Grabé anoche el programa 59" y hoy lo he visto con tranquilidad. Bueno... lo de tranquilidad es un decir. Ya en otra ocasión critiqué el sectarismo y la mala educación de algunos de los periodistas que habitualmente acuden a este programa. Ahora les toca a los políticos: su demagogia se ha convertido en algo tan habitual que casi no le damos importancia. Demagogia que se ve acompañada, como en el programa de ayer, de la más absoluta ignorancia. Me refiero, por ejemplo, a las menciones que se hicieron a legislaciones en otros países sobre la adopción de parejas homosexuales. Ninguna de ellas se correspondían a la realidad y, para colmo, tampoco la realización del programa consideró oportuno aportar un estudio comparativo. Y no digamos nada de la doble moral del PP: claman por incorporar la "objeción de conciencia" en la ley que regula el matrimonio homosexual y, al mismo tiempo, sancionan a dos diputadas populares por votar en contra de la opinión mayoritaria de su propio grupo. Objeción de conciencia: sí..., pero cuando les interesa.

FUENTE: Suplemento Babelia (30 de abril de 2005). Texto y enlaces por Josep M. Sarriegui.

Con unos golpes de ratón, quienes quieran conocer de manera directa su pensamiento encontrarán en Internet buena parte de los escritos del nuevo pontífice.

ABC publica en su edición del 1 de Mayo un artículo sobre aquello de predicar con el ejemplo y que, a la vista de los datos, tal mal se le da a nuestras elites políticas. Pero dejando a un lado las cifras, me preocupa especialmente el origen de la información: fuentes de la Inspección de Trabajo. Y me preocupa porque mal podemos los consumidores ejercer presión alguna si los datos no son públicos; me preocupa porque se nos niega la posibilidad de seleccionar los productos en función de las políticas salariales, ambientales o de cualesquiera otra característica relevante de las empresas que los producen. Nos hemos arrojado a la democracia representativa sin caer en la cuenta del gran poder que, en un momento dado, la Sociedad Civil puede ejercer. El caso del boicot a determinados artículos es paradigmático en este sentido y algunas empresas ya lo han sufrido en países como Francia o Alemania. Por ello, sería deseable clasificar aquéllas en una escala ética de forma que le sea útil al ciudadano para establecer criterios de valoración cuando realiza una compra o hace uso de un servicio.

Visita la página del Museo de Arte Precolombino del Cusco y maravíllate con sus hermosísimas piezas. Perú sigue dando ejemplo con páginas con esta que deja por los suelos alguna que otra web de renombrados museos. Buena prueba de ello lo tenemos también en la remozada web del Museo Nacional Sicán, donde ahora disponemos de vídeos, panorámicas, etc. Pero, claro, ellos se toman en serio esto de la Sociedad de la Información: cholonautas, cuyo objetivo no es otro que el desarrollo de las Ciencias Sociales en Perú.

Igualdad hombre-mujer: mucha paridad en listas electorales, mucha igualdad en la tareas domésticas, mucha igualdad en el salario... y resulta que casi el cien por cien de los comentaristas que escriben en las secciones periodísticas denominadas "Tribuna Libre" o "Colaboraciones" son hombres. Mal camino llevamos si los primeros que deberían dar ejemplo -los mass media- son precisamente los más machistas. Que alguien me lo explique porque yo no lo entiendo. Buen fin semana.

Hacía mucho tiempo que no visitaba la web de las Galeries Nationales du Grand Palais pero compruebo encantando que, al igual que otros museos anglosajones, ponen en la Red un complemento on-line de las exposiciones que actualmente pueden visitarse. Es el caso ahora mismo de Brésil indien. Les arts des Amérindiens du Brésil y Poussin, Watteau, Chardin, David… Peintures françaises dans les collections allemandes (XVIIe - XVIIIe siècles). En España, el Museo del Prado también avanza en la misma dirección: Durero. Obras Maestras de la Albertina y Annibale Carracci. El MoMA por su parte ya lleva bastante tiempo aprovechándose de las nuevas tecnologías y persiste en este camino: Contemporary Voices: Works from The UBS Art Collection. Eso sí, el rey en este ámbito no es otro que el Metropolitam Museum od Art: From Filippo Lippi to Piero della Francesca: Fra Carnevale and the Making of a Renaissance Master.

