Por Pascal Boniface, director del Instituto de Relaciones Internacionales y Estratégicas de París. Traducción: José María Puig de la Bellacasa (LA VANGUARDIA, 24/06/06):
El organismo de informes y encuestas sobre la opinión pública internacional Pew Global Attitudes Project, presidido por la ex secretaria de Estado estadounidense Madeleine Albright, se presenta como organización no partidista ni influida por cuestiones ideológicas que se limita a presentar los hechos y la realidad.
Elabora estudios y análisis sobre las opiniones públicas, la política exterior estadounidense, la globalización, la democratización y el terrorismo, y acaba de publicar su decimotercer estudio sobre estas cuestiones, llevado a cabo en quince países.
Este estudio muestra que la imagen de EE. UU. se ha degradado de nuevo. Si bien consta aún un 56% de opiniones favorables a EE. UU. en Gran Bretaña, es menester comparar esta cifra con la del 83% del año 2002. En Francia, las opiniones favorables se sitúan en el 39%; en Alemania, en el 37%; y únicamente en el 23% en España. En Turquía únicamente alcanzan el 12%, cuando llegaban al 52% en el año 2000. Sólo Nigeria muestra una mejora de la imagen de EE. UU., con un 62% de opiniones favorables. En este país los cristianos se declaran próximos a Washington en tanto que los musulmanes no ocultan su sentimiento hostil. Los estadounidenses siguen recibiendo un positivo respaldo de parte de Japón (63%) e India (56%). En China se aprecia una percepción menos negativa de lo que cabría pensar, con un 47% de opiniones favorables. La opinión igualmente favorable sólo alcanza el 30% en Indonesia y en Egipto, y el 27% en Pakistán. A la pregunta: "¿Sería peligroso que Irán adquiera o consiga armamento nuclear?", se responde de forma casi unánime. Las respuestas positivas se elevan al 97% en Alemania; el 92%, en Francia; el 82%, en Rusia; el 92%, en EE. UU.; el 52%, en China, y sólo el 15% en Pakistán.
El estudio muestra igualmente que la presencia militar estadounidense en Iraq se considera en numerosos países como el peligro principal para la paz mundial, incluso con relación a otros motivos de preocupación como el logro de armamento nuclear por parte de Irán, la situación en la península coreana o el conflicto palestino-israelí. En Gran Bretaña, por ejemplo, el 41% de los encuestados juzga que el principal peligro para la paz mundial reside en la presencia militar estadounidense en Iraq, frente a sólo un 34% que alude al programa nuclear de Irán. En los países musulmanes los resultados son aún más inapelables: el 14% de los egipcios teme a Irán, mientras el 56% teme a EE. UU. En Turquía las cifras son, respectivamente, el 16% y el 60%. En Japón se observa una paridad del 29% en ambos casos.
La mayoría de los europeos juzga igualmente que la guerra en Iraq ha vuelto el mundo más peligroso. Así es en el caso del 76% de los franceses, el 68% de los españoles, el 66% de los alemanes e incluso el 60% de los británicos. Hasta el aliado japonés piensa del mismo modo, con el 61%. Sólo los indios son más numerosos a la hora de considerar que el mundo es más seguro desde la guerra de Iraq, con el 41% de los encuestados frente al 32% que piensa lo contrario. Las opiniones públicas no consideran, por tanto, convincente el discurso que George W. Bush y Tony Blair reiteran una y otra vez en el sentido de que el mundo es más seguro desde el derrocamiento de Saddam Hussein. ¡Indudablemente, la guerra de Iraq seguirá pesando por largo tiempo sobre la imagen de EE. UU.!
El estudio muestra asimismo que debido a la elección de Hamas a la cabeza del Gobierno palestino, los países europeos reorientan sus simpatías de modo favorable a Israel. Los estadounidenses, por su parte, manifiestan simpatías por Israel en un 48% frente a un 13% por los palestinos. En Alemania las cifras indican un 37% favorable a los israelíes y un 18% a los palestinos; en Francia las opiniones se distribuyen a razón de un 38% hacia cada lado. En España las preferencias se inclinan claramente del lado palestino, un 32% de los encuestados, frente a sólo un 9% del lado de Israel.
Pues constatarse, en consecuencia, una neta disminución del respaldo a los palestinos entre las opiniones europeas. A la inversa, Israel, que hasta fecha reciente se consideraba el responsable de la falta de solución del conflicto, ve mejorar su imagen. Dos razones explican este cambio de tendencia. Israel recoge los beneficios de la retirada de Gaza, presentada de forma casi unánime por los medios de comunicación occidentales como un gesto histórico en dirección de la paz. La llegada de Hamas al poder, por su parte, mitiga el sentimiento de solidaridad con los palestinos.
Por último - postrer elemento de información-, mientras la imagen de Francia mejora en EE. UU. con un 52% de opiniones favorables (frente a un 46% el año pasado), se degrada en los países musulmanes. La imagen favorable de Francia sólo alcanza un 18% en Turquía (frente a un 30% el año pasado), sin duda debido a los debates en Francia sobre la candidatura turca al ingreso en la Unión Europea, y un 25% en Pakistán, un 46% en Jordania y un 60% en Egipto. En España pasó del 74% en el año 2005 al 66% en el 2006.