Aún hay jueces en Madrid
Hace cinco años comparé al Jamal Zougam confinado 20 horas en su celda de aislamiento con el Alfred Dreyfuss enterrado en vida en la remota isla del Diablo. Hace cuatro equiparé su caso al del protagonista de Call Northside 777, víctima de un error judicial que se descubre al cabo de mucho tiempo gracias a la tenacidad de su madre y al empeño de un reportero. El año pasado, el estreno de la película de Robert Redford sobre la viuda ejecutada sin pruebas suficientes por su implicación en el asesinato de Lincoln me impulsó a pedir lo que ella no tuvo: «Un nuevo juicio para nuestra Mary Surratt».… Seguir leyendo »