Francisco Marín Bagüés fue el más pequeño de los siete hijos de Ignacio, un veterinario soriano, y de su esposa, Bárbara, natural de Leciñena, pueblo donde vivió la familia mucho tiempo y que vio nacer al artista. Al maestro de la escuela hay que atribuir el primer aprecio por las dotes del chico para el arte, pero la voluntad paterna lo encaminó por la, para él, áspera senda del bachillerato. Todo es, sin embargo, inútil cuando se trata de ahogar una vocación tan profunda, definida y ardiente como la que sentía aquel mozo monegrino. Atado a ella de modo que conmueve, Marín Bagüés la sirvió como quien se dedica a un sacerdocio. Su temprana orfandad, las estrecheces económicas, la permanente soltería y los embates de la enfermedad no pudieron nada contra la voluntad de este hombre, introvertido y modesto, que pasó la mayor parte de su vida en la ciudad de Zaragoza, donde concluyó sus días.
Para muchos críticos y estudiosos, es el más notable pintor aragonés del siglo XX. La representación de lo regional en ese siglo —tipos, trajes, paisajes rurales y urbanos, sucesos de la historia del antiguo Reino y numerosos retratos de personajes contemporáneos— está vinculada a su trabajo excepcional, constante, innovador y dotado de fuerte personalidad. Hay imágenes de Aragón y de lo aragonés debidas a su talento, que, por su poderoso impacto, actúan en la memoria social como verdaderos iconos consagrados: imágenes del Ebro, de la jota, de la vida hogareña en el campo o de acontecimientos como el Compromiso de Caspe, apenas pueden ser imaginados sin pasar por la plasmación que les diera en sus lienzos Marín Bagüés.

Las Tres Edades (1919)

F. Marín Bagüés, Las Tres Edades, Castelserás, 1919. Óleo, 158 x 135 cm. Colección particular

F. Marín Bagüés, Las Tres Edades, Castelserás, 1919. Óleo, 158 x 135 cm. Colección particular

Es un gran cuadro, desde los puntos de vista iconográfico y estético, con un título en clave alegórico-regional. Pero la alegoría, procedente de fuentes clásicas para representar en figuras femeninas las tres etapas fundamentales de la vida, era en Marín Bagüés, sobre todo, una visión melancólica de la mujer y de lo que había soñado podía haber representado en vida, que cumplía en ese año los cuarenta.
Las tres mujeres que posaron para el cuadro eran de Castelserás. La joven sentada en el suelo era su sobrina Leopoldina Anglés Marín, modelo habitual del pintor, siempre vestida con mantón floreado como en el cuadro Baturra con traje verde y un plato de frutas (h. 1918) y en otros. Supuso también el broche brillante a su pintura regionalista, que en este lienzo pasaba a un plano de complemento secundario.
La escena en la que sitúa Marín estas tres figuras es el cálido interior de una casa del pueblo de Castelserás. Un espacio sobrio pictóricamente, pero acogedor por el fondo de madera de las hojas en cuarterones de una puerta y el respaldo torneado de la silla desde la que preside sentada la mujer mayor con la rueca de caña y el huso en sus manos.
Ésta es, sin duda, la figura de mayor presencia expresiva por su mirada directa al espectador y por la gran falda rojo púrpura que traza el eje central del cuadro y de su composición triangular. En cada ángulo pone el pintor las otras edades: a la derecha, la muchacha sentada en el suelo, con el cestillo de frutas en el regazo de su falda azul y en el opuesto, la niña de vergonzosa pero intensa mirada, que lleva recogido con sus manos el delantal o zagalejo de color azul, del que asoman una flores por los extremos.
En los colores que con tanta sensibilidad eligió Marín para los vestidos de cada edad, en los objetos que llevan cada una -rueca, frutas y flores- y en los matices de sus miradas (la de la muchacha hacia el suelo se debía también a su estrabismo) encontramos las claves de esta alegoría en versión rural de sobrio realismo. Pero también expresaba la psicología afectiva del pintor, que veía alejarse el amor fallido, y hasta rechazado, de juventud y lo apuntalaba en la decidida figura de la mujer mayor, como un trasunto del papel que desempeñaba su madre.
Tenía el cuadro en mucha estima, pues lo guardará consigo hasta que hacia 1947 se entusiasmó con el lienzo Eduardo Baeza, gobernador civil de Zaragoza, y se lo compró.

FUENTE: Francisco Marín Bagüés. Su tiempo y su ciudad (1879-1961). Colección Mariano de Pano y Ruata. Caja de Ahorros de la Inmaculada de Aragón, 2005

  • El lince ibérico: Web elaborada por Antonio Rivas donde se recoge abundante información sobre el lince ibérico (su biología, conservación, distribución, amenazas…).
  • La Máquina del Tiempo es un proyecto para trabajar en la recuperación de los oficios tradicionales de la mar, tal y como se venían desarrollando en la comarca de Luanco hace aproximadamente un siglo. Dirigida a alumnos del segundo y tercer ciclo de primaria.
  • Proyecto Antonio de Ulloa: material didáctico multimedia de apoyo de las enseñanzas mínimas de Ciencias de la Naturaleza de la ESO.
  • Urbanita 2000: Conoce las ciudades desde el aire, de José Antonio Padilla Ángel y Ignacio González-Cutre Coll.
  • Documentales Online: Documentales de naturaleza, para reproducir desde Internet. Destacan "El Agua", y "El Buitre Leonado", realizados por Juan Luis Bort y José Bort.

