Gestión crisis COVID-19 (Continuación)

Coffins of coronavirus victims, to be buried or incinerated, were stored in the underground parking lot of a funeral home in Barcelona on Thursday.Credit Samuel Aranda for The New York Times

At the end of January, a German tourist became Spain’s first coronavirus patient. At the time, the health threat seemed for the nation as remote as the tiny Spanish island of La Gomera, where he was treated. Two weeks later, the German walked out of hospital, and Spain celebrated being again “virus free”.

It proved a very brief respite. But even as more cases surfaced, Spanish officials continued to stress that the coronavirus was being imported, notably onto another island by tourists from Italy, where hospitals were already under siege. The story line was that Spain faced an external threat, but did not risk a domestic epidemic.…  Seguir leyendo »

Lockdown should have come sooner. Photographer: Daniel Perez Garcia-Santos/Getty Images Europe

From the hospitals in Bergamo to the Pope’s prayers in Rome, Italy has become the symbol of the Covid-19 epidemic in Europe. But as the contagion in Italy slows and the daily death toll starts to fall, the eyes of the world have moved to Spain, which is suffering from an equal – if not worse – outbreak.

Spain has more than 130,000 registered cases now and 12,000 recorded deaths. The death toll is lower than Italy in absolute terms, but slightly higher if one takes into account Spain’s smaller population. What’s worse is prime minister Pedro Sanchez, much like his counterparts in France and the U.K., …  Seguir leyendo »

Sin publicidad no hay democracia. El derecho a informar y a obtener información, la libertad de expresión y comunicación, garantizan la formación de la opinión pública libre, sin la cual no puede haber un régimen democrático. Porque el control del poder público y la función de oposición política se realizan en nombre de los ciudadanos, para garantizar la transparencia, la publicidad y la rendición de cuentas de quienes ejercen el poder político.

Pues bien, en un momento como el de la declaración del estado de alarma, en el cual el Gobierno español concentra más poder del que nunca ha tenido, es crítico respetar estos elementos básicos en un régimen democrático.…  Seguir leyendo »

Uno de los argumentos utilizados por los gobernantes en la actual crisis del coronavirus es que en realidad ellos hacen lo que los expertos les mandan o, para utilizar las palabras del presidente Macron, “de acuerdo con las evidencias científicas” que les comunican. Siendo esto así hay quien se pregunta por qué no ponen a esos expertos al frente de los Gobiernos, aunque, salvo excepciones, no sería lo más conveniente, pues incluso si fueran verdaderamente capaces eso no les convierte en líderes sociales o políticos. Tiempo habrá por lo demás para discutir sobre este mundo nuestro, puntero en la innovación y la ciencia, que no tiene mejor explicación de la pandemia que el hecho de que un chino se haya comido un murciélago.…  Seguir leyendo »

Aquí estamos, todos por igual, independientemente del país o la clase social, expuestos a la amenaza mortal de un virus que no es chino (los virus no tienen pasaporte), aunque nos llega desde China. Los principales responsables de esta pandemia son los dirigentes de la provincia de Hubei y luego el presidente chino, quienes, por amor al secreto y horror a las malas noticias, ocultaron la verdad, primero a su pueblo y luego al resto del mundo, durante aproximadamente seis semanas. Este ocultamiento fue trágico y decisivo, pues permitió que el virus escapara de su hogar original, la ciudad de Wuhan, para infectar a toda China y al resto del mundo.…  Seguir leyendo »

El padrecito Stalin, con 20 millones de víctimas sobre su conciencia, sentenció cínicamente que, mientras que una muerte es una tragedia, un millón es estadística. El sucesor de Lenin olvidaba que ese millón de cadáveres encerraba un millón de tragedias, como apostilla el gran escritor británico Martin Amis en su estremecedor Koba, El Terrible, donde recrimina la complicidad de la izquierda totalitaria –entre ellos, su padre– con las atrocidades del sátrapa. Atendiendo a la dolorosa invisibilidad de los casi 12.000 fallecidos oficialmente en España por el coronavirus, recobra lúgubre vigencia el aforismo estalinista. Más cuando las víctimas de la pandemia agonizan en soledad y en soledad son sepultados envueltos en una mortaja de ausencia bajo el mármol frío del Registro.…  Seguir leyendo »

Si un virus se propaga a través de gotículas respiratorias expulsadas por la nariz y la boca no parece aventurado suponer que cualquier protección facial será de utilidad para contener el contagio, en la doble vertiente de la salvaguarda personal y de evitar que un portador de la enfermedad contamine a un individuo sano. De hecho, la adecuada dotación de mascarillas (cubrebocas o barbijos, como se dice en los países hispanoamericanos) y otros equipos de autopreservación ha sido en los momentos álgidos de la emergencia la reclamación más candente de los profesionales sanitarios, conscientes del peligro al que los somete el permanente contacto con pacientes infectados.…  Seguir leyendo »

1. Porque cuando se defiende la idea de que es indecente criticar al Gobierno en tiempo de crisis lo que se está diciendo en realidad es que es indecente criticar al Gobierno en tiempo de crisis aunque las medidas del Gobierno estén agravando la crisis.

