Buscador avanzado

Nota: la búsqueda puede tardar más de 30 segundos.

Tengo un pariente que se parece tanto a uno de los imputados por la quiebra de las cajas de ahorros que suelen confundirle con él. El otro día, un taxista se negó a cogerle: “¡A ti no te llevo, chorizo!”, le soltó en mitad de la Gran Via. Mi pariente se quedó tan aturdido que no acertaba a moverse. “Tendrás que cambiar de cara –le dije–, si no quieres que te hagan una nueva”. Pero él, que no es tonto, me contestó: “¿Por qué no se cambia la cara él?”. Esto me hizo pensar en la reacción que habría podido tener el modelo original si hubiese sufrido el escarnio en carne propia.…  Seguir leyendo »