
Jaque mate al Poder Judicial
La Constitución de 1978 fue generosa y expresiva con el poder judicial. Semánticamente, iba a ser el único "poder del Estado" ("Del poder judicial"); su conexión con el pueblo y con el Rey ("La justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey"), no pudo ser más evidente.
La Justicia encarnaba, pues, la esperanza en el nuevo "Estado social y democrático de derecho" que, en 1978, "la Nación española" deseaba establecer "en uso de su soberanía". Así se proclamaba el deseo de "establecer la justicia, la libertad y la seguridad", que son considerados, en el artículo primero de la Carta Magna, junto con el "pluralismo político" como los "valores superiores del ordenamiento jurídico".… Seguir leyendo »