2. Porque ningún ciudadano libre debería aceptar órdenes de quienes consideran que lo decente es defender al Gobierno aunque su actuación sea indefendible.

3. Porque prohibir las críticas al Gobierno, pero permitir al mismo tiempo las alabanzas al Gobierno es, en el mejor de los casos, hipócrita. Si el objetivo es no entorpecer la labor del Gobierno, que no entorpezca nadie: ni con críticas ni con halagos.…  Seguir leyendo »

En situaciones como las actuales, de extrema excepcionalidad, es importante reflexionar sobre dos elementos esenciales de la democracia: la defensa del interés general y la dimensión política que existe en toda crisis. El primer punto atañe muy principalmente al Gobierno central, que tiene que actuar siempre, y muy precisamente, en defensa de ese interés general. Esta obligación-responsabilidad es, evidentemente, mucho más relevante en un momento como el que vivimos, con la pandemia de la Covid-19. Para ello, la propia Constitución, en lo que se conoce como Constitución Económica, es decir, el Título VII, dispone en su artículo 128, primer apartado, que “la riqueza del país en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general”.…  Seguir leyendo »

Los socialistas de todos los partidos tienen como objetivo último la “redistribución de la riqueza”. A esa misma meta le ponen diferentes nombres: “justicia social”, “justicia tributaria”, “equidad”, etc. En todos los casos, se trata de quitarle a unos para darle a otros. Pasan por alto que esa transferencia de riqueza solo puede hacerse desconociendo el derecho de propiedad y de forma violenta (entregas, vía impuestos, la parte de tu propiedad que te diga el Estado o vas a la cárcel).

Con ser dos omisiones enormes, hay otra aún más elemental. Los socialistas de todos los partidos piensan en la riqueza como algo dado, algo que está ahí, pase lo que pase, que solo es cuestión de “repartir” a su antojo.…  Seguir leyendo »

La pandemia de coronavirus ha tenido el efecto de un cataclismo en nuestra segura, pacífica y egoísta vida ordinaria. La incredulidad inicial ante el brutal efecto mariposa de lo ocurrido en la lejana China sobre nosotros, el acomodado occidente, ha dejado paso primero a la incertidumbre a medida que crecían las cifras de contagiados y de fallecidos, contra el optimismo inicial de los responsables de la sanidad, y luego al miedo, incluso la histeria, por el temor a algo desconocido que de manera tan drástica sacude nuestra vida.

Nos conmociona que las seguridades de nuestro organizado sistema de vida se tambaleen ante el embate de un enemigo inasible, insidioso e invisible contra el que carecemos de armas suficientes para luchar.…  Seguir leyendo »

Contemplo estos días con alarmante estupor como la Administración que nos debía proteger no ha tenido previsión de mascarillas, EPIS, test o medidas de contingencia ante la pandemia del Covid-19.

Mientras esto ocurría, y el caos se instalaba, miles y miles de sanitarios en toda España hacíamos frente común: reorganizábamos equipos, doblábamos turnos, preparábamos protocolos de actuación en tiempo récord y nos convertíamos en una piña para proteger y cuidar, con lo que teníamos a mano, a nuestros pacientes.

Y digo, con lo que teníamos a mano, porque ante la falta de protocolos unificados y equipos de protección, en cada ciudad y en cada hospital hemos hecho, a la carrera, lo que como profesionales creíamos que era más acertado.…  Seguir leyendo »

El pasado 15 de marzo Andrew Marr entrevistó en la BBC a la ministra de Asuntos Exteriores de Corea del Sur, Kang Kyung-wha. Esta mujer, que representa al país que a finales de enero fuera el segundo foco mundial de la Covid-19, contó cómo habían conseguido reducir drásticamente los contagios en pocos días y sin tener que cerrar grandes ciudades. Con aplomo y rechazando autocomplacencia, abogó por la transparencia y la colaboración internacional para combatir el virus que hoy asola al mundo entero. La reacción de elogio en redes no se hizo esperar: ¿no podríamos tener en préstamo por un tiempo a esta ministra para que liderara la crisis en nuestro país?…  Seguir leyendo »

El confinamiento de la población es una medida pseudo-fascista, tomada sin base racional ni científica, que provocará una hecatombe económica, afectiva y psíquica en la sociedad española. Las personas mayores quedaremos estigmatizadas ante los jóvenes que nos acusarán de haberles cerrado el paso al futuro.

