Cuando ayer el Rey Don Juan Carlos comunicó a todos los españoles su decisión de renunciar a la Corona, muchos extremeños recordamos cómo sin la contribución de la Monarquía iniciativas únicas que sitúan en el mapa a Extremadura como la Feria Internacional de Zafra, el Premio Carlos V o el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida no serían referentes, como lo son hoy, en todo el mundo.
Nosotros somos un pueblo que tiene mucha historia y buena memoria. Del reinado de Juan Carlos I podemos extraer que la Monarquía parlamentaria nos ha permitido el periodo de mayor estabilidad institucional, política, económica y social de nuestros más de 500 años de historia como nación. El Rey ha sido el punto de encuentro de todos los españoles, de izquierdas y de derechas, durante casi 40 años.
Ha sido el mejor Rey de España hasta la fecha. Ha sabido conectar siempre con los sueños y esperanzas de todos nosotros. Ahora las miradas están puestas en el Príncipe Felipe, que pronto será Felipe VI. Lo conozco personalmente, tiene una preparación extraordinaria y lleva toda una vida formándose para este momento. Las expectativas que genera son muy altas y no me cabe duda de que estará a la altura ante los retos que ha de superar España para volver a convertirse en una de las naciones más prósperas del mundo.
Extremadura estará con el nuevo Rey. Cuenta con la lealtad incondicional para cualquiera de los desafíos que deberá afrontar. El principal de todos ellos será, cuando proceda, la reforma de la Constitución. Apostamos por un proyecto común que es España, sin mirar al pasado. Creo en una reforma constitucional que garantice el modelo de las autonomías, pero reforzando el papel cohesionador del Estado y sus competencias en nacionalidades y regiones. Creo en una Constitución que asegure la convergencia entre todos los territorios. En Extremadura hemos dado un claro ejemplo, el PP y IU, de que el entendimiento entre diferentes es posible. Para que la regeneración en España sea una cuestión de todos, la izquierda y la derecha deben estar con Felipe VI. Tenemos que volver a llegar a grandes pactos entre las fuerzas políticas. El nuevo monarca deberá ayudarnos en este proceso de nuevos consensos y guiarnos hacia un periodo de tanta estabilidad y tantos logros como el de Don Juan Carlos. Los tiempos han cambiado y todos debemos de cambiar con los tiempos, aunque sea por egoísmo.
José Antonio Monago es el presidente del Gobierno de Extremadura.