Molly Brown siempre a flote
Feliz año malo, feliz año duro, feliz año rudo... Son tan nefastas las expectativas con las que abrimos este último ejercicio de la primera década del siglo XXI que cada día que pase sin que se desmoronen espacios de libertad y dicha personal será un triunfo a la vez de la inteligencia y de la voluntad humana sobre la fatalidad de los feos augurios.
Pero este partido lo vamos a ganar los de Triunfópolis, por mucho que haya que remar contra la corriente. Se lo decimos quienes algo sabemos ya de lo que son las crisis, pues no en vano este periódico se ha forjado en la tribulación y ha llegado a ser lo que es en medio de las peores dificultades imaginables.… Seguir leyendo »