Más agradecimientos: en esta ocasión a todos los lectores que, bien a favor o bien en contra, se han manifestado sobre el comentario que escribí ayer sobre el matrimonio homosexual. El tono de todos ellos ha sido de exquisita amabilidad, lo cual les agradezco. Desafortunadamente esta bitácora es manual (*) y no existe la posibilidad de insertar comentarios como en las que utilizan herramientas específicas para la publicación de blogs (v.g. Blogia o acelblog). No obstante, he seleccionado dos opiniones: ambas aportan puntos de vista muy interesantes aunque contrapuestos a los aquí defendidos. En el  primero de ellos, J.L. analiza el artículo de Enrique Rojas: Si a la adopción. En el segundo, J.P.G. defiende la equiparación completa: Matrimonio homosexual: hasta la igualdad y nada más.

Aclaraciones al comentario de ayer sobre el matrimonio homosexual:

  1. Según me informan varios lectores, el tal Enrique Rojas no es profesor titular de ninguna cátedra. Rebuscando en la web he encontrado que se le asocia a la Universidad Complutense pero no aparece en el directorio de esta universidad. También se le menciona como director del Instituto de Investigaciones Psiquiátricas pero en la estructura de este instituto tampoco consta su nombre. Sin embargo, SÍ existe una empresa particular llamada "Instituto Español de Investigaciones Psiquiátricas S.A." cuyo domicilio es Serrano, 100 (Madrid) y donde, al parecer, ejerce su profesión. También es posible que hubiera obtenido la cátedra hace algunos años y que posteriormente pasara al sector privado. De todas formas, el error habría sido el de reproducir el cometido por ABC pues este periódico lo presenta como catedrático en el artículo de opinión.
  2. Bajo el citado artículo subyace un concepto sobre la homosexualidad que no comparto en absoluto (ver más arriba las críticas que J.L. ha enviado al respecto). Ni considero a la homosexualidad una enfermedad ni a los homosexuales enfermos capaces de propiciar daños psicológicos a sus hijos. En fin... que no podía haber elegido peor ejemplo para expresar mi opinión que el del tal Rojas.
  3. Realidades sociales distintas: por su propia naturaleza, la unión heterosexual difiere de la homosexual. Esto es una realidad innegable que en modo alguno lleva implícita -ni explícitamente- la discriminación de una de ellas. Otra cosa es que los cavernícolas de turno -es decir toda la derecha europea y la Iglesia Católica- partan de esta premisa para rechazar a renglón seguido cualquier tipo de legislación sobre las uniones homosexuales. Repito lo escrito ayer: ni mejores ni peores; sólo distintas.
  4. Cautelas a la posibilidad de adopción por parte de las parejas homosexuales: aunque los actuales estudios no detectan diferencias estadísticamente significativas en función del tipo de pareja, es preciso mencionar que las muestras no son lo significativas que muchos quisiéramos. Es prematuro por tanto asegurar su validez externa (poder generalizar a partir de los resultados obtenidos) y predictiva (ausencia de estudios longitudinales). Existe, por ejemplo, la posibilidad que dentro de veinte años un estudio con los mismos sujetos diera resultados completamente distintos; podríamos encontrarnos, por poner un ejemplo, un conflicto o ambigüedad de rol sexual en adultos criados en ambientes homosexuales estadísticamente significativo respecto a los criados en ambientes heterosexuales. No es una afirmación sino una posibilidad y no estoy diciendo que la orientación sexual de los niños criados en el seno de familias homosexuales conduzcan irremediablemente a una u otra opción sexual. Estoy diciendo que, tal vez (repito: tal vez), pudieran presentarse los mencionados problemas. Por supuesto tal conflicto o ambigüedad no tienen por que alcanzar el grado de patología; ni muchísimo menos. Como ven yo mismo ofrezco el contra argumento. A pesar de todo, mantengo la cautela en cuanto a la validez externa y predictiva de los actuales estudios. Por todo ello, de todas las legislaciones que conozco, la que más se aproxima a mi punto de vista es la danesa que ha adoptado como figura legal la "Unión Civil" en lugar del "matrimonio", quedando fuera la posibilidad de adoptar aunque se reconoce a las uniones homosexuales el derecho de reconocimiento (un miembro de la pareja puede adoptar legalmente al hijo del otro miembro). Admito que esta posición es algo conservadora pero aún con eso, estaría más a la izquierda que los Partidos Social Demócratas de Finlandia, Noruega, Dinamarca y Alemania. Todos ellos han promovido también la "Unión Civil" pero sin posibilidad alguna de adopción. La única excepción es Suecia y, por supuesto, Bélgica y Holanda donde optaron por el "matrimonio homosexual". Peor es todavía la situación en países como Portugal, Francia y Hungría donde la izquierda se ha limitado a regular la homosexualidad de forma mucho más restrictiva al limitarse a promover "Leyes de parejas de hecho". Y no digamos nada de los Estados donde ni siquiera hay leyes que regulen estas cuestiones: Italia, Irlanda, Grecia, Austria, Luxemburgo y la gran mayoría de los países recién admitidos

(*) En 2005 aún no utilizaba un CMS y la bitácora se construía con html.