recuperación intensa de la actividad, sino que constituía un fenómeno coyuntural. Esta posición se ha visto reforzada por el Composite Leading Indicators de la OCDE y por los indicadores de expectativas que indican una inflexión del consumo y de la inversión a lo largo de este trimestre y del próximo, así como el ajuste a la baja de los PMIs de servicios y manufacturas en agosto.

España corre el serio riesgo de descolgarse de la recuperación económica de los países de la OCDE y de la UE, abriendo una brecha en su proceso de convergencia real -PIB per capita y empleo-paro- que tarde décadas en estrecharse y que constituya una señal muy negativa para los mercados, que termine por transformarse en una puesta en cuestión de la solvencia del Estado.

Empobrecimiento general

Con una economía que, de acuerdo con las proyecciones del Banco de España, no logrará alcanzar el PIB logrado en 2019 hasta 2023, se abre un panorama de empobrecimiento general de la sociedad, por la consolidación de un abultado nivel de desempleo y por un incremento insostenible del endeudamiento del sector público. Una economía en esas condiciones no es sólo un problema económico, sino una fuente de tensión social importante.

Ante este panorama, Vox compele al Gobierno a presentar unos Presupuestos que contemplen un plan de consolidación fiscal asentados en la reducción del gasto público, única vía para restaurar la sostenibilidad de las finanzas públicas y que ponga en marcha las reformas estructurales imprescindibles para dotar de flexibilidad a la economía e impulsar el despliegue de la oferta productiva. Esto implica una revisión radical de una estrategia irresponsable y populista que deja a España en una situación incapaz de superar la recesión en un espacio temporal inaceptable.

Sin credibilidad no hay confianza y sin confianza no hay posibilidad alguna de salir adelante. España se encuentra en una encrucijada dramática en la que ninguna de las fuerzas políticas parlamentarias parece estar dispuesta a explicar a la ciudadanía la gravedad de la coyuntura y la estrategia que es necesaria para afrontarla. Es el momento del rigor y de la responsabilidad.

Víctor González Coello de Portugal es vicepresidente de Vox y responsable del área económica del partido

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