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Este cuenco pertenece al tipo de cerámica «chamois con decoración viva» (cf. núms. cat. 170 - 171 ) y presenta decoración pintada tanto en el interior como en el exterior. La decoración interior está dominada por un jinete con las riendas en la mano derecha y una espada en la mano izquierda. Tanto el jinete como el caballo se representan de perfil y tras el caballo hay un guepardo subiéndose a la grupa. Entre los numerosos motivos que llenan el fondo hay pájaros (¿pavos reales?), cuadrúpedos con cuernos (¿cabras monteses?), rosetones e inscripciones cúficas, éstas últimas en grupos de dos alrededor del borde —se trata de pseudoinscripciones—. La decoración exterior consiste en elementos en forma de almendra alternados con motivos en forma de espiga. Wilkinson sostiene que hay otro cuenco que seguramente proviene del mismo taller, pues en él hay también un guepardo sobre un caballo, si bien no aparece el jinete (Wilkinson [1973], 22 en referencia al núm. e il. 86). El tema de la caza con guepardos es bastante antiguo. Fujii (1993) mantiene que apareció por primera vez bajo la primera dinastía Tang. Sin embargo, en el ámbito islámico ya se conocen fuentes del período abbasí (Mercier 1927, 70-74; Viré 1974; Ahsan 1979, 207-210). A pesar de que en Nishapur el motivo del guepardo sobre el lomo de un caballo sin jinete aparece con más frecuencia, también existen casos en los que aparece el jinete. Un ejemplo de ello son dos piezas aparecidas en el mercado de antigüedades (cat. subasta Londres 1984, il. 18; cat. subasta Londres 1994, il. 236), y un cuenco del Museo Nazionale d'Arte Orientale de Roma (núm. inv. 2629; cat. exp. Faenza 1990, núm. cat. 12, con il.), en las cuales aparecen tres jinetes con guepardos dispuestos en círculo a lo largo de las paredes del cuenco. Esta iconografía también aparece en cerámica de épocas siguientes y la encontramos asimismo en otros materiales, como por ejemplo, en metal (cf., entre otros, los ejemplos de Rice 1954, il. 7, 9,13-21 y tab. 7 b), en tejidos (cf. el Sudario de San Lázaro, de estilo hispanoárabe, Baer 1967, il. 2, 7-9), en marfil (cf. una placa fatimida del Museo del Louvre, Departamento Islámico, núm. inv. 6265 b; cat. exp. París 1990, num. cat. 180, con il.) y madera (cf. el portal de la iglesia de Santa Bárbara de Fustat, ahora en el Museo Copto; Hunt 1998, il. 3). Es obligada la comparación entre los elementos decorativos de este cuenco y la maravillosa pintura con el halconero a caballo descubierta en la pared norte de «Vineyard»-Tepe en Nishapur [FIG. 62] que en la actualidad se conserva en el Museo de Teherán (Wilkinson 1986, il. 2.38-41): encontramos analogías bastante exactas en cuanto a la poderosa estatura del caballo, la gualdrapa con puntos decorativos similares y, finalmente, en los zapatos de ambos jinetes, extraordinariamente puntiagudos. (M. V. F.) |
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