En España, el 96,2% de fallecimientos por la Covid-19 se registran entre personas de más de 60 años. En el 3,8% de fallecidos, relativamente jóvenes, se observaron frecuentemente patologías. Las patologías previas disparan la letalidad de la Covid-19 incluso en jóvenes. Esta sospecha parece confirmarse al analizar los casos de fallecidos de más de 60 años.…  Seguir leyendo »

El camino de perdición de nuestro macro estado, deficientemente democrático desde 1977, desbordado por su propio tamaño y por la solicitud permanente de más recursos de los diecisiete mini Estados regionales, ha llegado a su límite.

La presente crisis sanitaria del Covid-19 y, su consecuencia, la inesperada recesión económica, han acelerado la velocidad de crucero de unas cuentas que no se sostienen. La realidad, los hechos, son tozudos. La propuesta podemita de más gasto en "prestaciones universales e incondicionales generosas" no es posible por la caída de ingresos vía impuestos y las asfixiantes cargas sociales a las empresas y a los autónomos.…  Seguir leyendo »

Una catástrofe global que era inevitable se ha convertido en una tragedia colectiva provocada por la ineptitud. En España, la crisis mundial del Covid-19 tiene una progresión desbocada que exige una interpretación. Cualquier análisis comparado nos lleva al factor decisivo: el retraso de dos semanas, al menos, para tomar las medidas imprescindibles. Los hospitales colapsados son el resultado.

Gernot Warner, un experto en el análisis de los datos del calentamiento global, demuestra esa relación entre el retraso en las medidas y la explosión de casos y muertes en países como Italia y España. Cuando los gobiernos actuaron con diligencia, el ritmo diario de crecimiento de contagiados detectados inicialmente ronda el 3%, pero, donde se retrasaron las decisiones semanas, como en España, el crecimiento ronda el 30% diario.…  Seguir leyendo »

Resulta ya casi proverbial la sagaz réplica que, en los 60, proporcionó el primer ministro británico MacMillan a una periodista. Cuando ésta le inquirió sobre lo que más temía, el gobernante conservador le respondió: «Los hechos, señorita, los hechos». No es el caso del doctor Sánchez, ¿supongo?, quien ha procedido a su olímpico desprecio a la hora de hacer frente a la pandemia del coronavirus, cuya manifiesta negligencia se ha traducido en que España sea el país del mundo con mayor porcentaje de víctimas en proporción a su población. Todo ello pese a gozar de uno de los mejores sistemas sanitarios mundiales y disponiendo de profesionales altamente cualificados que despliegan un esfuerzo titánico en estos días aciagos.…  Seguir leyendo »

La tormenta perfecta de autoritarismo

Marea roja es una película de 1995 cuyo argumento gira en torno al conflicto que estalla en un submarino atómico norteamericano entre el capitán de la nave y el segundo de a bordo, en el contexto de una crisis internacional que amenaza con desencadenar una guerra nuclear. Al poco de empezar la misión se produce un incendio en el submarino. Mientras los equipos de emergencia tratan de sofocar el fuego, el capitán pide al resto de la tripulación que realice unos ejercicios de combate. Su ayudante se desespera hasta el límite de la insubordinación ante lo que le parece una irresponsabilidad en una situación crítica.…  Seguir leyendo »

Es sabido que el Gobierno Sánchez-Iglesias se ha especializado desde que comenzó su andadura en la venta de mercancía política averiada, consignas superficiales y relatos ficticios difundidos en masa a través de su bien engrasada maquinaria de propaganda. La crisis del coronavirus lo ha llevado, sin embargo, al salto cualitativo que significa pasar de venderla a comprarla, en el sentido literal que demuestra el descomunal fiasco de los test chinos de detección rápida, un asombroso caso de incompetencia en el manejo de la gestión sanitaria. No pasa día sin que la práctica desnude la incapacidad del Ministerio de Sanidad pública para asumir el mando único al que le faculta la declaración del estado de alarma; un fracaso clamoroso que no puede encubrir la pesada cháchara con que el presidente trata de publicitar sus logros en reiteradas comparecencias televisadas o parlamentarias.…  Seguir leyendo »

Gobierno de Concentración o concentración de catástrofes

Este sábado todo ha empeorado mucho más porque Sánchez ha tomado decisiones de consecuencias tremendas, sin pactarlas ni con la oposición ni con los empresarios, ni plantearlas ante el Parlamento. Pero el debate sobre la prórroga del estado de alarma ya había sido, setenta y dos horas antes, el más deprimente de la historia de nuestra democracia.

No sólo por la visión semidesértica del hemiciclo -no hay nada tan antinatural como un parlamento vacío- o por las cifras dramáticas y rampantes de infectados, hospitalizados en condiciones precarias y cadáveres despojados de toda dignidad sobre los que tocaba debatir. Sino sobre todo por la falta de un horizonte de colaboración que permita representar en el plano de la política la imprescindible unidad de la Nación para hacer frente a las tragedias concatenadas que se nos avecinan.…  Seguir leyendo »